Misa en
Rito Hispano-Mozárabe
IN HEBDOMADA MAIORE
Feria V in Cena Domini
Annus secundus
SEMANA MAYOR
Jueves en la Cena del Señor
Año II (1)
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I - Ad Missam / Misa
Eo die ad Missam monendum erit signum
post horam nonam.
Ingressus celebrantis cum ministris fit sub silentio. Sacerdos altare
more veneratur et sedem petit ubi populum salutat dicens: |
Ese día, la campana
convocar� a Misa después de
la hora nona.
El celebrante junto con los ministros
entran en silencio. El sacerdote
venera el altar
como de costumbre y
saluda al pueblo
desde la sede diciendo: |
D�minus sit semper vobiscum.
Populus respondet:
Et cum spíritu tuo.
|
El Señor está siempre con
vosotros. El pueblo
responde:
Y con tu espíritu. |
LITURGIA VERBI
/ LITURGIA DE LA PALABRA
Omnes sedent, deinde lector
lectionem sapientialem (anno primo) vel
prophetiam (anno secundo) legit. |
Estando todos sentados, el
lector lee la lectura sapiencial
(año primero) o la
profecía
(año segundo). |
Prophetia
/ Profecía |
Annus secundus / Año II |
Zac 2,17-3,5;
11,7-14; 13,7-9 (2) |
Léctio libri Zacharíæ prophétæ.
R/. Deo
grátias. |
Lectura del libro del profeta
Zacarás.
R/. Demos
gracias a Dios. |
S�leat
omnis caro a f�cie Dómini, quia consurr�xit de habitáculo
sancto suo. Et osténdit mihi
Iesum
sacerdótem magnum stantem coram ángelo Dómini; et Satan
stabat a dextris eius, ut adversar�.ur ei.
Et dixit ángelus Dómini ad Satan:
��ncrepet Dóminus in te,
Satan. Et �ncrepet Dóminus in te, qui elégit Ierúsalem.
Numquid non iste torris est erátus de igne?».
Et Iesus erat indátus vestiméntis sórdidis
et stabat ante f�ciem ángeli. Qui respóndit et ait ad eos,
qui stabant coram se, dicens: «Auf�rte
vestiménta sórdida ab eo».
Et dixit ad eum: «Ecce,
óbstuli a te iniquitátem tuam; �nduam te mutat�riis».
Et posu�runt c�darim mundam super caput eius et indu�runt
eum v�stibus.
Et ass�mpsi mihi duas virgas: unam vocávi
Gr�tiam et �lteram vocávi Fun�culum; et pavi gregem. Et
succ�di tres pastóres in mense uno, et t�duit e�rum ánimam
meam; síquidem et ánimam e�rum t�duit mei. Et dixi:
«Non pascam vos; quæ
morit�ra est, moriátur; et, quæ succid�nda est, succid�tur;
et reléquæ d�vorent unaquóque carnem próximæ suæ. Et tuli virgam meam, quæ vocab�tur Gr�tia, et absc�di
eam, ut �rritum f�cerem f�dus meum, quod perc�ssi cum
ómnibus pópulis. Et �rritum factum est in die illa; et cognov�runt
mercatóres gregis, qui observ�bant me, quia verbum Dómini
est. Et dixi ad eos: «Si bonum est in
óculis vestris, aff�rte
merc´dem meam et, si non, qui�scite». Et append�runt
merc´dem meam trigónta siclos argánteos.
Et dixit Dóminus ad me:
«Pr�ice illud in thes�urum,
dec�rum pr�tium, quo appretiátus sum ab eis».
Et tuli trigónta siclos argánteos et proi�ci illos in domum
Dómini in thes�urum. Et præc�di virgam meam secóndam, quæ
appellab�tur Fun�culus, ut diss�lverem germanitátem inter
Iudam et Isr�l.
Fr�mea, suscit�re super pastórem meum et
super virum coh�r�ntem mihi, dicit Dóminus exercítuum.
Perc�te pastórem et dispergántur oves, et
conv�rtam manum meam contra párvulos.
Et erit in omni terra, dicit Dóminus:
partes duæ in ea dispergántur et defécient, et tértia pars
relinqu�tur in ea; et ducam tértiam partem per ignem et
purg�bo eos, sicut purg�tur argántum, et prob�bo eos, sicut
probátur �urum: ipse vocábit nomen meum, et ego exáudiam
eum.
Dicam: P�pulus meus est ille; et ipse
dicet: «Dóminus est Deus
meus».
R/. Amen. |
Que todo el mundo calle
ante el Señor, porque se levanta de su santa morada. Luego
el Señor me hizo ver a Josué, el sumo sacerdote, que estaba
delante del ángel del Señor, mientras que Sat�n estaba a la
derecha para acusarle.
El ángel del Señor dijo a Sat�n: «Que el Señor te
reprima, Sat�n; que el Señor, que eligió a Jerusalén, te
reprima. «No es éste como un tizón sacado del fuego?�.
Josué estaba vestido con ropas sucias y de pie delante
del ángel. El ángel tom� la palabra y dijo a los que estaban
delante: «Quitadle de
encima esas ropas sucias�.
después dijo a Josué: «Mira,
he quitado de encima de ti tus pecados y te he vestido con
vestidos preciosos�.
Y pusieron sobre su cabeza un turbante limpio y le
vistieron.
Tom� dos
cayados; a uno le puse por nombre Benevolencia y al otro le
llam�
Unión, y me puse a apacentar las ovejas. En un mes rechacæ
a tres
pastores. Llegué a asquearme de las ovejas, y tambión ellas
se
cansaron de mí. Y dije:
�No os apacentar� más; la que haya
de
morir muera, y la que haya de perecer perezca, y las que
queden que
se coman unas a otras�. después tom� el cayado
Benevolencia y lo romp�, para romper el pacto que el Señor
había
hecho con todos los pueblos. Y los tratantes que me
vigilaban
reconocieron que ésta era la palabra del Señor. después les dije:
�Si os parece bien, dadme mi salario; y
si no,
dejadlo�. Y me pagaron treinta monedas de plata.
Y el
Señor me dijo: �Echa al tesoro ese magnífico precio en que me
han
tasado�.
Yo tom� treinta monedas de plata y las ech� en el tesoro del
templo
del Señor. A continuación romp� el segundo cayado, Unión,
para romper la hermandad entre Judá e Israel.
Espada, despi�rtate contra mi pastor y contra el
hombre de mi compañía, palabra del Señor omnipotente.
Hiere al pastor y las ovejas se dispersará., yo volverá
mis manos aún contra los más débiles.
Entonces en todo el país -palabra del Señor- dos terceras
partes perecerén, y quedará la otra tercera parte.Y har�
pasar por el fuego a esta tercera parte: la purificar� como
se purifica la plata, y la probar� como se prueba el oro. Él
invocar� mi nombre, y yo le escuchar�.
Yo diró: «¡ste es mi pueblo», y Él diró: «El Señor es mi
Dios».
R/.
Amén. |
Psallendum
/ Salmo de meditación |
Annus secundus /
Año II |
Sal 108,1-8.17.21.25.30-31 (3) |
Deus
laudébilis mihi, ne tac�eris, quia os ímpii et os dol�si contra
me ap�rtum est. |
Oh
Dios de mi alabanza, no estás mudo, pues abren contra mí su boca
malvada y mentirosa. |
Pro eo quod eos
dilig�bam adversabántur mihi, ego autem or�bam pro eis. |
En pago de mi amistad me acusan, y
yo no hago más que orar. |
Et posu�runt
advérsum me mala pro bonis, et �dium pro dilectióne mea. |
Me devuelven mal por bien y odio
por amor. |
Const�tue super
eum ímpium, et Satan stet a dextris eius. |
Designa contra Él un hombre sin
entrañas, un duro acusador a su derecha. |
Cum iudic�tur �xeat
condemnátus, or�tio eius sit in peccátum. |
Cuando lo juzguen, que salga
condenado, que su propia defensa lo condene. |
Fiant dies eius
pauci et episcop�tum eius accípiat alter. |
Que su vida sea corta y otro ocupe
su cargo. |
Vidérunt me et
mov�runt cápita sua; �diuva me, Dómine, Deus meus. |
Al verme, menean la cabeza,
ay�dame, Señor, Dios mío. |
Persec�ti sunt
hóminem páuperem et médicum, et compónctum corde morti
tradid�runt. |
Porque yo soy un pobre desgraciado
y tengo dentro de mí el corazón deshecho. |
Tu autem, Dómine,
fac mecum propter nomen tuum, quia magna est misericórdia tua,
líbera me. |
Mas tú, Señor, obra en mi favor
por amor a tu nombre; Dios mío, por tu bondad y tu misericordia,
líbrame. |
Confit�bor Dómino
nimis in ore meo, in médio mult�rum laud�bo eum. |
Yo con mi boca daré gracias al
Señor, lo alabaré ante las multitudes. |
Quóniam �stitit a
dextris páuperum ut salvum f�ceret a persequ�ntibus ánimam meam. |
Porque Él se pone a la derecha del
pobre para salvarlo de los jueces. |
Apostolus
/ Apóstol |
Annus
secundus / Año II |
1Cor 11,23-32 |
Epístola Pauli
apóstoli ad Coránthios prima.
R/. Deo
grátias. |
Primera carta del Apóstol Pablo a
los corintios.
R/. Demos gracias a
Dios. |
Fratres:
Ego accípi a Dómino, quod et trádidi
vobis, quóniam Dóminus Iesus, in qua nocte tradebótur, accípit
panem et grátias agens fregit et dixit:
«Hoc est corpus meum, quod
pro vobis est; hoc fácite in meam commemoratiónem».
Simíliter et cálicem, postquam cenítum est, dicens:
«Hic calix novum testaméntum
est in meo sánguine; hoc fácite, quotiesc�mque bibítis, in meam
commemoratiónem».
Quotiesc�mque enim manducébitis panem hunc
et cálicem bibítis, mortem Dómini annuntiátis, donec véniat.
