Misa en
Rito Hispano-Mozárabe
14 Septembris /
14
de septiembre
IN DIEM SANCTI CYPRIANI, EPISCOPI
EN EL DÍA DE SAN CIPRIANO, OBISPO
Festivitas /
Festividad (1) |
|
Prælegendum
/ Canto de entrada |
Sal 20,6-7; 111,1 |
Gl�riam
et magnum decórem imp�nes super eum, Allelúia; et dabis eum in
benedictiónem, in sæculum sæculi, Allelúia, Allelúia. |
Lo
has vestido de honor y majestad, aleluya, le concedes
bendiciones incesantes, aleluya, aleluya. |
V/.
Beátus vir qui timet Dóminum, in mandítis eius cupit nimis.
R/. In sæculum sæculi, Allelúia,
alell�ia.
V/. Glória et honor Patri et
Fílio et Spirítui Sancto in sécula sæculórum. Amen.
R/. In sæculum sæculi, Allelúia,
alell�ia. |
V/. Dichoso el hombre que teme al Señor, el que prefiere
sus mandamientos.
R/. Bendiciones incesantes,
aleluya, aleluya.
V/. Gloria y honor al Padre y al
Hijo y al Espíritu Santo, por los siglos de los siglos. Amén.
R/. Bendiciones incesantes,
aleluya, aleluya. |
Oratio post Gloriam
/ Oración después del
Gloria |
�t�rnum tuæ
virtátis nomen, omnípotens Deus, orémus; ut nos mártyris tui
Cypri�ni epíscopi, et ómnium Sanctórum méritis, s�cios fide
pares, devotióne str�nuos, passióne cons�miles, et in
resurrectióne fel�cium f�cias co�qu�ri.
R/. Amen. |
Dios todopoderoso, invocamos tu
poder eterno para que por los méritos de tu obispo y mártir
Cipriano, y los de todos los Santos, nos hagas sus compañeros en
la fe, valientes para la entrega, semejantes en el martirio, y
nos hagas resucitar para ser felices con ellos.
R/. Amén. |
Tua coced�nte cleméntia, piísime et
admir�bilis Deus, qui vivis et regnas in sécula sæculórum.
R/. Amen. |
Nos lo conceda tu clemencia, Dios
bondadoso y admirable, que vives y reinas por los siglos de los
siglos.
R/. Amén. |
LITURGIA VERBI / LITURGIA DE LA PALABRA
Prophetia
/ Profecía |
Eclo
44,20.21; 50,1-25 |
Léctio libri Ecclesiástici.
R/.
Deo grátias. |
Lectura del libro del Eclesiástico.
R/. Demos gracias a
Dios. |
Hæc dicit
Dóminus: Vir iste conserv�vit legem
Excélsi
et in tentatióne invéntus est fidélis.
Qui in vita sua suff�lsit domum
et in diébus suis corrobor�vit templum.
Templi étiam altitúdo ab ipso fund�ta est,
substruct�ra el�ta pari�tis templi.
In diébus ipsíus exc�sa est pisc�na aquírum,
lacus, quasi maris superfécies eius.
Qui curívit gentem suam a latróne
et firm�vit eam ab obsidi�ne.
Quam gloriósus appáruit, cum prosp�ceret e tabernáculo
in egréssu domus velam�nti.
Quasi stella matut�na in médio n�bul�
et quasi luna plena in diébus festi
et quasi sol refúlgens super templum Dei.
Quasi arcus refúlgens inter n�bulas glóriæ
et quasi flos ros�rum in diébus vernis
et quasi l�lia, quæ sunt in tr�nsitu aquí,
et quasi flos Lébani in diébus �státis;
quasi ignis effúlgens et tus ardens in igne,
quasi vas auri s�lidum
ornátum omni lápide pretióso,
quasi ol�va p�llulans fráctibus
et cupr�ssus in nubes se ext�llens,
in accipi�ndo ipsum stolam glóriæ
et vest�ri eum in consummatiónem magnificénti�.
In asc�nsu altáris sancti,
cum glóriam daret perúbolo sanctu�rii
et acc�peret partes de manu sacerdótum,
et ipse stans iuxta aram,
et circa illum corína fratrum,
quasi plant�tio cedri in monte Líbano,
sic circa illum stet�runt quasi rami palm�
omnes fílii �aron in glória sua.
Oblátio autem Dómini in mánibus ips�rum
coram omni synagóga Ísrael,
et consummatióne fungens in ara,
órdinans oblatiónem Omnipoténtis.
