Misa en
Rito Hispano-Mozárabe
13 Septembris
/
13 de septiembre Littaniæ ante diem sancti
Cypriani, episcopi
Letanías de la
víspera de san Cipriano, obispo
Memoria / Memoria
(1)
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LITURGIA VERBI / LITURGIA DE LA PALABRA
Lectio sapientialis
/ Lectura
sapiencial |
Prov 7,1-4 |
Léctio libri Proverbiórum.
R/. Deo
grátias. |
Lectura del
libro de los Proverbios.
R/. Demos
gracias a Dios. |
Fili mi:
Custódi sermónes meos
et præcepta mea recónde tibi.
Serva mandíta mea et vives,
et legem meam quasi pup�llam óculi tui.
Liga ea in d�gitis tuis,
scribe illa in t�bulis cordis tui.
Dic sapiéntiæ: «Soror mea es»
et prud�ntiam voca Am�cam.
R/.
Amen.
|
Hijo mío:
Guarda mis palabras
y conserva mis mandatos.
Guarda mis preceptos y vivir�s;
que sea mi enseñanza como la niña de tus ojos.
ítalos a tus dedos,
escr�belos en la tablilla de tu corazón.
Di a la sabiduría: «Tú eres mi hermana»,
y llama a la inteligencia tu amiga.
R/.
Amén. |
Prophetia
/ Profecía |
Lev
19,1-3.9-18.31-36 |
Léctio
libri Lev�tici.
R/. Deo
grátias. |
Lectura del
libro del Lev�tico.
R/. Demos
gracias a Dios. |
In
diébus illis:
Locátus est Dóminus
ad Móysen dicens: «L�quere ad omnem c�tum
fili�rum Ísrael et dices ad eos: Sancti estáte, quia sanctus
sum ego, Dóminus Deus vester.Unusqu�sque matrem et patrem suum
t�meat. Ego Dóminus Deus vester.
Cum mess�eris s�getes terræ tuæ, non
tond�bis usque ad mírginem agri tui nec reman�ntes spicas
cólliges. Neque in v�nea tua rac�mos et grana decid�ntia
congreg�bis, sed paupéribus et peregrínis carp�nda dim�ttes.
Ego Dóminus Deus vester.
Non faci�tis furtum. Non menti�mini,
nec dec�piet unusqu�sque próximum suum.
Non periur�bis in nómine meo nec
p�llues nomen Dei tui. Ego Dóminus.
Non f�cies calémniam próximo tuo nec
spoli�bis eum. Non mor�bitur merces mercenn�rii apud te
usque mane.
Non maledíces surdo nec coram cœco
pones offend�culum; sed tim�bis Deum tuum. Ego Dóminus.
Non faci�tis, quod in�quum est in
iudício. Non consíderes pers�nam páuperis nec honóres vultum
poténtis. Iuste iúdica próximo tuo. Non eris crimin�tor et
sus�rro in pópulo tuo. Non stabis contra sánguinem próximi
tui. Ego Dóminus.
Ne �deris fratrem tuum in corde tuo;
argue eum, ne hábeas super illo peccátum. Non qu�res
ultiónem nec ir�sceris c�vibus tuis. D�liges próximum tuum
sicut te�psum. Ego Dóminus.
Non declin�tis ad pyth�nes nec ab
har�.lis �liquid sciscit�mini, ut pollu�mini per eos. Ego
Dóminus Deus vester.
Coram cano cápite cons�rge et h�nora
pers�nam senis; et time Deum tuum. Ego Dóminus.
Si habitáverit tecum �dvena in terra
vestra, non opprim�tis eum; sed sit inter vos quasi
indígena, et déliges eum sicut te�psum: fuístis enim et vos
ádvenæ in terra Ægípti.
Ego Dóminus Deus vester.
Nol�te f�cere in�quum �liquid in
iudício, in r�gula, in p�ndere, in mensúra. Stat�ra iusta,
�qua p�ndera, iustum ephi �qu�mque hin sint vobis. Ego
Dóminus Deus vester, qui ed�xi vos de terra
Ægípti.
R/.
Amen.
|
En aquellos días:
El Señor habl� a Moisés
diciendo: «Di a toda la comunidad de los israelitas: Sed
santos, porque yo, el Señor, vuestro Dios, soy santo.Respetad a vuestros padres y guardad mis sábados:
yo, el Señor, vuestro Dios.
Cuando hagáis la recolección de vuestras tierras no
segará.s hasta la misma orilla del campo. No recogerás las
espigas caídas, no har�. el rebusco en tus viñas ni
prestarán atención a la fruta caída de tu huerta; lo dejar�.
para el pobre y el extranjero: yo, el Señor, vuestro Dios.