ítaque, quic�mque manducáverit panem vel bíberit cálicem Dómini
indígne, reus erit córporis et sánguinis Dómini.
Probet autem se�psum homo, et sic de pane
illo edat et de cálice bibat; qui enim mandícat et bibit,
iudícium sibi mandícat et bibit non diiúdicans corpus. ídeo
inter vos multi infírmi et imbec�lles et d�rmiunt multi. Quod si
nosmet�psos diiudicar�tus, non útique iudicar�.ur; dum iudic�mur
autem, a Dómino corr�pimur, ut non cum hoc mundo damn�mur.
R/. Amen. |
Hermanos:
Yo recibí del Señor lo que os he transmitido: Que Jesús, el
Señor, en la noche que fue entregado, tom� pan, dio gracias, lo
partió y dijo: «Esto es mi cuerpo, que se entrega por vosotros;
haced esto en memoria mía». después de cenar, hizo lo mismo con
el cáliz, diciendo: «Este cáliz es la nueva alianza sellada con
mi sangre; cada vez que la bebéis, hacedlo en memoria mía».
Pues siempre que com�is este pan y bebéis este cáliz
anuncióis la muerte del Señor hasta que vuelva. Por eso, el que
come del pan o bebe del cáliz del Señor indignamente será reo
del cuerpo y de la sangre del Señor.
Por tanto, examine cada uno su propia conciencia, y entonces
coma del pan y beba del cáliz. Porque el que come y bebe sin
considerar que se trata del cuerpo del Señor, come y bebe su
propia condenación. Por eso muchos de vosotros estáis enfermos y
débiles, y otros han muerto. Si nos examin�semos a nosotros
mismos, no serámos castigados. Y si el Señor nos castiga, es
para corregirnos y para que no seamos condenados con el mundo.
R/.
Amén. |
Evangelium
/ Evangelio |
Annus secundus / Año II |
Jn 13,1; Lc 23,3-6; 22,7-16; ... (4) |
�ncipit pássio
Dómini nostri Iesu Christi.
R/. Glória tibi
Dómine. |
Comienzo de la pasión
de nuestro Señor Jesucristo.
R/. Gloria a ti,
Señor. |
In illo témpore: Ante diem festum Pasch�,
sciens Iesus quia venit eius hora, ut tr�nseat ex hoc mundo ad
Patrem, cum dilexísset suos, qui erant in mundo, in finem
dil�xit eos.
Intr�vit autem S�tanas in Iudam, qui cognominab�tur
Iscari�th, unum de Duod�cim; et �biit et locútus est cum
princípibus sacerdótum et magistr�tibus quemídmodum illum
tráderet eis. Et gav�si sunt et pacti sunt pecániam illi dare.
Et spop�ndit et qu�r�bat opportunitátem, ut eis tráderet sine
turba.
Venit autem dies Azym�rum, in qua necísse erat occ�di Pascha.
Et misit Petrum et Ioánnem dicens:
�E�ntes pará.e nobis Pascha, ut manducámus».
At illi dixérunt ei: «Ubi vis
pará.us?».
Et dixit ad eos: «Ecce,
intr��ntibus vobis in civitætem, occúrret
vobis homo �mphoram aquæ portans; sequ�mini eum in domum, in quam intrat. Et
dic�tis patri fam�lias domus: «Dicit tibi
Magíster: Ubi est diversárium ubi Pascha cum discípulis meis
mandícem?». Ipse vobis osténdet
cenículum magnum stratum; ibi pará.e». E�ntes autem invenírunt,
sicut dixit illis, et parav�runt Pascha.
Et cum facta esset hora,
disc�buit, et apóstoli cum eo. Et ait illis: «Desidério
desiderávi hoc Pascha manducáre vobíscum, ántequam p�tiar. Dico
enim vobis: Non manducébo illud, donec imple�tur in regno Dei».
Cen�ntibus autem eis, accípit
Iesus panem et benedíxit ac fregit ded�tque discípulis suis et
ait: «Hoc est corpus meum, quod pro vobis datur. Hoc fácite in
meam commemoratiónem». Simíliter et cálicem, postquam cenívit,
accípit, grátias egit et dedit illis dicens: «B�bite ex hoc
omnes: hic est enim sanguis novi testaménti, qui pro multis
eff�nditur in remissión.m peccatórum. Dico autem vobis: Non
bibam �modo de hoc gen�mine vitis usque in diem illum, cum illud
bibam vobíscum novum in regno Patris mei�.
Iesus autem, sciens quia ómnia
dedit ei Pater in manus et quia a Deo ex�vit et ad Deum vadit,
surgit a cena et ponit vestiménta sua et, cum accepísset
l�nteum, præc�nxit se. De�nde mittit aquam in pelvem et cápit
lav�re pedes discipul�rum et ext�rgere l�nteo, quo
erat præc�nctus.
Venit ergo ad Sim�nem Petrum. Dicit ei: «Dómine, tu mihi
lavas pedes?».
Respóndit Iesus et dixit ei: «Quod
ergo f�cio, tu nescis modo, scies autem p�stea».
Dicit ei Petrus: «Non lav�bis
mihi pedes in ætérnum».
Respóndit Iesus ei: «Si non l�vero te, non habes partem
mecum».
Dicit ei Simon Petrus: «Dómine, non tantum pedes
meos, sed
et manus et caput�.
Dicit
ei Iesus. «Qui lotus est, non �ndiget nisi
ut pedes lavet, sed est mundus totus; et vos mundi
estis, sed non omnes». Sci�bat enim quisnam esset, qui tráderet eum; proptárea
dixit: «Non estis mundi omnes».
Postquam ergo lavit pedes e�rum et accípit
vestiménta sua, cum recubuísset iterum, dixit eis:
�Scitis quid f�cerim vobis?
Vos vocátis me "Magíster" et "Dómine", et bene d�citis: sum �tenim. Si ergo
ego lavi pedes vestros, Dóminus et Magíster, et vos debótis
alter altárius lav�re pedes. Exémplum enim dedi vobis, ut,
quemídmodum ego feci vobis, et vos faci�tis. Amen, amen dico
vobis: Non est servus maior dómino suo, neque apóstolus maior
eo, qui misit illum. Si hæc scitis beáti estis, si f�citis ea.
Non de ómnibus vobis dico, ego scio quos eleg�rim, sed ut
imple�tur Script�ra: Qui mandícat mecum panem, lev�vit contra me
calc�neum suum».
Cum hæc dixísset, turbátus est spíritu et protestátus est
et dixit: «Amen, amen
dico vobis: Unus ex vobis tradet me».
Fílius quidem hóminis vadit, sicut scriptum est de eo. Væ autem
hómini illi, per quem Fílius hóminis tráditur. Bonum est ei, si
non esset natus homo ille».
Aspici�bant ad ínvicem discípuli, h�sit�ntes de quo
d�ceret. Erat rec�mbens unus ex discípulis eius in sinu Iesu, quem dilig�bat
Iesus. �nnuit ergo huic Simon Petrus, ut interrog�ret:
�Quis est, de quo dicit?».
Cum ergo rec�mberet ille ita supra pectus Iesu, dicit ei:
«Dómine, quis est?».
Respóndet Iesus: «Ille est, cui ego int�nctam
buc�llam porr�xero».
Cum ergo intinxísset buc�llam, dat Iudé Sim�nis Iscari�tis. Et post buc�llam
tunc
introívit in illum S�tanas.
Ait autem Dóminus: «Simon,
Simon, ecce S�tanas expet�vit vos, ut crib�ret sicut tr�ticum;
ego autem rog�vi pro tem ut non deféciat fides tua. Et tu,
aliquándo convérsus conf�rma fratres tuos».
Et hymno dicto, exi�runt in
montem Oliv�ti. Tunc dicit
illis Iesus: «Omnes vos sc�ndalum pati�mini in me
in ista nocte. Scriptum est enim: «Perc�tiam pastórem et dispergántur oves gregis.
Postquam autem resurréxero, præc�dam vos in Galiléam».
Respóndens autem Petrus ait
illi: «Et si omnes scandaliz�ti fúerint in
te, ego numquam scandaliz�bor�.
Ait illi Jesus: «Amen dico tibi: In hac
nocte, ántequam gallus cantet, ter me neg�bis».
Ait illi Petrus: «�tiam si oport�erit me mori
tecum, non te neg�bo». Simíliter et omnes discípuli dixérunt.
Tunc venit Iesus cum illis in pr�dium, quod
d�citur Geths�mani. Et dicit discípulis: «Sed�te hic, donec vadam illuc et
orem». Et assúmpto Petro et du�bus fíliis Zebed�i, cápit contrist�ri et m�stus
esse. Tunc ait illis: «Tristis est ánima mea valde, tristis est usque ad mortem;
sustin�te hic et vigil�te mecum».
Et progréssus pus�llum, pr�cidit in f�ciem
suam orans et dicens: «Pater mi, si possíbile est, tr�nseat a me calix iste;
ver�mtamen non sicut ego volo, sed sicut tuæ.
Appáruit autem illi ángelus de cœlo
conf�rtans eum. Et factus in agonía prol�xius or�bat. Et factus est sudor eius
sicut guttæ sánguinis decurr�ntis in terram. Et cum surrexísset ab oratióne et
venísset ad discípulos, invénit eos dormión.es pr� trist�tia.
Et ait Petro: «Sic non potuæstis una hora
vigil�re mecum? Vigil�te et or�te, ut non intr�tis in tentatiónem; spíritus
quidem promptus est, caro autem infírma».
éterum secóndo �biit et or�vit dicens: «Pater mi,
si non potest hoc trans�re, nisi bibam
illud, fiat volóntas tua». Et venit éterum
et invénit eos dormión.es: erant enim óculi e�rum grav�ti. Et reléctis illis,
éterum �biit et or�vit tértio, e�ndem sermónem éterum dicens. Tunc venit ad
discípulos suos et dicit illis: «Dorm�te iam et
requiéscite; ecce appropinqu�vit hora; et Fílius hóminis tráditur in manus
peccatórum. S�rgite, e�mus; ecce appropinqu�vit, qui me tradit�.