Porr�xit manum suam in libatióne
et lib�vit de sánguine uv�;
eff�dit in fundam�nto altáris
odórem divínum excélso Príncipi.
Tunc exclamav�runt fílii �aron,
in tubis product�libus sonu�runt
et audítam fec�runt vocem magnam
in memóriam coram Deo altíssimo.
Tunc omnis pópulus simul properav�runt
et cecid�runt in f�ciem super terram
adoráre Dóminum Deum suum
et dare preces omnipoténti Deo excélso.
Et laudav�runt psall�ntes in v�cibus suis,
et magnus reson�bat cantus suavitátis plenus.
Et rog�vit pópulus Dóminum excélsum in prece coram Misericórde,
usque dum perféctus est honor Dómini;
et munus suum perfec�runt. Tunc
descéndens manus suas �xtulit
in omnem congregatiónem fili�rum Ísrael
dare benedictiónem Dómini in l�biis suis
et in nómine ipsíus glori�ri;
et iterav�runt adoratiónem suam,
ut acc�perent benedictiónem Altíssimi.
Et nunc benedícite Deum ómnium,
qui magna facit in omni terra,
ex�ltans dies nostros a ventre matris nostr�
et f�ciens nobíscum secóndum suam misericórdiam.
Det nobis iucunditátem cordis
et fúeri pacem in diébus nostris in Ísrael per dies sempitérnos. R/. Amen. |
Esto dice el Señor: Este hombre
guard� la ley del Altísimo
y con Él estableció una alianza.
En su carne sell� esta alianza,
y en la prueba fue hallado fiel.
Puso los cimientos de doble altura,
un alto contrafuerte de la cerca del templo.
En sus días se excav� el depósito de agua,
un estanque tan ancho como el mar.
Él cuid� de su pueblo para evitar su ruina
y fortificó la ciudad contra un posible asedio.
¿Qué glorioso era cuando, rodeado de su pueblo,
salía de la casa del velo!
Como el lucero del alba en medio de las nubes,
como la luna en su plenilunio;
como el sol refulgente sobre el templo del Altísimo,
como el arco iris brillando entre nubes de gloria;
como rosal florecido en primavera,
como lirio junto a un manantial,
como cedro del Líbano en verano;
como fuego e incienso en el incensario,
como vaso de oro macizo
adornado con toda clase de piedras preciosas;
como olivo cargado de frutos,
como ciprés erguido hasta las nubes.
Cuando se ponía la vestidura de gala
y se colocaba sus elegantes ornamentos,
cuando subía hacia el altar sagrado,
llenaba de gloria el recinto del santuario.
Cuando recibía las porciones de las víctimas
de manos de los sacerdotes,
Él mismo de pie junto al fuego del altar,
rodeado de una corona de hermanos,
como retoños de cedro en el Líbano
o como tallos de palmera engarzados.
Todos los hijos de Aarón en su esplendor,
con la ofrenda del Señor en sus manos,
estaban en presencia de toda la asamblea de Israel.
Mientras cumplía su servicio en el altar,
preparando la ofrenda del Altísimo todopoderoso,
tomaba en su mano la copa,
hacía la libación del vino
y lo derramaba al pie del altar,
como aroma suave para el Altísimo, Rey del universo.
Entonces los hijos de Aarón prorrumpían en gritos,
tocaban las trompetas de metal batido,
hacían oír su sonido imponente,
como memorial delante del Altísimo.
Entonces, de repente,
todo el pueblo en masa caía rostro a tierra,
para adorar al Señor, su Dios,
el Todopoderoso, el Dios Altísimo.
Los salmistas también lo alababan con sus voces,
y su canto formaba una dulce melodía.
19 El pueblo suplicaba al Señor Altísimo,
permanecía en oración ante el Misericordioso,
hasta que terminaba la ceremonia del Señor
y concluía el servicio litúrgico.
Entonces Él bajaba y elevaba las manos
sobre toda la asamblea de los hijos de Israel,
para pronunciar con sus labios la bendición del Señor
y tener el honor de invocar su nombre.
Y por segunda vez todos se postraban,
para recibir la bendición del Altísimo.
Y ahora bendecid al Dios del universo,
el que hace grandes cosas por doquier,
el que enaltece nuestra vida desde el seno materno
y nos trata según su misericordia.
Que nos d� la alegría de corazón
y que haya paz en nuestros días,
en Israel por los siglos de los siglos.