No robaréis, no mentir�is ni os engañaréis unos a otros.
No jur�is en falso por mi nombre, pues será profanar el
nombre de Dios: yo, el Señor.
No oprimas ni explotes a tu prójimo; no retengas el
salario del jornalero hasta la mañana siguiente.
No insultar�. al sordo ni pondrás tropiezos delante del
ciego. Temerás a tu Dios: yo, el Señor.
No haréis injusticias en los juicios; ni beneficiar�. al
débil ni favorecerás al poderoso: juzgarás con justicia a tu
prójimo. No andar�. difamando a los tuyos ni pondrás en
peligro la vida del prójimo con falsas acusaciones: yo, el
Señor.
No guardar�. odio a tu hermano, antes bien lo corregirás
para no hacerte cómplice de su pecado. No serás vengativo ni
guardar�. rencor hacia tus conciudadanos. Amar�. a tu
prójimo como a ti mismo: yo, el Señor.
No consultaréis a los nigromantes ni recurrir�is a los
adivinos, si no queréis quedar impuros: yo, el Señor,
vuestro Dios.
Ponte en pie ante el hombre de canas, honra al anciano y
teme a Dios: yo, el Señor.
Si un extranjero se establece en vuestra tierra, en medio
de vosotros, no lo molestaréis; será para vosotros como un
compatriota más, y lo amar�. como a ti mismo, pues tambión
vosotros fuisteis extranjeros en Egipto: yo, el Señor,
vuestro Dios.
No haréis injusticias en los juicios ni cometer�is fraude
en pesos y medidas. Tened balanzas justas, pesos justos y
sean exactos el peso y la medida: yo, el Señor, vuestro
Dios, que os he sacado de Egipto.
R/.
Amén.
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Psallendum
/ Salmo de meditación |
Sal 118,49-50.51-52 |
Spem
dedísti mihi, Dómine. Hæc me consol�ta est in
humilitáte mea. |
Recuerda
la palabra que me diste, Señor. Esto ha sido mi consuelo en la
miseria. |
- V/. Supérbi iníque
ag�bant usquequóque, a lege autem tua non declinávi; memor
fui iudici�rum tuærum, Dómine.
R/. In humilitáte mea.
|
- V/. Los orgullosos se han
burlado bien de mí, pero yo no me he apartado de tu ley. Me
acuerdo de tus sentencias de otro tiempo, Señor.
R/. En la miseria.
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Apostolus
/ Apóstol |
Ef 5,15-20 |
Epístola Pauli apóstoli ad
Eph�sios.
R/. Deo
grátias. |
Epístola del
apóstol Pablo a los efesios.
R/. Demos gracias a
Dios. |
Fratres: Vidéte ítaque caute quómodo ambul�tis,
non quasi insipión.es sed sapientes, redim�ntes tempus, quóniam
dies mali sunt. Proptárea nolíte fúeri imprud�ntes, sed
intell�gite, quæ sit volóntas Dómini.
Et nolíte inebri�ri vino, in quo est
lux�ria, sed impl�mini Spíritu loqu�ntes vobismet�psis in
psalmis et hymnis et cánticis spiritúlibus, cantóntes et
psall�ntes in córdibus vestris Dómino. Gr�tias agéntes semper
pro ómnibus in nómine Dómini nostri Iesu Christi Deo et Patri.
R/. Amen. |
Hermanos: A ver cómo os comport�is; que no sea como insensatos, sino como
inteligentes, aprovechando el tiempo, porque los días son malos. Por consiguiente, no actuæis como necios, sino procurad conocer
cuál es la voluntad del Señor.
No bebéis vino hasta emborracharos, pues eso lleva al
desenfreno; al contrario, llenaos del Espíritu Santo recitando
entre vosotros salmos, himnos y cánticos espirituales, cantando
y alabando al Señor en vuestros corazones, dando siempre gracias
por todo a Dios Padre en nombre de nuestro Señor Jesucristo.
R/.
Amén. |
Evangelium
/ Evangelio |
Lc 15,1-10 |
Léctio sancti
Evangúlii secóndum Lucam.
R/. Glória tibi,
Dómine. |
Lectura del santo
Evangelio según san Lucas.
R/. Gloria a ti,
Señor. |
In illo
témpore:
Erant autem appropinqu�ntes ei omnes public�ni
et peccatóres, ut aud�rent illum. Et murmurábant pharis�i et
scr�b� dicéntes: «Hic peccatóres r�cipit et mandícat cum illis».