Et adhuc ipso loqu�nte, ecce Iudas, unus de Du�decim, venit et cum eo
turba multa cum gládiis et f�stibus, missi a princípibus sacerdótum et
senióribus pópuli. Qui autem trádidit eum, dedit illis signum dicens:
�Quemc�mque osculátus fúero, ipse est; ten�te eum».
Et conf�stim acc�dens ad Iesum dixit: «Ave, Rabbiæ et osculátus est eum.
Iesum autem dixit ei: «Iuda, ósculo Fílium
hóminis tradis?».
Tunc Iesus, sciens ómnia, quæ ventúra erant
super eum, proc�ssit et dicit eis: «Quem quæritis?».
Respond�runt ei: «Iesum Nazarénum».
Dicit eis: «Ego sum». Stabat autem et Iudas, qui trad�bat eum, cum
ipsis. Ut ergo dixit eis: «Ego sum», abi�runt
retr�rsum et cecid�runt in terram.
éterum ergo eos interrog�vit: «Quem
quæritis?».
Illi autem dixérunt:
�Iesum Nazarénum».
Respóndit Iesus: «Dixi vobis: Ego sum. Si
ergo me quæritis, s�nite hos ab�re», ut impler�tur sermo, quem dixit: «Quos dedísti mihi,
non pérdidi ex ipsis quemquam».
Simon ergo Petrus, habens gládium, ed�xit eum et perc�ssit pontíficis servum et
absc�dit eius aurículam dextram.
Dixit ergo Iesus Petro: «Mitte gládium in vagónam. Omnes enim, qui
acc�perint gládium, gládio perúbunt.
C�licem, quem dedit mihi Pater, non bibam illum? An putas quia non possum rog�re Patrem meum, et exhib�bit mihi modo plus quam
du�decim legiónis angelórum? Quómodo ergo implebántur Script�r� quia sic
opórtet fúeri?».
Et cum tetigísset aurículam eius, san�vit eum.
Dixit autem Iesus turbis: «Quasi ad latrónem
ex�stis cum gládiis et f�stibus? Cum cotídie vobíscum fúerim in templo, non
extend�stis manus in me; sed hæc est hora vestra et pot�stas tenebrárum». Tunc
discípulis omnes, relécto eo, fug�runt.
Illi autem ten�ntes Iesum duxérunt eum
vinctum ad Cáipham príncipem sacerdótum, qui erat póntifex anni illíus. Erat
autem Cáiphas, qui consílium déderat Iudéis: «�xpedit unum hóminem mori pro
pópulo».
Petrus autem sequebátur eum a longe usque in
aulam príncipis sacerdótum; et ingréssus intro sedébat cum minístris, ut vidéret
finem.
Príncipes autem sacerdótum et omne conc�lium
qu�r�bant falsum testimónium contra Iesum, ut eum morti tráderent, et non
invenírunt. Novíssime autem venión.es duo dixérunt: «Hic dixit: "Possum
destru�re templum Dei et post tr�duum ædificáre illud"�.
Et surgens princeps sacerdótum ait illi:
�Nihil respóndes? Quid isti advérsum te testific�ntur?» Iesus autem tac�bat. Et
princeps sacerdótum ait illi: «Adi�ro
te per Deum vivum, ut dicas nobis, si tu es Christus Fílius Dei?».
Dicit illi Iesus: «Tu dix�sti. Ver�mtamen
dico vobis: «modo vidébitis Fílium hóminis sedántem a dextris Virtátis et
venión.em in n�bibus c�li�.
Tunc princeps sacerdótum scidit vestiménta sua dicens:
�Blasphem�vit. Quid adhuc eg�mus t�stibus? Ecce
nunc aud�stis blasph�miam. Quid vobis vidétur?» Illi autem respondóntes
dixerunt: «Reus est
mortis».
Tunc exspu�runt in f�ciem eius, et c�laphis eum cecid�runt; �lii autem
palmas in f�ciem ei ded�runt dicéntes: «Prophetæza
nobis, Christe: Quis est qui te perc�ssit?».
Petrus vero sedébat foris in �trio; et
acc�ssit ad eum una anc�lla dicens: «Et cum Iesu Galiléo eras».
At ille neg�vit coram ómnibus dicens: «Néscio
quid dicis».
Exe�nte autem illo ad ión.am, vidit eum �lia
et ait his, qui eran ibi: «Hic erat cum Iesu Nazaréno».
Et éterum neg�vit cum iur�mento: «Non novi
hóminem».
Post pus�llum autem access�runt, qui stabant
et dixérunt Petro: «Vere et tu ex illis es, nam et loqu�la tua manif�stum te
facit�.
Tunc cápit detestári et iuráre: «Non novi
hóminem». Et conténuo gallus cantúvit. Et recordátus est Petrus verbi Iesu, quod
dúxerat: «Pri�squam gallus cantet, ter me neg�bis». Et egréssus foras plor�vit
amóre.
R/. Amen.
|
En
aquel tiempo: Antes de la fiesta de la Pascua, sabiendo que le
había llegado la hora de pasar de este mundo al Padre, Jesús,
que había amado a los suyos que estaban en el mundo, los am�
hasta el fin.
Satanás entró en Judas, el llamado Iscariote, que era uno de
los doce. Y fue a hablar con los sumos sacerdotes y con los
jefes militares sobre la manera de entreg�rselo. Ellos se
alegraron y se comprometieron a darle dinero. Judas acept� la
propuesta, y buscaba la ocasión de entregarlo sin que la gente
se enterara.
Llegó el día de los panes sin levadura, cuando había que
sacrificar el cordero pascual, y Jesús envió a Pedro y a Juan,
diciendo: «Id y preparad la cena de la Pascua».
Ellos le dijeron: «¿Dónde quieres que la preparemos?».
Él les dijo: «Al entrar en la ciudad, encontraréis un hombre
que lleva un cántaro de agua; seguidlo hasta la casa donde
entre, y dir�is al dueño de la casa: El maestro manda decirte:
¿Dónde está la sala en la que voy a comer con mis discípulos la
cena de la Pascua? Él os mostrar� en el piso de arriba una
habitación grande y alfombrada; preparadla allí».
Fueron y encontraron todo como les había dicho, y prepararon
la cena de la Pascua. A la hora determinada se puso a la mesa
con sus discípulos. Y les dijo: «He deseado vivamente comer esta
Pascua con vosotros antes de mi pasión. Os digo que ya no la
comer� hasta que se cumpla en el reino de Dios».
Durante la cena Jesús tom� pan, lo bendijo, lo partió y lo
dio a sus discípulos, diciendo: «Esto es mi cuerpo, que es
entregado por vosotros; haced esto en recuerdo mío». Y de la
misma manera, después de la cena tom� un cáliz, dio gracias y se
lo dio, diciendo: «Bebed todos de Él, porque ésta es mi sangre,
la sangre de la nueva alianza, que será derramada por muchos
para remisión de los pecados. Os digo que ya no beber� más de
este fruto de la vid hasta el día en que beba con vosotros un
vino nuevo en el reino de mi Padre».
Jesús, sabiendo que el Padre había puesto en sus manos todas
las cosas, que había salido de Dios y que a Dios volvía, se
levant� de la mesa, se quit� el manto, tom� una toalla y se la
ci��. Luego ech� agua en un barreño y comenzó a lavar los pies
de sus discípulos y a enjug�rselos con la toalla que se había
ceñido.
Al llegar a Simón Pedro, éste le dijo: «Señor, ¿tú lavarme a
mí los pies?».
Jesús le respondió: «Lo que yo hago ahora tú no lo entiendes;
lo entenderás más tarde».
Pedro dijo: «Jam�s me lavar�. los pies».
Jesús le replicó: «Si no te lavo, no tendrás parte conmigo».
Simón Pedro dijo: «Señor, no sólo los pies, sino tambión las
manos y la cabeza».
Jesús le dijo: «El que se ha bañado no necesita lavarse más
que los pies, pues está completamente limpio; y vosotros estáis
limpios, aunque no todos». Jesús sabía muy bien quién iba a
traicionarlo; por eso dijo: «No todos estáis limpios».
Después de lavarles los pies, se puso el manto, se sentó de
nuevo a la mesa y les dijo: «�Entend�is lo que os he hecho?
Vosotros me llam�is el maestro y el señor; y dec�s bien, porque
lo soy. Pues si yo, el señor y el maestro, os he lavado los
pies, tambión vosotros os los debóis lavar unos a otros. Yo os
he dado ejemplo, para que hagáis vosotros lo mismo que he hecho
yo. Os aseguro que el criado no es más que su amo, ni el enviado
más que quien lo envía. Si sabéis esto y lo ponéis en práctica,
seréis dichosos. No hablo de vosotros. Yo s� muy bien a quién.s
he elegido; pero debe cumplirse la Escritura: El que come
conmigo se ha vuelto contra mí».
Al decir esto, se sintió profundamente conmovido y dijo: «Os
aseguro que uno de vosotros me entregará. El hijo del hombre se
va, según está escrito de él; pero ¡ay de aquel por quien el
hijo del hombre es entregado! «Mejor le fuera no haber nacido!�
Los discípulos se miraban unos a otros, pues no sabían de
quién hablaba. Uno de los discípulos, el preferido de Jesús,
estaba junto a Jesús. Simón Pedro le hizo señas para que le
preguntara a quién se referáa.
Entonces Él, recostándose en el pecho de Jesús, le preguntó:
«Señor, ¿quión es?».
Y Jesús respondió: «Aquel a quien yo dé un trozo de pan
mojado».
Moj� el pan y se lo dio a Judas, el de Simón Iscariote. Y
tras el bocado entró en Él Satanás.