R/.
Amén. |
Psallendum
/ Salmo de meditación |
Sal 20,4.2 |
Posuísti
super caput eius corínam de lápide pretióso. |
Has puesto en su
cabeza una corona de oro fino. |
V/.
Super salutáre tuum, Dómine, exsult�bit vehem�nter; desidérium
ánimæ eius dedísti ei, et voluntátem labiárum eius non fraud�sti
eum.
R/. Cor�nam de lápide
pretióso. |
V/. Se alegra por
tu fuerza, Señor, y cuánto goza con tu victoria. Le has
concedido el deseo de su corazón, no le has negado lo que pedían
sus labios.
R/. Una corona de oro fino. |
Apostolus
/ Apóstol |
2Tim 1,8-14 |
Epístola Pauli apóstoli ad Tim�theum
secónda.
R/.
Deo grátias. |
Segunda epístola del apóstol Pablo
a Timoteo.
R/. Demos gracias a
Dios. |
Fratres:
Noli ítaque erubéscere testimónium Dómini nostri neque me
vinctum eius, sed collab�ra evangélio secóndum virtútem Dei, qui
nos salvos fecit et vocávit vocatióne sancta, non secóndum ópera
nostra sed secóndum propósitum suum et grátiam, quæ data est
nobis in Christo Iesu ante témpora sæculória, manifest�ta autem
nunc per illustratiónem salvatóris nostri Iesu Christi, qui
destrúxit quidem mortem, illumin�vit autem vitam et
incorruptiónem per evangélium, in quo pósitus sum ego prædic�tor
et apóstolus et doctor.
Ob quam causam étiam hæc p�tior, sed non confíndor; scio
enim, cui crédidi, et certus sum quia potens est depósitum meum
serv�re in illum diem.
Formam habe san�rum verbárum, quæ a me aud�sti, in fide et
dilectióne, quæ sunt in Christo Iesu; bonum depósitum custódi
per Spíritum Sanctum, qui hábitat in nobis. R/. Amen. |
Hermanos: No te averg¨ences
del testimonio de nuestro Señor ni de mí, su prisionero; antes
bien, toma parte en los padecimientos por el Evangelio, según la
fuerza de Dios. Él nos salv� y nos llam� con una vocación santa,
no por nuestras obras, sino según su designio y según la gracia
que nos dio en Cristo Jesús desde antes de los siglos, la cual
se ha manifestado ahora por la aparición de nuestro Salvador,
Cristo Jesús, que destruy� la muerte e hizo brillar la vida y la
inmortalidad por medio del Evangelio. De este Evangelio fui
constituido heraldo, apóstol y maestro.
Esta es la razón por la que padezco tales cosas, pero no me
averg¨enzo, porque s� de quién me he fiado, y estoy firmemente
persuadido de que tiene poder para velar por mi depósito hasta
aquel día.
Ten por modelo las palabras sanas que has oído de mí en la fe
y el amor que tienen su fundamento en Cristo Jesús. Vela por el
precioso depósito con la ayuda del Espíritu Santo que habita en
nosotros.
R/.
Amén. |
Evangelium
/ Evangelio |
Mt 5,14-19 |
Léctio sancti Evangélii secóndum Matthéum.
R/.
Glória tibi, Dómine. |
Lectura del santo Evangelio
según san Mateo.
R/. Gloria a ti
Señor. |
In illo témpore: Dixit
Iesus: Vos estis lux mundi. Non potest c�vitas absc�ndi supra
montem pósita; neque acc�ndunt luc�rnam et ponunt eam sub médio,
sed super candel�brum, ut lúceat ómnibus, qui in domo sunt.
Sic lúceat lux vestra coram homínibus, ut
vídeant vestra bona ópera et gloróficent Patrem vestrum, qui in
cœlis est. Nol�te put�re quóniam
veni s�lvere Legem aut Prophétas; non veni s�lvere, sed
adimpl�re. Amen quippe dico vobis: Donec tr�nseat cœlum et
terra, iota unum aut unus apex non præter�bit a Lege, donec
ómnia fiant.
Qui ergo s�lverit unum de mandítis istis
mínimis et doc�erit sic hómines, mínimus vocábitur in regno
cælórum; qui autem f�cerit et doc�erit, hic magnus vocábitur in
regno cælórum. R/. Amen. |
En aquel tiempo: Dijo Jesús:
Vosotros sois la luz del mundo. No se puede ocultar una ciudad
puesta en lo alto de un monte. Tampoco se enciende una lámpara
para meterla debajo del celemín, sino para ponerla en el
candelero y que alumbre a todos los de casa.