Et ait ad illos parábolam istam dicens:
«Quis ex vobis homo, qui habet centum oves et si perdéderit unam
ex illis, nonne dim�ttit nonag�nta novem in desérto et vadit ad
illam, quæ perúerat, donec invéniat illam? Et cum invénerit eam,
imp�nit in �meros suos gaudens et véniens domum c�nvocat amícos
et vic�nos dicens illis: «Congratul�mini mihi, quia invéni ovem
meam, quæ perúerat�.
Dico vobis: Ita gáudium erit in cœlo super
uno peccatóre p�nitentiam agénte quam super nonag�nta novem
iustis, qui non �ndigent pœniténtia.
Aut quæ múlier habens drachmas decem, si
perdéderit drachmam unam, nonne acc�ndit luc�rnam et ev�rrit
domum et qu�rit dilig�nter, donec invéniat? Et cum invénerit,
c�nvocat amícas et vic�nas dicens: «Congratul�mini mihi, quia
invéni drachmam, quam perdéderam».
Ita dico vobis: Gáudium fit coram ángelis
Dei super uno peccatóre pœniténtiam agénte».
R/. Amen. |
En aquel tiempo: Los publicanos y los pecadores se acercaban para oírlo. Y los
fariseos y los maestros de la ley lo criticaban: «�ste acoge a
los pecadores y come con ellos».
Entonces les propuso esta parábola: «¿Quén de vosotros, si
tiene cien ovejas y se le pierde una, no deja las noventa y
nueve en el campo y va en busca de la perdida hasta que la
encuentra? Cuando la encuentra, se la echa sobre sus hombros
lleno de alegría, y, al llegar a casa, llama a los amigos y
vecinos y les dice: «Alegraos conmigo, porque he encontrado mi
oveja perdida!
Pues bien, os digo que habrá más alegría en el cielo por un
pecador que se arrepiente que por noventa y nueve justos que no
necesitan arrepentirse.
O ¿qué mujer que tenga diez monedas, si pierde una, no
enciende una luz y barre la casa y la busca cuidadosamente hasta
encontrarla? Y cuando la encuentra, llama a sus amigas y vecinas
y les dice: �Alegraos conmigo, porque he
encontrado la moneda que había perdido�.
Os digo que así se alegrará. los ángeles de Dios por un
pecador que se arrepiente».
R/.
Amén. |
Laudes |
Sal 149,5 (2) |
Allelúia. |
Aleluya. |
V/. Exsult�bit iustus in glória, et
gaud�bit in lætítia sempitérna.
R/. Allelúia. |
V/. El justo saltar� de gozo en la
gloria, se alegrará con un gozo eterno.
R/. Aleluya. |
Sacrificium
/ Canto del Ofertorio |
Lev 26,3-4.12 (3) |
Si
in præcéptis meis ambulav�ritis, et custodi�ritis mandíta mea et
fecúritis ea, dicit Dóminus, dabo vobis pl�viam temp�ribus suis,
et terra gignet germen suum, et pomis árbores replebántur,
Allelúia, Allelúia. |
Si
seguís mis leyes y guard�is mis mandamientos poniéndolos en
práctica, dice el Señor, os daré a su debido tiempo la lluvia
necesaria, la tierra producir� sus frutos y los árboles de los
campos darán los suyos, aleluya, aleluya. |
V/. Ponam sanctuærium meum in médio
vestri et non ab�ciet vos ánima mea.
R/. Allelúia, Allelúia. |
V/.
Establecerá mi morada en medio de vosotros y no os aborrecer�.
R/. Aleluya, aleluya. |
Oratio Admonitionis
/ Monición
sacerdotal |
Ecce, dilectíssimi fratres,
antíqui veterat�ris invalesc�nte gr�viter incent�vo
flagiti�rum divers�rum, comm�ttitur f�cinus, osténditur
ulcus, propal�tur infidelitátis imm�ne del�quium. Quo et
totíus mund�n� molis m�china labef�cta subr�itur, et
Ecclésiæ Cathólicæ vigor magna ex parte cont�ritur. Unde et
totum potest id ipsum f�nditus evértere mundum, si
pœniténtiæ lamánto, nequ�quam ad miseratiónem numen
flectátur divínum.
Et ídeo per singul�rum m�nsium cursum, trium diérum
ieión.a devótis córdibus celebrántes, præoccup�mus f�ciem
Dei in confessión.; ne ob scelus ass�duum frag�re cœli
s�bruat mundum; ne terra diss�liens univérsum abs�rbeat
hóminis genus, neve, v�ria ill�ta clade, generíliter
disp�reat orbis. Prof�cto �tenim ille cito flectátur ad
véniam, si absque malítia contr�ti cordis prospéxerit
cotidión. peccámina.