Dijo entonces el Señor: «Simón, Simón, mira que Satanás ha
pedido poder cribaros como el trigo, pero yo he rogado por ti
para que no desfallezca tu fe. Y tú, cuando te arrepientas,
confirma a tus hermanos».
Después de haber cantado los himnos, salieron hacia el monte
de los Olivos. Jesús les dijo: «Yo seré para vosotros esta noche
ocasión de caída, pues así lo dice la Escritura: Heriré al
pastor y se dispersará. las ovejas del rebaño. Pero después
resucitar� e ir� delante de vosotros a Galilea».
Pedro le dijo: «Aunque fueras para todos ocasión de caída,
para mí no».
Jesús le dijo: «Te aseguro que esta misma noche, antes que el
gallo cante, me negará. tres veces».
Pedro le dijo: «Aunque tenga que morir contigo, jamás te
negará. Y lo mismo dijeron todos los demás.
Jesús fue con ellos a un huerto llamado Getseman�, y dijo a
los discípulos: «Quedaos aquí mientras voy más allí a orar�. Se
llevó consigo a Pedro y a los dos hijos de Zebedeo; y comenzó a
sentir tristeza y angustia. Y les dijo: «Me muero de tristeza.
Quedaos aquí y velad conmigo».
Avanzó unos pasos más, cayá de bruces y se puso a orar así:
«Padre mío, si es posible, que pase de mí este cáliz; pero no
sea lo que yo quiero, sino lo que quieres t��.
Y se le apareció un ángel del cielo reconfortándolo. Entró en
agonía, y oraba más intensamente; sudaba como gotas de sangre,
que corrían por el suelo. Se levant� de la oración, fue a sus
discípulos y los encontr� dormidos por la tristeza.
Y dijo a Pedro: «�Conque no habéis podido velar una hora
conmigo? Velad y orad para que no caigáis en tentación. El
espíritu está dispuesto, pero la carne es débil�.
De nuevo, por segunda vez, se fue a orar, diciendo: «Padre
mío, si no es posible que este cáliz pase sin que yo lo beba,
h�gase tu voluntad�. Volvió y los encontr� dormidos, vencidos
por el sueño. Los dej� y volvió a orar de nuevo, por tercera
vez, repitiendo las mismas palabras. después fue a los
discípulos y les dijo: «¡Dormid ahora y descansad! Ya llega la
hora, y el hijo del hombre va a ser entregado en manos de los
pecadores. Levantaos, vamos. El que me entrega llega ya».
Aún estaba hablando, cuando llegó Judas, uno de los doce, y
con Él un gran tropel de gente con espadas y palos, enviados por
los sumos sacerdotes y los ancianos del pueblo. El traidor les
había dado esta señal: «Al que yo bese, �se es; prendedle». Se
acercó a Jesús y le saludó: «¡Hola, maestro!», y lo besó.
Jesús le dijo: «Judas, ?con un beso entregas al hijo del
hombre?».
Y Jesús, que sabía todo lo que iba a sucederle, salió y les
dijo: «�A quién buscáis?».
Respondieron: «A Jesús Nazareno».
Jesús les dijo: «Yo soy». Judas, el traidor, estaba tambión
con ellos. Así que les dijo «Yo soy», retrocedieron y cayeron en
tierra.
De nuevo les preguntó: «¿A quién buscáis?».
Ellos dijeron: «A Jesús Nazareno».
Jesús respondió: «Os he dicho que yo soy. Si me buscáis a mí,
dejad que éos se vayan». Para que se cumpliera la palabra que
había dicho: «No he perdido ninguno de los que me confiaste».
Entonces Simón Pedro, que tenía una espada, la sacó, dio un
golpe al criado del sumo sacerdote y le cort� la oreja derecha.
Jesús dijo a Pedro: «Mete la espada en la vaina. Que todos
los que manejan espada a espada morirán. «Es que no tengo que
beber el cáliz que me da el Padre? ¿O crees que no puedo pedir ayuda a mi Padre, que me
mandar�. ahora mismo más de doce legiones de ángeles? Pero �cómo
se cumplirían entonces las Escrituras, según las cuales tiene
que suceder así?».
Y tocando la oreja lo curí.
Y dijo a los que habían venido a prenderlo: «Habéis venido a
prenderme como a un ladrón, con espadas y palos. Todos los días
estaba con vosotros en el templo, y no me echasteis mano; pero
ésta es vuestra hora y el poder de las tinieblas». Entonces todos los discípulos lo abandonaron y huyeron.
Los que prendieron a Jesús lo llevaron a casa de Caifás, que
ra el sumo sacerdote aquel año. Caifás era el que había
asegurado a los judíos: «Conviene que muera un hombre por el
pueblo».
Pedro lo había seguido de lejos hasta el palacio del sumo
sacerdote; entró y se sentó con los criados para ver el fin.
Los sumos sacerdotes y el tribunal supremo en pleno buscaban
un falso testimonio contra Jesús para condenarle a muerte, pero
no lo encontraron. Al fin llegaron dos que dijeron: «�ste dijo:
"Puedo derribar el templo de Dios y en tres días reedificarlo"�.
El sumo sacerdote se levant� y le dijo: «?No respondes nada a
lo que éos atestiguan contra ti?». Pero Jesús permaneció
callado. El sumo sacerdote le dijo: «¡Te conjuro por Dios vivo
que nos digas si tú eres el mesías, el hijo de Dios!».
Jesús contestó: «Tú lo has dicho. Y os declaro que desde
ahora veréis al hijo del hombre sentado a la diestra del Padre y
venir sobre las nubes del cielo».
Entonces el sumo sacerdote se rasgó las vestiduras y dijo:
��Ha blasfemado! ¿qué necesidad tenemos ya de testigos? Habéis
oído la blasfemia. ¿qué os parece?». Ellos respondieron: «?Que
es reo de muerte!».
Lo escupieron en la cara y le dieron bofetadas y puñetazos,
mientras le decían: «Adivina, mesías, quién te dio».
Pedro estaba fuera sentado en el atrio. Se le acercó una
criada y le dijo: «Tú tambión estabas con Jesús, el galileo».
Pero Él lo negó delante de todos, diciendo: «No sé lo que
dices».
Al salir hacia el portal, lo vio otra criada, y dijo a los
que estaban allí: «�ste estaba con Jesús el Nazareno».
Y Él de nuevo lo negó con juramento: «No conozco a ese
hombre».
Al poco tiempo se acercaron a Pedro los que estaban allí y le
dijeron: «Seguro que tú tambión eres de ellos, pues tu misma
habla te descubre».
Entonces Él comenzó a jurar y perjurar: «No conozco a ese
hombre». Y en aquel instante cantú el gallo. Entonces Pedro
recordó que Jesús le había dicho: «Antes de que cante el gallo
me negará. tres veces». Y saliendo fuera, se ech� a llorar
amargamente.
R/.
Amén. |
Præsidens homiliam pronuntiat;
qua finita,
Laudes
canuntur omnibus stantibus. |
El que preside pronuncia la
homilía, a cuyo término, estando todos de pie, se cantan los
Laudes. |
Laudes |
Annus secundus /
Año II |
Sal 42,5; 40,10 (5) |
Quare
tristis es, ánima mea, et quare cont�rbas me? |
�Por
qué te afliges, alma mía, por qué te quejas? |
V/.
Homo pacis meæ, in quo sperúvi, ampli�vit advérsum me
supplantatiónem. |
V/. Hasta mi amigo íntimo, en quien yo confiaba, ha
levantado contra mí su calcañar. |
R/.
Et quare cont�rbas me? |
R/. ¿Por qué te quejas? |
Omnes sedent et, dum fideles afferunt
dona celebrantem, chorus incipit canere
Sacrificium. |
Todos se sientan
y, cuando los fieles presentan las
ofrendas,
el coro empieza a cantar el Sacrificium. |
Sacrificium
/ Canto del Ofertorio |
Annus
secundus / Año
II |
Éx 24,4-5; 19,9-11.14-19 (6) |
�dific�vit Móyses
altáre sub monte ex du�decim lap�dibus, et misit de fíliis
Ísrael, et obtulérunt holocaust�mata, et immolav�runt hóstias
pacíficas Deo. |
Mois�s edificó un
altar al pie de la montaña y doce estelas por las doce tribus de
Israel y mandí ofrecer holocaustos como sacrificios de
reconciliación en honor del Señor. |
V/. Locátus est
Móyses ad pópulum dicens:
Sanctificámini, et estáte pará.i per tr�duum.
Die autem tértia mane factæ sunt voces, f�lgura et nubes obscúr�
super montem Sina; vox tub� incr�puit v�lide; contr�muit omnis
pópulus; et ed�xit eos Móyses óbviam Deo, et astit�runt sub
monte.
Mons autem Sina fum�bat totus propter quod descendísset Deus
super eum in igne.
Móyses loquebátur et Deus respondébat ei.
Mirátus est autem omnis pópulus.
R/. Et
immolav�runt hóstias pacíficas Deo. |
V/. Moisés dijo al
pueblo:
Estad preparados para pasado mañana.
Al tercer día, a eso del amanecer, hubo truenos y relámpagos,
una espesa nube sobre la montaña y un sonido muy fuerte de
trompeta; todo el pueblo, que estaba en el campamento, temblaba.
Moisés hizo salir al pueblo del campamento al encuentro de Dios,
y se detuvieron al pie de la montaña.
Toda la montaña del Sinaí humeaba, porque sobre ella había
descendido el Señor en medio de fuego.
Moisés hablaba, y Dios le respondía.
Y todo el pueblo quedó admirado.
R/. Y mandí
ofrecer sacrificios de reconciliación en honor del Señor. |
Oratio Admonitionis
/ Monición
sacerdotal |
Dilig�mus et sequ�mur, fratres caríssimi, iustítiam
sempitérnam, manducáre cupión.es Domúnicam cenam.
Venión.e
enim patrefamil�as, in exterióres ténebras reprobátus
convíva proi�citur, et sine nupti�li veste rep�rtus
damn�tur.