Brille así vuestra luz ante los hombres, para que vean
vuestras buenas obras y den gloria a vuestro Padre que est� en
los cielos.
No creáis que he venido a abolir la Ley y los Profetas: no he
venido a abolir, sino a dar plenitud. En verdad os digo que
antes pasarán el cielo y la tierra que deje de cumplirse hasta
la última letra o tilde de la Ley.
El que se salte uno solo de los preceptos menos importantes y
se lo enseñe así a los hombres ser� el menos importante en el
reino de los cielos. Pero quien los cumpla y enseñe ser� grande
en el reino de los cielos.
R/. Amén. |
Laudes |
Sal 109,4 |
Allelúia. |
Aleluya. |
V/. Tu es
sacérdos in ætérnum secóndum órdinem Melchísedech.
R/. Allelúia. |
V/. Tú
eres sacerdote eterno, según el rito de Melquisedeq
R/. Aleluya. |
Sacrificium
/ Canto del
Ofertorio |
Eclo 50,13-15.7.6.8.11 |
Stans
sacérdos ad altáre in circúitu eius corína fratrum; quasi
germen cedr�rum in Líbano circumded�runt eum, sicut árbores
palm�rum; et ábtulit oblatiónem Dómino in conspéctu univérs�
Ecclésiæ, alleluia. |
Estando
el sacerdote de pie, delante del altar y en torno suyo la
corona de sus hermanos: como los brotes de los cedros en el
Líbano, lo rodearon, como las palmeras, y presentó su
ofrenda al Señor, en presencia de toda la asamblea, aleluya. |
V/. Exaltátus
est, et fulget in templo Dei quasi stella matut�na in média
nube, et sicut luna plena in diébus suis, sicut arcus pacis
illáminans in n�bibus plúviæ, et sicut ol�va g�rminans
fructum.
Accípit autem stolam sanctam.
R/. Et ábtulit oblatiónem Dómino in conspéctu
univérs� Ecclésiæ, alleluia. |
V/. Ha
sido exaltado y brilla en el templo de Dios, como el lucero
de la mañana en medio de las nubes, con todo su fulgor según
los tiempos, como el arco�ris que aparece ante las nubes
cuando llueve, como un olivo cuajado de su fruto.
Visit� su vestidura santa.
R/. Y presentó su ofrenda al
Señor, en presencia de toda la asamblea, aleluya. |
Oratio Admonitionis
/ Monici�n
sacerdotal |
Omnipoténtem Deum, fratres
caríssimi, in honórem beatíssimi mártyris sui Cypri�ni súpplices
postul�mus, ut populórum concurr�ntium susc�piat vota, ac
síngulis quib�sque própria desideri�rum sperúta distr�buat.
Et sicut illi palmam victóriæ triumpháli título c�ntulit,
qui corusc�ntis ferri �ciem propter amórem nóminis sui non est
cunctátus excépere, ut f�lgidum maiestátis suæ iubar eius
reléceret in s�nsibus, sic ipsíus nunc nobis méritis atque
univérso pópulo suo ætérna exsultatiónis gáudia, ut trib�ere
dignátur súpplices deprec�mur.
R/. Amen. |
Queridos hermanos, supliquemos a
Dios todopoderoso, en honor de su bienaventurado mártir
Cipriano, que acepte los buenos deseos del pueblo congregado, y
distribuya a cada uno lo que cada uno desea obtener.
Y como a Él le concedió la palma de la victoria, en virtud de
su triunfo, puesto que por amor de su nombre no vacil� en
someterse al filo de la espada brillante, para que el
resplandeciente brillo de su majestad reluciera en sus sentidos.
Roguemos, pues, suplicantes, que por sus méritos, se digne
concedernos los eternos gozos exultantes, a nosotros y a todo su
pueblo.
R/. Amén. |
Per grátiam pietátis tu�, Deus
meus, qui vivis et cuncta dominóris in sécula sæculórum.
R/. Amen. |
Por la gracia de tu amor, Dios nuestro, que
vives y todo lo gobiernas, por los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Alia / Oración entre los Dípticos |
Persp�cuum, excélse Deus,
triúmphum Cypri�ni beatíssimi mártyris tui hodi�rno die votis
att�limus, sacrifíciis honorémus qui domínico commiss�que sibi
gregi in supréma iam passióne pius pastor relict�rus exémplum,
bis denis tempor�lem comparávit �ureis mortem, sánguine p�tius
malens s�bditis, quam verbo scr�bere quæ doc�ret.