R/. Amen. |
Queridos
hermanos, mirad cómo toman fuerza las tentaciones del
antiguo enemigo, que pretende envejecerlo todo y se cometen
crímenes, se ponen de manifiesto las más vergonzosas lacras
y se propaga el terrible vicio de la infidelidad. Con ello
se socavan los cimientos del mundo, parece que va a
derrumbarse toda su organización, y hasta se resquebraja el
vigor de la Iglesia Católica. Todo el universo podría
venirse abajo si por los clamores de la penitencia no
aplacáramos a Dios, confiándonos a su misericordia. Por
eso, al ir pasando los meses celebramos estos días de ayuno,
para buscar, alabándole, el rostro de Dios, y suplicarle que
no deje perecer al mundo aplastado por el hundimiento del
cielo, provocado por la multiplicación de los crímenes, ni
deje que la tierra, abriendo sus fauces, se trague al género
humano, haciendo desaparecer al orbe entero en la
dislocación de sus elementos. Dios se inclinará de inmediato
al perdón si logramos calmar su ira aunque contemple cada
día nuestros pecados, si ve tambión nuestro corazón
contrito.
R/. Amén. |
Adiuv�nte eius
misericórdia, qui r�gnat in Trinitáte, unus Deus, et
p�rmanet in sæcula sæculórum.
R/. Amen.
|
Por el auxilio misericordioso
del único Dios, que reina en Trinidad y permanece por los
siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Alia / Oración entre los
Dípticos |
N�vimus, n�vimus, o summ� pietátis
Dómine, quot innumer�sæ exstent misericórdiæ tuæ. Nam si
quantis s�dule crim�nibus sauci�mur att�nderes, nullus esset
qui tuam posset ev�dere ultiónem. Sed quia es
incomparabíliter pius, ob hoc in�stimabíliter parcis
errántibus. Et quantum es præ ómnibus gloriósus, tantum
absque severitáte int�ndis humánum.
Pro�nde miseratióne tuæ fid�ntes, omnipotentíssimam
tuam flagit�mus cleméntiam ut Ecclésiæ tuæ fidem sub
augm�nto corr�bores, commoditátem princípibus nostris
tr�buas, et �quitátem eis in iudic´ndo, atque mansuetúdinem
c�mules; pópulo tuo fidéli miserátus véniam dones, et
cunctos profanatióne diversor�mque facónorum nota resp�rsos
corrig�ndo em�cules, atque indulg�ndo sanctífices. Qu�tenus
glóriæ æternitátem per fidem acqu�rant, et perpétuæ
felicitátis dignitátem per opus bonum obt�neant.
R/. Amen.
|
Señor
de piedad infinita, bien conocemos que tu misericordia no
tiene fin. Pues si tuvieras en cuenta nuestros pecados y la
frecuencia con que los cometemos, no habría nadie que
pudiera escapar de tu castigo. Pero como eres
incomparablemente piadoso, perdonas sin medida a los que se
extravían. Y porque tu gloria abarca mucho más de lo que
podemos alcanzar nosotros, tratas a los hombres sin excesiva
severidad.
Así que, confiando en tu misericordia, imploramos con
fervor tu clemencia omnipotente para que afirmes y aumentes
la fe de tu Iglesia, des el bienestar a nuestros gobernantes
y les concedas equidad en el juicio, llenándolos de
mansedumbre. Mira con benevolencia a tu pueblo fiel y
concede el perdón a todos los que han incurrido en diversos
pecados. L�mpialos con la conveniente corrección y
santif�calos después de perdonarlos. Así, por la fe,
llegará. a la gloria eterna y por sus buenas obras obtendr�n
el resplandor de la felicidad eterna.
R/. Amén. |
Per
misericórdiam tuam, Deus noster, in cuius
conspéctu sanctórum Apostolórum et
Mártyrum, Confessórum atque Vírginum
nómina recitántur.
R/. Amen.
|
Por tu misericordia, Dios nuestro, en cuya
presencia recitamos los nombres de los santos Apóstoles y
Mártires, Confesores y Vírgenes.
R/. Amén. |
Post Nomina / Oración
después de los Dípticos |
Deus, qui solus es mundus, et
resp�ctu grátiæ tuæ de imm�ndo �fficis mundum, absólve nos
ab omni sorde facónorum. Quo bráchio tuo iustificáti, et
nostrærum ómnium nómina adscribántur in cœlo, et fidélium
defunctórum spíritus de p�n�li
habitatióne ex�mpti, transferéntur in locum lucis ac
refrig�rii.