Nemo pravis cogitatiónebus sordidátus advéniat;
nemo sacraménta simul�tor accípiat.
Imit�mur p�tius
patióneiam Salvatóris, a quo sic vidémus toler�tam esse
fraudul�ntiam tradit�ris, ut malígna cogit�ntem, rerum
ómnium pr�scius Dóminus Iesus Christus secum ceníre
perm�tteret, ne sanctificáto pane fraud�ret.
Imit�mur eius
humilitátem, qui discipul�rum pedes humíliter lavit; imit�mur bonitátem eius, qui negánti Petro fructuæsas
l�crymas don�vit.
Cave�mus inquiétos fratres corporíliter
declin�re, et caritátem humilitat�mque
ómnibus delect�mur simplíciter exh�bere.
Sacrifícium
pœniténtiæ ieiun�ntes orant�sque solv�mus, ut sec�ri semper
ad cæléste convívium festin�mus.
R/. Amen.
|
Amemos, hermanos amadísimos,
procuremos buscar la santidad indefectible, si deseamos
comer la Cena del Señor.
Porque al llegar el padre de familia, arroja al réprobo
fuera del convite a las tinieblas exteriores, y condena al
que encuentra sin vestido nupcial.
Que nadie reciba hipócritamente los sacramentos celestiales;
imitemos, más bien, la paciencia del Salvador, del que vemos
como soporta los engaños del traidor hasta permitirle cenar
con Él, y aunque sabía Cristo Jesús, conocedor de todas las
cosas, su perversa trama, no le negó el pan santificado.
Imitemos su humildad al lavar humildemente los pies de sus
discípulos. Imitemos su bondad que a Pedro que le negó, le
concedió las lágrimas del arrepentimiento.
Cuidemos de no contaminarnos con la compañía de los hermanos
rebeldes, pero gustemos de ejercer con sencillez la caridad
y la humildad con todos.
[...]
R/. Amén. |
Adiuv�nte eius
misericórdia, qui regnat in Trinitáte unus Deus et p�rmanet
in sæcula
sæculórum.
R/. Amen.
|
Con la ayuda de la clemencia divina, del
único Dios que en la Trinidad vive y reina por los siglos de
los siglos.
R/. Amén. |
Alia / Oración entre los
Dípticos |
Occurr�ntes, Dómine, cum c�tu totíus
pópuli, ut sollémne
Pasch� celebrámus inítium, nos propitiátus att�nde;
supplic�ntes humíliter et oróntes, ut qui ab huius mundi
opéribus fatig�ti et córporis amíctu sordóntes ad tuam
sacratíssimam convénimus cenam, expurg�tos nos ab omni cibo
malítiæ in novam conv�rte pros�piem; ut cum tua grátia, et
victu terróno et cælésti pane mere�mur in tuo salutári
convívio.
R/. Amen.
|
Reunidos,
Señor, en asamblea con tu pueblo para celebrar el comienzo
de la Pascua solemne, escúchanos clemente; nosotros te
pedimos y suplicamos humildemente que para acercarnos a tu
santísima Cena, fatigados por los quehaceres mundanos, y
manchados en nuestro cuerpo, nos transformes en familia
nueva, purificándonos de todo alimento de maldad, para que,
fortalecidos con tu gracia, con el alimento terreno y con el
pan celestial, merezcamos llegar a saciarnos en tu banquete
eterno.
R/. Amén. |
Te præstánte, summe Deus,
qui in Trinitáte glori�ris in sæcula sæculórum.
R/. Amen.
|
Concédenoslo, Dios altísimo, glorioso en la
Trinidad, por los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Post Nomina
/ Oración
después de los Dípticos |
Pietátis tuæ, Christe Dómine, rogámus cleméntiam, ut hæc ad
altáre tuum nómina recitáta liber vitæ conténeat; fi�tque
hoc cení tuæ sacrifícium defúnctis ad r�quiem et viv�ntibus
ad salútem.
R/. Amen.
|
Cristo,
Señor, rogamos a tu clemencia y bondad que los nombres que
acabamos de recitar ante tu altar están escritos en el libro
de la vida, y que el sacrificio de esta santa cena
sirva para el descanso de los difuntos y para la salvación
de los que aún vivimos.
R/. Amén. |
Quia tu es vita vivórum,
sánitas infirmórum ac r�quies ómnium fidélium defunctórum in
ætérna sæcula sæculórum.
R/. Amen.
|
Porque tú eres la vida de los que viven, la
salud de los enfermos, y el descanso de todos los fieles
difuntos por todos los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Ad Pacem
/ Oración
de la Paz |
Pax nostra, omnípotens Christe, sinc�re nobis
�sculum pacis attr�bue, ut non cum Iuda prodit�re rei, sed
tuæ mere�mur pacis habéri discípuli.
R/. Amen.
|
Cristo omnipotente, paz
nuestra, danos el beso de la paz sincera para que no seamos
cómplices con Judas el traidor, sino que nos contemos entre
los discípulos de tu paz.
R/. Amén. |
Per te, Iesu Christe, quia tu es vera pax nostra et cáritas
indisrúpta, vivis tecum et regnas cum Spíritu Sancto, unus
Deus, in sæcula sæculórum.
R/. Amen.
|
Por ti,
Jesucristo, porque tú eres
nuestra paz verdadera, caridad indivisible; tú, que vives
contigo mismo y reinas con el Espíritu Santo, un solo Dios,
por los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Illatio / Acción de
gracias |
Dignum
et iustum est nos tibi, Dómine, sancte Pater, ætérne
omnípotens Deus,
grátias ágere, et Iesu Christo Fílio tuo.
Cuius nos
humánitas cólligit, humílitas �rigit, trad�tio absólvit, pœna
redímit, crux salvíficat, sanguis em�culat, caro sagúnat.
Qui se�psum pro nobis hódie trádidit, et culpæ nostræ
víncula relax�vit.
Qui ad commend�ndam fidélibus bonitátis
suæ humilitat�sque munific�ntiam, étiam tradit�ris sui non
dedignátus est pedes abl�ere cuius iam manus prævid�bat in
sc�lere.
Sed quid mirum, si dum ministérium formæ serv�lis
volunt�rie morti vic�nus ad�mplet, pósuit vestiménta sua,
qui cum in forma Dei esset, semet�psum exinan�vit?
Quid
mirum si præc�nxit se l�nteo, qui formam servi accípiens,
hábitu est invéntus ut homo?
Quid mirum, si misit aquam in
pelvem, unde lav�ret pedes discipul�rum, qui in terra
sánguinem suum fudit, quo immundítias dil�eret peccatórum?
Quid mirum, si l�nteo, quo erat præc�nctus, pedes quos l�verat
tersit, qui carne qua erat indátus evangelist�rum vestágia
confirm�vit?
Et l�nteo quidem ut se præc�ngeret, pósuit
vestiménta quæ habíbat; ut autem formam servi acc�peret
quando semet�psum exinan�vit, non quod habíbat depósuit, sed
quod non habíbat accípit.
Crucifig�ndus sane suis expoliátus
est vestiméntis, et mórtuus involátus est l�nteis.
Et tota
illa eius pássio credéntium est facta purg�tio.
Pass�rus
ígitur ex�tia, præm�sit obséquia, non solum eis pro quibus
subit�rus vénerat mortem, sed étiam illi qui fúerat eum
tradit�rus ad mortem.
Tanta quippe est humánæ humilitátis
ut�litas ut eam suo commend�ret exémplo divína sublímitas.
Quia homo supérbus in ætérnum perúret, nisi illum Deus
h�milis inveníret; ut qui perúerat supérbia decept�ris,
servar�.ur humilitáte piíssimi Redempt�ris.
Cui mérito omnes
ángeli et Archángeli non cessant clamóre cotídie una voce
dicéntes: |
Es justo y
digno que te demos gracias a ti, Señor, Padre Santo, eterno
y omnipotente, y a Jesucristo tu Hijo, cuya humanidad nos
reúne, su humildad nos eleva, su entrega nos libera, su pena
nos redime, su cruz nos vivifica, su sangre nos limpia, su
carne nos alimenta.
Él se entrega hoy por nosotros, y desata las cadenas de
nuestros pecados.
Él, para manifestar a los suyos la grandeza de su bondad
y humanidad, no tuvo a menos el lavar los pies incluso del
que le había de entregar, aunque ya veña manchadas sus manos
con el crimen.
Pero ¿por qué admirarnos de que al cumplir este humilde
ministerio, en Vísperas de su muerte, se despojara de sus
vestiduras, cuando siendo Dios, se humill� a sí mismo?
¿Por qué admirarnos si se ci�� la toalla, cuando al tomar
forma de siervo, se revistió de hombre?
¿Por qué admirarnos de que echara agua en la jofaina para
lavar los pies de sus discípulos, el que derram� su sangre
en la tierra para limpiar las manchas de los pecados?
¿Por qué admirarnos de que limpiara, con la toalla con la
que se ciñó, los pies que había lavado, si con la carne con
que se revistió confirm� los pasos de los predicadores del
Evangelio?
Y ciertamente que para ceñirse la toalla se quit� su
vestidura; pero al recibir la forma de siervo, cuando se
humill� a sí mismo, no se despoj� de la que tenía, sino que
recibió la que no tenía.
Al ser crucificado fue ciertamente despojado de sus
vestiduras y muerto, fue envuelto en sábanas y toda su
pasión vino a ser expiación por todos los que creen en Él.
Antes de padecer, nos adelant� sus dones. No sólo por
aquellos por los que venía a padecer la muerte, sino tambión
por aquel que le iba a entregar.
Tan grande es el valor de la humildad humana, que su
divina grandeza nos la recomend� con su ejemplo; ya que el
hombre en su soberbia caminaba a la ruina eterna, sino le
hubiera socorrido Dios hecho humilde.
Para que el que había perecido por la soberbia del seductor,
fuese salvado por la humildad del piadosísimo Redentor.