Te pro�nde, in hac eius festivitáte rogámus ut qui eum
cont�mptu mortis fecísti esse fel�cem, felicióres nos eff�cias
actu beátæ vitæ; quo ómnia quæ de eius virtútibus admir�nda
cogn�vimus, efféctu �peris imple�mus.
R/. Amen. |
Dios excelso, hoy ensalzamos con
nuestros votos el triunfo sobresaliente de Cipriano, tu
bienaventurado mártir; le honramos con sacrificios porque en el
supremo trance del martirio, habiendo de dejar un ejemplo como
padre piadoso al pueblo de Dios que se le había encomendado,
compr� la muerte temporal con veinte monedas, prefiriendo
escribir con su sangre más que con palabras lo que tenía que
enseñar a sus seguidores.
A ti, Señor, te rogamos en esta festividad, que como a Él le
hiciste feliz por el desprecio de la muerte, nos hagas más
felices a nosotros por la realidad de la vida dichosa, y todo lo
que en sus virtudes es digno de admiración, lo imitemos nosotros
poniéndolo por obra.
R/. Amén. |
Per
misericórdiam tuam, Deus noster, in cuius conspéctu sanctórum
Apostolórum et Mártyrum, Confessórum atque Vírginum nómina
recitántur.
R/.
Amen. |
Por tu
misericordia, Dios nuestro, en cuya presencia
recitamos los nombres de los santos
Apóstoles y Mártires, Confesores y
Vírgenes.
R/. Amén. |
Post Nomina / Oración
después de los Dípticos |
Tuam proni, Dómine, imménsam
quæsumus Maiest�tem, quem unum et verum Deum præd�ctus Martyr
sci�ntia pollens, st�dio calens, virtúte flagrans, passióne
triúmphans, comm�s� sibi catérv� verbo prædic�vit et sánguine.
Tr�bue nobis quod illi tribuísti, et virtútibus salúbriter
�rigi, et adversitátibus non noc�ri; quo huius Mártyris
benefício fidélium favens votis, r�quiem i�beas præstáre
defúnctis.
R/. Amen. |
Señor, invocamos con humildad tu
inmensa Majestad. Tu Mártir te predicó como único Dios
verdadero, con su palabra y con su sangre, al pueblo que tenía
encomendado. Él era de preclaro entendimiento, dedicado al
estudio, fragante en sus virtudes, triunfador en su martirio.
Danos lo que le diste: ser auxiliados saludablemente por las
virtudes y no ser dañados por las adversidades. Con ello,
atendiendo a los deseos de los fieles, por los buenos oficios de
este mártir concede también el descanso a los difuntos.
R/. Amén. |
Quia
tu es vita vivórum,
sánitas infirmórum ac r�quies ómnium fidélium defunctórum in
ætérna sécula sæculórum.
R/.
Amen. |
Porque tú eres
la vida de los que viven, la salud de los
enfermos, y el descanso de todos los fieles
difuntos, por todos los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Ad Pacem
/ Oración
de la Paz |
Pacis tu�, Deus, nobis
larg�re don�ria, qui in sancto Cypri�no mártyre tuo tantam
tribuísti sci�ntiæ grátiam.
Reple nos fructu tuæ dulcédinis, qui os eius cæléstibus
repl�sti doctrínis.
Da in nobis abundántiam boni, qui in illo contulísti
sci�ntiam tui; ut sicut ille prædic�ta verbis sánguinis
effusi�ne compl�vit, ita nos ea quæ de tua pace scimus, non
solum verbo, sed et �pere prædic�mus.
R/. Amen. |
Señor, ot�rganos los dones
de tu paz, tú que depositaste tal tesoro de ciencia en tu
mártir Cipriano.
C�lmanos con el fruto de tu dulzura como llenaste su boca de
celestes enseñanzas.
Deposita en nosotros la abundancia del bien, como en Él
pusiste tu conocimiento, y como Él culmin� con la efusión de
su sangre lo que había predicado con sus palabras, así
nosotros manifestemos nuestra experiencia de la paz, no solo
de palabra sino también de obra.
R/. Amén.
|
Per te, qui es vera pax et
perpétua cáritas, Deus noster, et regnas in sécula sæculórum.
R/. Amen. |
Por ti, que eres la paz verdadera y la
caridad perpetua, Dios nuestro, que reinas por los siglos de
los siglos.
R/. Amén. |
Illatio / Acción de
gracias |
Dignum
et iustum est, �quum vere et iustum est, nos tibi grátias
ágere, omnípotens Deus, qui sanctum mártyrem tuum Cypri�num,
et sacerdot´libus �nfulis redim�tum, et passióne mártyrii
coron�tum, in hunc diem ad te s�lita miseratióne evocáre
dignátus es
Quem nulla s�v�rum príncipum intermin�tio pavef�cit, non
égubris, et squ�lida ergastul�rum obscúritas a propósito
sanctæ deliberatiónis reténuit, non dénique str�cti ensis in
i�gulo descens�rus mucro detérruit.
Const�ntia intr�pida, fides ind�bia, p�rmanens
perseverántia.
Lac�rnum birrum, quo indátus sacro tuo sancto semper
ast�bat altário, sui prostrávit g�nibus percuss�ris, propter
te, Dómine, advéntum exsp�ctans; cui vig�nti áureos, quasi
merc´dem �peris sui, mox dari dec�rnit, tempor�lem c�mparans
mortem per quam lucrar�tur corínam vitæ perpétu�.
Tr�pida conátus manu str�ngere nequ�vit témpora manu�libus,
nisi fratrum aux�lio sacrum vinxísset Christ�que iam déditum
caput.
Et licet humánæ fragilitátis pavóre turbátus, sed const�nter
spe fídei suæ conf�sus in te, obt�git d�gitis lámina clausa
suis, ut non córneret coríscum, prius quam excéperet
cerv�cibus gládium; stricto ítaque ferro suæ paráto neci non
dubit�vit s�bdere collum, præséntis vitæ iact�ra, natúram
sóperans mort�lem, ut immortalitátem vitæ consequer�tur
ætérne.
Per Iesum Christum Dóminum nostrum, cui mérito omnes ángeli
et Archángeli non cessant clamóre cotídie ita dicéntes: |
Es digno y
justo, en verdad justo y equitativo, que te demos gracias,
Dios todopoderoso, que te dignaste llamar a ti en este día
con la misericordia a que nos tienes acostumbrados, a tu
santo mártir Cipriano, ceñido con las ínfulas episcopales y
coronado con la pasión del martirio.
Ninguna amenaza de crueles príncipes le hizo temblar, ni la
lúgubre y sucia oscuridad de las mazmorras constituy�
impedimento para el propósito santamente deliberado; ni le
turb� el filo de la templada espada que amenazaba su
garganta.
Constancia intr�pida, fe sin vacilaciones, firme
perseverancia.
La sagrada vestidura con que se revestía siempre para
oficiar ante tu santo altar, la ech� por tierra para
arrodillarse, esperando la llegada del verdugo como si te
esperase a ti, Señor, y dispuso que se le dieran veinte
monedas como precio de su trabajo, comprando la muerte
temporal para ganar con ella la corona de la vida
perdurable. Intentó con manos temblorosas ceñir sus sienes
con una venda, pero tuvieron que ayudarle los hermanos a
ceñir aquella sagrada cabeza entregada ya a Cristo.
Y aunque turbado por el pavor de la humana fragilidad, pero
confiando constantemente en ti con la esperanza de su fe,
tap� con sus dedos los ojos cerrados, para no verte
resplandeciente antes de recibir en su garganta el golpe de
la espada. Y así no vacil� en ofrecer su cuello a la afilada
espada, preparada para su muerte, superando con el
sacrificio de la vida presente su naturaleza mortal, para
conseguir la inmortalidad de la vida eterna.
Por Jesucristo nuestro Señor, al que con razón todos los
ángeles y arcángeles no cesan de aclamar diariamente,
diciendo: |
Post Sanctus
/ Oración
después del Sanctus |
Vere sanctus et pius es, Dómine
Deus noster, quem hodi�rno die præséntis sacrifícii litatióne
laud�mus, in qua tanti pontíficis tui Cypri�ni gloriósa univérso
orbe et perfécta in Christo consumm�tio celebrátur.
Qui iam in caritátis tuæ arce cons�stens, tam Magístri quam
Dómini præced�ntis illumin�ta cordis �cie inh�r�ndo vest�giis,
m�ruit eius p�rticeps �ffici passiónis, ut póstmodum consors
fúeret regni; ac per hoc heres Dei, et coh�res fúeret Christi.