A quien con toda razón, todos los ángeles y Arcángeles no
cesan de alabar cada día, diciendo a una voz: |
Post Sanctus / Oración
después del Sanctus |
Vere sanctus, vere benedíctus
Dóminus noster Iesus Christus, qui tráditus ac mórtuus est
propter peccáta nostra, et resurréxit propter iustificatiónem
nostram. Christus Dóminus ac Redémptor ætérnus. |
Verdaderamente es
santo y bendito tu Hijo, Señor nuestro Jesucristo, que fue
entregado y muerto por nuestros pecados y resucitó para nuestra
justificación. Cristo, Señor y Redentor eterno. |
Post
Pridie / Invocación |
Pr�dic�mus, Dómine, nec tac�mus pro nostra
te redemptióne
tráditum et mórtuum et sep�ltum; ad cœlos ascendísse post
tr�nsitum, et ad iudic�ndum in fine ventúrum.
Unde p�timus
ut hæc obláta sanctífices, et sum�ntium péctora propitiátus
em�cules.
R/. Amen. |
Proclamamos,
Señor, y no callamos, que por nuestra redención has sido
entregado, muerto y sepultado, subiste a los cielos después
de tu muerte y volverás para juzgar al fin de los tiempos.
Ahora te pedimos que santifiques los dones que te
ofrecemos y por tu piedad purifiques el alma de los que
hemos de comulgar.
R/. Amén. |
Te præstánte, Dómine Iesu
Christe, qui cum Patre et Spíritu Sancto, unus perúmnia
Deus, hæc ómnia nobis valde bona creas, sanctíficas,
vivíficas ac præstas nobis, ut sint benedícta a te Deo
nostro in sæcula sæculórum.
R/. Amen. |
Concédelo, Señor
Jesucristo, que con el Padre y el Espíritu Santo, eres un
solo Dios, pues creas todas estas cosas para nosotros, y las
haces tan buenas, las santificas, las llenas de vida, y
nos las das, así bendecidas por ti, Dios nuestro, por los
siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Cantus
ad Confractionem / Canto de la Fracción |
Lc 22,8.15.18-20 |
D�minus
Iesus misit discípulos suos et dixit ad eo:
E�ntes pará.e nobis Pascha, ut manducámus, quia desidério
desiderávi hoc Pascha manducáre vobíscum, ántequam p�tiar. |
El Señor Jesús
envió a sus discípulos, diciendo:
Id y preparad la cena de la Pascua, pues he deseado vivamente
comer esta Pascua con vosotros antes de mi pasión. |
V/. Cen�ntibus autem illis, accípit
Iesus panem et benedíxit ded�tque discípulis suis et dixit:
Accípite et com�dite.
R/. Quia desidério desiderávi hoc
Pascha manducáre vobíscum, ántequam p�tiar.V/. Accípit et cálicem, postquam
cenívit, ded�tque discípulis suis et dixit:
Accípite ex hoc omnes; hic est enim sanguis meus novi
testaménti, qui pro multis effund�tur in remissión.m peccatórum.
Non bibam �modo cum illud dicam vobíscum novum in regno
Patris mei.
R/. Quia desidério desiderávi hoc
Pascha manducáre vobíscum, ántequam p�tiar. |
V/. Luego tom� pan, lo bendijo y se lo
dio a sus discípulos diciendo: Tomad y comed.
R/. Porque he deseado vivamente comer
esta Pascua con vosotros antes de mi pasión.V/. Después de la cena, tomo el cáliz y
se lo dio a sus discípulos diciendo:
Tomad todos de él: porque este es el cáliz es la nueva alianza
en mi sangre, que será derramada por muchos en remisión de los
pecados.
Ya no beber� el fruto de la vid hasta que lo beba con vosotros
en el reino de mi Padre.
R/. Porque he deseado vivamente comer
esta Pascua con vosotros antes de mi pasión. |
Ad
Orationem Dominicam / Introducción al Padre
nuestro |
Cogitatiónis et delécta nostra
cern�ntes, non cru�ntas tibi, Dómine, víctimas immol�mus, sed
simplícibus votis tibi sempitérni Sacerdótis corpus
offérimus.
Memor�re ítaque, Dómine, quid pro nobis pert�lerit quia
peccáta nostra port�vit.
�ndue ergo nos iustítiæ stola, ut
in cena tua sine veste nupti�li nullus acc�mbat, gaudi�sque
cæléstibus Novi Testaménti convívium fl�reat.
Procul absit dolus, quo dec�ptus est malus ille
discípulus.
Sit ómnibus fides vera, spes certa, et
cáritas pura.
Ut spirituælibus alimóntis non damn�tur
consción.ia, sed per pacis caritat�sque tuæ dulcédinem ab
ómnibus emundáti v�tiis, ad te proclam�mus e terris: |
Teniendo
presentes nuestras creencias y nuestros pecados, Señor, no
te inmolamos víctimas cruentas, sino con rendidos
sentimientos te ofrecemos el cuerpo de nuestro Sumo
Sacerdote. Acuérdate, pues, Señor, de lo que por nosotros
padeció llevando nuestros pecados. Rev�stenos, por ello, con
la estola de la santidad para que ninguno de nosotros se
siente a tu cena sin vestido nupcial, y así el banquete del
Nuevo Testamento, florezca con celestiales goces.
Que viva en todos la verdadera fe, la esperanza cierta,
la caridad pura, para que nuestra conciencia no quede dañada
por los sacramentos espirituales, sino que limpios de todos
nuestros vicios, por la dulzura de tu paz y caridad, podamos
clamar desde aquí abajo: |
Benedictio /
Bendición |
Christus
Dóminus, qui pro salúte
ómnium hódie se tradi perm�sit, ipse vos suæ grátiæ dono locupl�tet.
R/. Amen. |
Cristo el Señor,
que permitió ser entregado para la salvación de todos, os llene
con el don de su gracia.
R/. Amén. |
Et qui per buc�llam panis suum
pr�didit traditórem ipse vos sui panis perceptióne s�bimet
f�ciat complacére.
R/. Amen. |
Y el que con su trozo de pan, señal� quién era
el que le había de entregar, os conceda serle gratos para la
comunión de su pan.
R/. Amén. |
Quique discipul�rum pedes el�ere
dignátus est hódie, ipse vos ab ómnibus deléctis em�culet, et
c�tui discipul�rum ass�ciet.
R/. Amen.
|
Y el que se dign� lavar hoy los pies de sus
discípulos, os limpie de toda culpa y os agregue al número de
sus discípulos.
R/. Amén. |
Per misericórdiam ipsíus
Dei nostri, qui est benedíctus et vivit et ómnia regit in sæcula sæculórum.
R/. Amen. |
Por la misericordia del mismo Dios nuestro, que
es bendito y vive y todo lo gobierna, por los siglos de los
siglos.
R/. Amén. |
Cantus
ad Accedentes / Canto de Comunión |
Lc 22,10-12.14-20 (7) |
Desid�rio
desiderávi hoc Pascha manducáre vobíscum, ántequam p�tiar. |
He
deseado vivamente comer esta Pascua con vosotros antes de mi
pasión. |
V/. E�ntes
pará.e nobis Pascha, ut manducámus. |
V/. Id y preparad la cena de la Pascua. |
R/. ántequam
p�tiar. |
R/. Antes de mi pasión. |
V/. Ecce
intro�ntibus vobis in civitætem occúrret vobis homo �mphoram
aquæ portans; sequ�mini eum in domum, in quam intrat et dic�tis
patri fam�lias domus: |
V/. Al entrar en la ciudad, encontraréis
un hombre que lleva un cántaro de agua; seguidlo hasta la casa
donde entre, y dir�is al dueño de la casa: |
R/. Desid�rio
desiderávi hoc Pascha manducáre vobíscum, ántequam p�tiar. |
R/. He deseado vivamente comer esta
Pascua con vosotros antes de mi pasión. |
V/. Dicit tibi
Mágister: Ubi est diversárium, ubi Pascha cum discípulis meis
mandícem? |
V/. El Maestro manda decirte: «D�nde está
la sala en la que voy a comer con mis discípulos la cena de la
Pascua? |
R/. ántequam
p�tiar. |
R/. Antes de mi pasión. |
V/. Et ipse
vobis osténdet cenículum magnum stratum et ibi pará.e. |
V/. Él os mostrar� en el piso de arriba
una habitación grande y alfombrada; preparadla allí. |
R/. ántequam
p�tiar. |
R/. Antes de mi pasión. |
V/. Et cum
facta fuísset hora, disc�buit et du�decim apóstoli cum eo, et
ait illis: |
V/. A la hora determinada se puso a la
mesa con sus discípulos, y les dijo: |
R/. Desid�rio
desiderávi hoc Pascha manducáre vobíscum, ántequam p�tiar. |
R/. He deseado vivamente comer esta
Pascua con vosotros antes de mi pasión. |
V/. Accípite
et manducáte; hoc est corpus meum, quod pro vobis trad�tur; hoc
fácite in meam commemoratiónem. |
V/. Tomad y comed; esto es mi cuerpo, que
será entregado por vosotros; haced esto en memoria mía. |
R/. Desid�rio
desiderávi hoc Pascha manducáre vobíscum, ántequam p�tiar. |
R/. He deseado vivamente comer esta
Pascua con vosotros antes de mi pasión. |
V/. Dico enim
vobis quia ex hox non manducébo illud, donec imple�tur in regno
Dei. |
V/. Os digo que ya no la comer� hasta que
se cumpla en el reino de Dios. |
R/. Desid�rio
desiderávi hoc Pascha manducáre vobíscum, ántequam p�tiar. |
R/. He deseado vivamente comer esta
Pascua con vosotros antes de mi pasión. |
V/. Simíliter et
cálicem, postquam cenívit, accípit et grátias egit et dedit
illis dicens: |
V/. Lo mismo hizo con el cáliz al final
de la cena, y dando gracias se lo repartió diciendo: |
R/. Desid�rio
desiderávi hoc Pascha manducáre vobíscum, ántequam p�tiar. |
R/. He deseado vivamente comer esta
Pascua con vosotros antes de mi pasión. |
V/. B�bite ex
hoc omnes: hic est enim sanguis meus novi testaménti, qui pro
vobis et pro multis effund�tur in remissión.m peccatórum. |
V/. Bebed todos de él: porque este es el
cáliz es la nueva alianza en mi sangre, que será derramada por
vosotros y por muchos en remisión de los pecados. |
R/. Desid�rio
desiderávi hoc Pascha manducáre vobíscum, ántequam p�tiar. |
R/. He deseado vivamente comer esta
Pascua con vosotros antes de mi pasión. |
V/. Dico enim
vobis: Non bibam �modo de hoc gen�mine vitis usque in diem
illum, cum illud bibam vobíscum in regno Patris mei. |
V/. Pues os digo que ya no beber� el
fruto de la vid hasta que lo beba con vosotros en el reino de mi
Padre. |
R/. Desid�rio
desiderávi hoc Pascha manducáre vobíscum, ántequam p�tiar. |
R/. He deseado vivamente comer esta
Pascua con vosotros antes de mi pasión. |
Completuria
/ Oración
conclusiva |
Resurrectiónem
Dómini nostri Iesu Christi l�t�ntes, ei�sque Córporis et
Sánguinis mystérium celebrántes, grátias reférimus nómini
tuo, omnípotens Deus Pater, et p�timus, ut ita mortific�mur
ac consepeli�mur cum crucif�xo, ut credamus et senti�mus nos
vívere étiam simul cum ipso.