Hinc namque pópulum sibi cælésti auctoritáte comm�ssum,
non solum doctrín� f�ntibus irrig�vit, sed étiam in confessióne
pii nóminis f�rtiter pers�verans, sánguinis effusi�ne decorívit.
Veri past�ris electíssimus imitátor exs�stens, qui dum pro
�vibus sibi comm�ssis acceptab�lia Deo sacrifícia i�giter
retulísset, ut se ipsum quoque post hæc possit ei, cui h�ctenus
ministr´verat, sacrifícium accept�bile exhib�re, oratióne
conténua flagit�vit.
Implens sc�licet �pere quæ prædic�verat verbo, nec in áliquo
pr�varicatiónis reus exs�stens, mérito illi apóstolo géntium
atque magístro co�quátus est Paulo, in quo Christus hábitans
velut e templi sui concl�vibus loquebátur.
Tibi ígitur, omnípotens Deus, sanctórum tu�rum sunt
deput�nda præc�nia, cui cura est étiam certámina cæléstibus
præmiis destin�ta mir�fice proflig�re.
Hos tu iam in número tu�rum aggreg�tos ætérnis div�tiis
locuplet�re dignátus es; quos, quia in te teque in illis,
Dómine, manáre conf�dimus, ut eos nobis máseris in patroc�nium
deput�re dign�ris supplíciter postul�mus.
Quia tu es Dóminus ac Redémptor ætérnus. |
Santo y piadoso es
en verdad nuestro Señor Dios, y con el ofrecimiento del presente
sacrificio te alabamos en este día en que se celebra la
inmolación de tu gran pontífice Cipriano, gloriosa para todo el
orbe, perfecta en Cristo. Porque, afirmado en la fortaleza de tu
amor, siguiendo con corazón iluminado las huellas de su maestro
y Señor, que iba delante, mereció ser partícipe de su pasión,
para ser después consorte de su reino, y por ello heredero de
Dios y coheredero de Cristo. �ste no sólo abrev� al pueblo que
le había encomendado la celestial autoridad en las fuentes de su
doctrina, también, perseverando con fortaleza en su confesión de
tu piadoso nombre, lo adorn� con la efusión de su sangre.
Imitador amantísimo del verdadero pastor, suspir� constantemente
en su oración que, así como diariamente ofrecía a Dios
sacrificios aceptables en favor de las ovejas que se le
confiaron, pudiera al final ofrecerse a sí mismo en sacrificio
grato a aquel a quien hasta entonces había servido.
Cumpliendo así con las obras lo que había predicado con la
palabra, y sin incurrir en prevaricación alguna, justamente se
igual� con aquel apóstol de las gentes y maestro Pablo, en el
que habitaba Cristo, hablando como desde el interior de un
templo.
A ti, pues, Dios todopoderoso, hay que atribuir los ejemplos
de los santos, ya que tienes cuidado de llevar maravillosamente
a su término los combates destinados a los premios celestiales.
Tú ya te has dignado colmar de las riquezas eternas a los
agregados al número de tus santos, los que confiamos que
permanecen en ti y tú en ellos. Te rogamos les encomiendes la
misión de ser los patronos, de nosotros los desvalidos.
Porque tu eres Señor y Redentor eterno. |
Post Pridie
/ Invocación |
Sanctífica, Dómine, oblata
tibi ab �nfimis, qui solus glorificáris in sanctis, ut in tanti
viri sollemnitáte ante altáre tuum ast�ntes, illo reple�mur
caritátis tuæ ardóre, quo idem vir plenus non solum mortem pro
te capit�lem præopt�vit susc�pere, sed ipsum quoque, qui se
percuss�rus esset, volunt�ria m�luit remunerári merc´de.
R/. Amen. |
Santifica, Señor, las ofrendas que
se te ofrecen en la tierra, tú que eres glorificado entre los
santos, para que los que rodeamos tu altar en la solemnidad de
tan alto varán, quedemos llenos de aquel ardor de tu caridad,
que llenaba también al mismo santo, y por eso no sólo acept� la
sentencia capital por tu nombre, sino que quiso remunerar de sus
bienes al mismo que había de matarle.
R/. Amén. |
Te
præstánte, sancte Dómine, quia tu hæc ómnia nobis indígnis
servis tuis valde bona creas, sanctíficas, vivíficas,
ac præstas nobis, ut sint benedícta a te Deo nostro
in sécula sæculórum.
R/.
Amen. |
Concédelo, Señor santo, pues creas todas estas
cosas para nosotros, indignos siervos tuyos, y las haces tan
buenas, las santificas, las llenas de vida, las bendices y nos
las das, así bendecidas por ti, Dios nuestro por los siglos de
los siglos.
R/. Amén. |
Ad Orationem
Dominicam / Introducción al Padre
nuestro |
Ecce,
Dómine, redémptor noster et c�nditor, hodi�rno die
incumb�nte festo Cypri�ni mártyris tui copi�sius iucund�mur,
et tamen pro ablutióne nostrórum críminum suspir�mus. Illíus
quippe gloriósos c�neres r�tinet afric�na Carth�go, sed
lingua toto p�ne claret in mundo.
Unde quia hic vir etsi lículo tene�tur in córpore,
benefíciis tamen patet ub�que, te rogámus et p�timus, ut
eius nobis suffrágio ea quæ tibi debómus dim�ttas, cuius nos
doctrínis, ut te orémus, illústras: |
Señor,
redentor y creador nuestro, mira cómo en este día en que cae
la festividad de tu mártir Cipriano hacemos fiesta con gozo,
aunque por otra parte suspiremos por el perdón de los
pecados. Sus gloriosas cenizas las mantiene la africana
Cartago, pero su lengua resuena en casi todo el mundo. Y
por eso, aunque el cuerpo de tal varán est� sepultado, se
muestra en todas partes por sus beneficios. Y así te pedimos
que por su sufragio nos perdones todo lo que te debemos,
como nos iluminas con tu doctrina para rogarte: |
Benedictio /
Bendición |
Intercéssu
mártyris sui Cypri�ni a v�tiis ómnibus liberámini, qui vig�nti
áureos suo ábtulit percuss�ri.
R/. Amen. |
Por la intercesión
del mártir Cipriano, que ofreció veinte áureos a su verdugo,
quedóis libres de todos los vicios.
R/. Amén. |
Eius quoque fove�mini
indessin�nter præsídiis, cuius læt�mini in doctrínis.
R/.
Amen. |
Que sus ayudas os calienten siempre el corazón,
y sus doctrinas os llenen de alegría.
R/. Amén. |
Et qui vos verbis �nstruit ad
vitam, benefíciis perd�cat ad glóriam.
R/. Amen. |
Y el que con su palabra os instruy� para la
vida, con sus beneficios os lleve a la gloria.
R/. Amén. |
Per misericórdiam tuam, Deus noster, qui
es benedíctus et vivis et ómnia regis in sécula
sæculórum.
R/. Amen. |
Por tu misericordia, Dios nuestro, que eres
bendito y vives y todo lo gobiernas, por los siglos de los
siglos.
R/. Amén. |
Completuria
/ Oración
conclusiva |
D�bitas tibi, Dómine
ætérne, reférimus grates, et Iesu Christo Dómino nostro, in
cuius similitúdinem beatíssimus Cypri�nus dum offert
víctimam, ipse est víctima. Dumque sacerdótium �ligit,
martárium devótus impl�vit. Obt�neat ígitur apud te Deus
summe, máseris indulgéntiam post d�lictum, qui m�ruit post
sacerdótium sub�re martárium.
R/. Amen.
|
Señor
eterno, te damos las debidas gracias, igual que a
Jesucristo, nuestro Señor; a semejanza suya, san Cipriano se
hace víctima al ofrecer la víctima, y mientras elige el
sacerdocio, cumple también con el martirio. Que obtenga en
tu presencia, Dios altísimo, el perdón para los que
incurrieron en delito, el que después de su sacerdocio
alcanzó el martirio.
R/. Amén. |
Per tuam magnam misericórdiam, Deus noster, qui
vivis et regnas in sécula sæculórum.
R/. Amen. |
Por tu gran misericordia, Dios
nuestro, que vives y reinas por los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
1. Las
partes variables de la misa que aquí se ofrecen (textos
eucológicos, cantos y lecturas) junto al Ordinario (Liber Offerentium
u Oferencio)
permiten componer la misa completa. Los textos latinos
son los oficiales y est�n tomados del Missale
Hispano-Mozarabicum II (pp. 533-540) y del Liber Commicus II
(pp. 177-180). Los textos bíblicos en español est�n tomados de la
Sagrada Biblia, versión oficial de la Conferencia Episcopal
Española. BAC, Madrid 2011. Las oraciones en español est�n tomadas de
www.lexorandies.blogspot.com.
(Se recuerda que hasta la
fecha no existe misal oficial en español).
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