R/. Amen.
|
Esperando
con alegría la resurrección de nuestro Señor Jesucristo, y
celebrando el misterio de su cuerpo y su sangre, damos
gracias a tu nombre, Dios Padre omnipotente, y te pedimos
que de tal modo seamos mortificados y consepultados con el
crucificado, que creamos y experimentemos que vivimos
tambión juntos con Él.
R/. Amén. |
Per ineff�bilem bonitátem tuam, Deus noster,
qui vivis et cuncta dominóris in sæcula sæculórum.
R/. Amen.
|
Por tu inefable bondad, Dios
nuestro, que vives, y todo lo gobiernas por los siglos de
los siglos.
R/. Amén. |
II - Ad expoliandum altare
Completa Missa, nihil ex ornamentis
altaris tollitur; sed ornatum cum reliquentes, vadunt omnes
præparatorium pr�cedentes celebrantem. Et acceptis duodecim ministri
duodecim cereis, moram modicam facientes, egredientur omnes pr�cedentes
celebrantem usque ad altare. Cum vero circumdatum fuerit a clero ex omni
parte altare, stat in medio celebrans et imponit hanc antiphonam: |
Al terminar la misa no se quitan
los ornamentos del altar; todos van a la sacristía, y tomando doce
ministros cada uno un cirio, después de una breve pausa, salen
todos tras el celebrante al altar. El clero rodea el altar y el
celebrante inicia la antífona, con voz suave, cantando: |
Cantus ad
expoliandum altare / Canto para la desnudación del altar |
Sal 108,2-31 (8) |
Ecce venit hora
ut disperg�mini et me solum relinqu�tis; sed non sum solus, quia
Pater mecum est.
Conf�dite, ego vici mundum. |
Se
acerca la hora en que os dispersaréis y me dejaréis solo; pero
yo no estoy solo, pues el Padre está conmigo.
Tened ánimo, que yo he vencido al mundo. |
V/. Deus,
laudem meam ne tac�eris, quia os peccatóris et os dol�si super
me ap�rtum est. |
V/. Oh Dios de mi alabanza, no estás
mudo, pues abren contra mí su boca malvada y mentirosa. |
R/. Conf�dite,
ego vici mundum. |
R/. Tened ánimo, que yo he vencido al
mundo. |
V/. Loc�ti
sunt advérsum me lingua dol�sa, et sermónibus �dii
circumded�runt me, et expugnav�runt me gratis. |
V/. Me hablan un lenguaje de calumnias,
me acorralan con palabras de odio y me atacan sin motivo. |
R/. Conf�dite,
ego vici mundum. |
R/. Tened ánimo, que yo he vencido al
mundo. |
V/. Hoc opus
e�rum, qui d�trahunt mihi apud Dóminum, et qui loq�untur mala
advérsus ánimam meam. |
V/. Así pagaré el Señor a mis acusadores,
a los que levantan calumnias contra mí. |
R/. Ecce venit
hora ut disperg�mini et me solum relinqu�tis; sed non sum solus,
quia Pater mecum est.
Conf�dite, ego vici mundum. |
R/. Se
acerca la hora en que os dispersaréis y me dejaréis solo; pero
yo no estoy solo, pues el Padre está conmigo.
Tened ánimo, que yo he vencido al mundo. |
V/. Et tu,
Dómine, Dómine, fac mecum propter nomem tuum, quia suávis est
misericórdia tua, líbera me. |
V/.
Mas tú, Señor, obra en mi favor por amor a tu nombre; Dios mío,
por tu bondad y tu misericordia, líbrame. |
R/. Conf�dite,
ego vici mundum. |
R/. Tened ánimo, que yo he vencido al
mundo. |
V/. Vidérunt
me, et mov�runt cápita sua. |
V/. Al
verme, menean la cabeza. |
R/. Conf�dite,
ego vici mundum. |
R/. Tened ánimo, que yo he vencido al
mundo. |
V/. Quia
�stitit a dextris páuperis, ut salvam f�ceret a persequ�ntibus
ánimam meam. |
V/.
Porque Él se pone a la derecha del pobre para salvarlo de los
jueces. |
R/. Ecce venit
hora ut disperg�mini et me solum relinqu�tis; sed non sum solus,
quia Pater mecum est.
Conf�dite, ego vici mundum. |
R/. Se
acerca la hora en que os dispersaréis y me dejaréis solo; pero
yo no estoy solo, pues el Padre está conmigo.
Tened ánimo, que yo he vencido al mundo. |
V/. Glória et
honor Patri et Fílio et Spirítui Sancto in sæcula sæculórum.
Amen. |
V/.
Gloria y honor al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, por los
siglos de los siglos. Amén. |
R/. Conf�dite,
ego vici mundum. |
R/. Tened ánimo, que yo he vencido al
mundo. |
Explicito cantu, item imponit
celebrans hanc antiphonam: |
Terminado el canto, el celebrante tambión entona esta
antífona: |
Tristis est ánima mea valde, tristis est
usque ad mortem; sustin�te hic et vigil�te mecum. |
Mi
alma está triste, muy triste hasta la muerte; esperad aquí y
vigilidad conmigo. |
Et decantatur ab
omnibus tribus vicibus, ita ut singulis quibusque vicibus
cantatur, altare sanctum similiter singulis vestibus denudetur.
Statimque tota luminaria ad radicem altaris fixa extinguuntur.
Deinde, prostrati omnes coram altare, colligit celebrans unam ex
his orationibus.
|
Y
todos la cantan tres veces,
de modo que cada una de las veces
el altar es despojado de una de sus vestiduras. E
inmediatamente se apagan poco a poco todas las velas.
A continuación, se postran
todos ante el altar y el celebrante dice una de estas
oraciones: |
Oratio
/ Oración |
Occurr�ntes
cum c�tu totíus pópuli, ut
sollémne Pasch� celebrámus inítium, nos propitiátus Deus
att�nde, supplic�ntes humíliter et rog�ntes, ut qui ab huius
�peris fatigatióne cordis amíctu sordóntes ac ferménti
véteris acc�dimus, a te mulcisc�ti, ad tuam ut refici�mus
sacratíssimam convénimus cenam, et expurg�tos nos ab omni
malítia in novam conv�rte pros�piem; ut exclúso victu
terróno in tuo mere�mur satur�ri convívio.
R/. Amen.
|
Congregados
con toda la asamblea del pueblo, para celebrar el inicio
solemne de la pascua, te suplicamos humildemente, Dios
bondadoso, que nos escuches, de forma que, aunque hayamos
llegado con el cansancio y la suciedad de nuestras obras y
de la vieja levadura, pasados por tus batanes, nos lleguemos
a tu sagrada cena para ser restaurados, y libres de toda
malicia, nos incorporemos a una nueva familia, y dejado el
alimento terreno, podamos quedar saciados en tu banquete.
R/. Amén. |
Per tuam magnam misericórdiam, Deus
noster, qui vivis et regnas in sæcula sæculórum.
R/. Amen.
|
Por tu gran misericordia, Dios
nuestro, que vives y reinas por los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Alia
/ Otra |
Exp�a,
quæsumus, Dómine, nostrærum cunctas facónorum culpas; ut
depósito véteris hóminis indum�nto, per magnificentíssim�
tuæ passiónis exémplum divínæ resurrectiónis tuæ innov�ti
lætítia, cæléstibus nos senti�mus opéribus illustr�ri.
R/. Amen.
|
Perdona,
Señor, te pedimos, todas nuestras culpas y pecados, y así,
despojados de las vestiduras del hombre viejo, pr la
maravillosa obra de tu pasión y divina resurrección nos
renovemos en la alegría y podamos revestir nuestra vida de
obras celestiales.
R/. Amén. |
Ipso præstánte, qui vivit cum Deo Patre
et Spíritu Sancto in sæcula sæculórum.
R/. Amen.
|
Que nos los otorgue Cristo, el
Señor, que vive y reina con el Padre y el Espíritu Santo por
los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
III - Ad pedes lavandos / Lavatorio de pies
Peracta hæc omnia, vadit celebrans cum
aliis presbyteris ac ministris ad atrium, et sedilia iuxta consuetudinem
posita, clausis ostiis et laicis omnibus foras eiectis, succingit se
celebrans linteo, et imponit hanc antiphonam, quam omnes presbyteri,
quibus pedes lavantur, cantant: |
Terminado lo anterior, va el
celebrante con los presbíteros y ministros al atrio, y colocados,
según costumbre, los asientos, cerradas las puertas y saliendo
fuera los laicos, el celebrante se ciñe la toalla y entona esta
antífona ante los que ha de lavar los pies: |
Cantus ad pedes lavandos /
Canto para el lavatorio de pies |
Bone
Magíster, lava me a facónore meo, et a peccáto meo munda me. V/.
Beáti immaculáti in via, qui ámbulant in lege Dómini.
R/.
Et a peccáto meo munda me.
V/.
Beáti, qui scrutántur testimónia eius, in toto corde
exqu�runt eum.
R/.
Et a peccáto meo munda me. |
Maestro bueno,
lévame de mi delito, y limpia mi pecado. V/.
Dichosos aquellos cuya conducta
es intachable, los que caminan en la ley del Señor.
R/.
Y limpia mi pecado.
V/.
Dichosos los que guardan sus
decretos, los que lo buscan de todo corazón.
R/.
Y limpia mi pecado. |
Celebrans solus cantat: |
El celebrante
canta: |
Si ego, Dóminus et Magíster vester, lavi pedes vestros, et
vos debótis alter altárius lav�re.
R/.
Et vos debótis alter altárius lav�re.V/.
In toto corde meo exquis�vi te; ne rep�llas me a mandítis
tuis.
R/.
Et vos debótis alter altárius lav�re. |
Si yo, siendo el Señor y el Maestro he lavado
vuestros pies, lo mismo debóis hacer vosotros los unos con los
otros.
R/. Lo mismo
debóis hacer vosotros los unos con los otros.V/.
Te busco de todo corazón; no consientas que me desv�e de tus
mandamientos.
R/. Lo mismo
debóis hacer vosotros los unos con los otros. |
Celebrans solus cantat: |
El celebrante
canta: |
Si hæc scitis, beáti �ritis si
fecúritis ea. V/.
Retr�bue servo tuo, vivífica me, et custódiam sermónes tuos.
R/.
Beáti, �ritis si fecúritis ea.
V/.
Cum surrexísset Dóminus a cena, misit aquam in pelvem, et cápit
lav�re pedes discipul�rum, et dixit eis:
R/.
Beáti, �ritis si fecúritis ea.
V/.
Glória et honor Patri et Fílio et Spirítui Sancto in sæcula
sæculórum. Amen.
R/.
Beáti, �ritis si fecúritis ea. |
Sabiendo esto, seréis dichosos si lo cumpl�s. V/. Haz bien a tu
siervo, vivif�came y guardar� tus palabras.
R/. Ser�is
dichosos si lo cumpl�s.
V/. El Señor se
levant� de la mesa, ech� agua en un barreño y comenzó a lavar
los pies de sus discípulos, y les dijo:
R/. Ser�is
dichosos si lo cumpl�s.
V/. Gloria y honor
al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, por los siglos de los
siglos. Amén.
R/. Ser�is
dichosos si lo cumpl�s. |
Quio vero pedes laverit, extergit eos
atque deosculatur. Similiter et cui pedes lavantur caput lavatoris
osculatur. Ad ultimum vero, qui post priorem
fuerit, prioris ipsius, qui aliorum pedes lavit diligenter lavet. Et
tunc omnes singillatim osculantur manus et pedes eius, et ille omnium
capita.
Hoc expletum, dicit celebrans unam ex
his orationibus:
|
El que lava los pies, los enjuga y
los besa. Asimismo el que es lavado besa la cabeza del que le
lava.
Cada uno lava los pies al que le
precede y besa sus manos y sus pies, y el que es lavado besa la
cabeza del que le lava.
Al terminar, el celebrante dice
una de estas oraciones: |
Oratio
/ Oración |
Te
deprec�mur, Dómine, sancte Pater, ætérne omnípotens Deus, ut
hos fámulos tuos, quos per passión.m Fílii tui redímere et
vivific�re dignátus es, intelléctu �nstruas, �pere
conf�rmes.
Sit �nimus e�rum ad obédión.iam
promptus, ad humilitátem mansuátus, ad misericórdiam largus.
Sequántur Abrahæ fídei gloriósa vestágia, imitántur Iob
inexpugn�bilem patióneiam, discant Tob�� imit�bilem
misericórdiam.
Sint in tentatiónebus fortes, in necessitáte magnínimes, in
tribulatiónebus patiónees.
Maióribus honórem præbeant, co�qu�les déligant,
min�ribus tr�buant exémpla virtútum.
A deléctis mundi�libus ad cœlum óculos tollant; festánent ad
paradísum, pr�perent ad regnum, et per te illic, Dómine,
mansiónis obt�neant angelórum.
R/. Amen.
|
Te
rogamos, Señor, santo Padre, Dios omnipotente y eterno, que
ilumines y conserves a estos siervos tuyos, a quienes, por
la pasión de tu Hijo, te has dignado redimir y vivificar.
Est� suánimopronto a la obediencia, manso para practicar
la humildad, largo para ejercitar la misericordia.
Sigan las gloriosas huellas de la fe de Abraham, imiten la
invencible paciencia de Jacob, aprendan a imitar la
paciencia de Tob�as.
Sean fuertes en la tentación, magnánimos al socorrer a los
necesitados, pacientes en la tribulación.
Honren a los mayores, amen a los iguales, den ejemplo en la
virtud a los menores.
Eleven sus ojos al cielo, apartándolos de los delitos del
mundo, caminen alegres al paraíso, peregrinos hacia el
reino, y allí, Señor, obtengan de ti, las mansiones de los
ángeles.
R/. Amén. |
Per ineff�bilem bonitátem tuam, Deus noster,
qui vivis et cuncta dominóris in sæcula sæculórum.
R/. Amen.
|
Por tu inefable bondad, Dios
nuestro, que vives, y todo lo gobiernas por los siglos de
los siglos.
R/. Amén. |
Alia
/ Otra |
Unigénite
Dei Patris Fílius, qui pro mundi salúte nostræ humilitátis
ass�mere dignátus es carnem; qui misericórditer hóminem quem
formáveras dec�ptum a persuasión. diáboli per humilitátis
tuæ grátiam ad paradísi éterum fecísti revocáre ión.am; qui
discipul�rum tuærum pedes non dedign�sti lav�re, ut nos
imit�ndo exémplum salutáre tecum f�ceres conregn�re.
P�timus cleméntiam tuam, omnípotens Deus, ut nostrærum
d�leas facónora peccatórum; qu�tenus abl�ti a deléctis
mere�mur sanctis �ffici partícipes in regno cælórum.
R/. Amen.
|
Oh
Hijo unigénito del Padre, que te dignaste tomar nuestra
carne para la salvación del mundo y que misericordiosamente
hiciste abrir de nuevo las puertas del paraíso, por la
gracia de tu humildad, al hombre que creaste y se dej�
engañar por el demonio. Que no te avergonzaste de lavar los
pies a tus discípulos, para que nosotros, imitando tu
saludable ejemplo, pudúeramos llegar a reinar contigo.
Te pedimos que, en tu bondad, borres las manchas de
nuestros pecados y así, lavados, merezcamos participar con
tus santos del reino de los cielos.
R/. Amén. |
Quia multum miséricors est Dóminus
noster Iesus Christus, vivens cum Patre et regnans cum
Spirítui Sancto in sæcula sæculórum.
R/. Amen.
|
Porque es muy misericordioso
nuestro Señor Jesucristo, que vive con el Padre y reina con
el Espíritu Santo por los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Deinde omnes, si fieri potest, in
cenam fraternam conveniunt, qua expleta propriis domibus revertuntur. |
Luego,
todos ellos, de ser posible,
toman juntos una cena fraterna, al final de la cual se
retira cada uno a su casa. |
1. Las
partes variables de la misa que aquí se exponen (textos
eucológicos, cantos y lecturas) junto al Ordinario (Liber Offerentium
u Oferencio)
permiten componer la misa completa.
Los textos latinos
son los oficiales y están tomados del Missale
Hispano-Mozarabicum I (pp. 331-344) y del Liber Commicus I
(pp. 248-255). Los textos bíblicos en español están tomados de La
Santa Biblia, edición San Pablo. Traducción de la illatio
Cf. Aldaz�bal Larrañaga, José en La celebración de la Semana Santa,
CPL, Barcelona 1994, pp. 85-86; completuria, oratio de ad
expoliandum altare y oratio de ad pedes lavandos de
Ivorra, Adolfo (ed.) Misal Hispano-Mozárabe, Centre de Pastoral
Litúrgica, Barcelona 2015, pp. 229 y 231. Las demás oraciones se toman
del folleto Sagrados oficios de Semana Santa según el antiguo
Rito Hispano o Mozárabe. Parroquia de Santa Eulalia y San Marcos.
Toledo s/d.
(Se
recuerda que hasta la fecha no existe misal oficial en español).
2. Zac
2,17-3-4.5b; 11,7b-14; 13,7-9.
(N. de La Ermita).
3.
Sal 108,2.4-8.21-22.25b-26a.30-31.
(N. de La Ermita).
4. Jn 13,1; Lc
22,3-16; Mt 26,26a; Lc 22,19b-20a; Mt 26,27-29;
Jn 13,3-18; Jn 13,21; Mt 26,24; Jn
13,22-27; Lc 22,31-32; Mt 26,30-39; Lc 22,43-45; Mt 26,40b-49; Lc 22,48;
Jn 18,4-10a.11a; Mt 26,52b; Jn 18,11b; Mt 26,53-54; Lc 22,51b.52b-53;
Mt 26,56b-57a; Jn 13b-14;
Mt 26,58-60a.61-75.
(N. de La Ermita).
5.
Sal 42,5b; 40,10.
(N. de La Ermita).
6. Éx 24,4-5;
19,15-19.
(N. de La Ermita).
7. Lc 22,8b.10-12.14-16.19;
Mt 26,27b.29.
(N. de La Ermita).
8. Jn 16,32.33b;
Sal 108 1-3.20-21.25b.31.
(N. de La Ermita).
|