R/. Amen.
|
Dios,
que eres el único puro, y con tu gracia conviertes en puro
lo que no lo era, líbranos de toda mancha de pecado. Así,
justificado por tu poder, nuestros nombres queden inscritos
en el cielo y las almas de los fieles difuntos queden libres
de su morada de dolor, y lleguen al lugar de la paz y del
refrigerio.
R/. Amén. |
Quia tu es
vita vivórum, sánitas infirmórum ac
r�quies ómnium fidélium defunctórum in
ætérna sæcula sæculórum.
R/. Amen.
|
Porque tú eres la vida de los que viven, la
salud de los enfermos, y el descanso de todos los fieles
difuntos por todos los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Ad Pacem
/ Oración
de la Paz |
Christe Dómine, qui spíritus tui
ill�psu pacis bonum in tuærum córdibus effic�cius contulísti
discipul�rum, íbice a nobis per visión.m pacis tuæ,
simultátes c�nctaque ópera tenebrárum. Et quia frequ�nter
nostrærum peccáminum mole off�nsus pace tua priv�mur, ad tuæ
nos dulcédinis concórdiam r�voca, et pacis f�dus
ómnibus intemer�to iure possidéndum c�ndona.
Frat�rna sacerdótes tuos semper caritáte conn�cte, cord�sque
eis et corpóribus mundátiam prælarg�re, et per viam eos tuæ
ded�cito voluntátis. Qu�tenus datióne don�rum tuærum
mere�mur caritátis ampl�xibus in comm�ne t�bimet
indisolubíliter soci�ri.
R/. Amen.
|
Cristo
Jesús, que al derramar tu espíritu en los corazones de tus
discípulos les comunicaste el don de la paz, aparta de
nosotros por esa misma paz las enemistades disimuladas y
todas las obras de las tinieblas. Ll�manos a la dulce
concordia cuantas veces quedemos privados de la paz al
ofenderte con nuestros pecados, y concédenos a todos
mantenernos firmes por tu gracia en el compromiso de la paz.
Mant�n unidos a tus sacerdotes en la caridad fraterna,
ot�rgales la pureza de cuerpo y alma, llevóndolos por el
camino de tu voluntad. De forma que al ser partícipes de tus
dones, merezcamos quedar indisolublemente unidos a ti por
los abrazos de la caridad.
R/. Amén. |
Quia tu es
vera pax nostra et cáritas indisrúpta,
qui vivis tecum et regnas cum Spíritu Sancto,
unus Deus, in sæcula sæculórum.
R/. Amen.
|
Porque tú eres nuestra paz verdadera,
caridad indivisible; tú, que vives contigo mismo y reinas
con el Espíritu Santo, un solo Dios, por los siglos de los
siglos.
R/. Amén. |
Illatio / Acción de
gracias |
Dignum satis est, omnípotens Deus,
vere satis pulchrum et in�stim�bile gloriósum est, nos
incessabíliter tibi Deo nostro gratiárum c�piam p�ndere, et
indesin�nti i�bilo in maiestátis tuæ iudíciis exsult�re.
Ind�bie �tenim liquet, quia et quando ir�sceris, errántes
patírna pietáte redargu�ris, et quando placéris, imm�ritis
grátiæ tuæ donaria tr�buis.
Quis �tenim maiestátem tuam cond�gnis páterit votis
ext�llere? Cuius sublímitas vel miserátio nulla potest
ratióne considerári. Numer�sa �tenim sunt �perum carnélium
sc�lera, quæ cum absque terráre patróntur, nullus dignus
est, qui perhib�nte Apóstolo tuo, regno cælésti potiátur.
Nam fornic�tio divers�rum ánimas s�uciat, immundítia
�nquinat, lux�ria sórdidat, avar�.ia, quæ est idolórum
s�rvitus, det�rpat, beneficía perv�rtunt, contentiónis
dist�rbant, profan�tio nóminis tui et iusiurándi
transgréssio gr�viter d�icit. Et quamplúrima �lia quibus
turbul�ntis m�tibus corda hóminum lancinántur;
quæ dum in pern�ciem nostri sæpe crebr�scunt, mundo
senesc�nte aspícimus ollam peccatórum nostrærum igne
succ�nsam.
Unde cern�ntes nos t�libus inc�mmodis circums�ptos,
qui de vitæo nostræ méritis coram te, summe Pater, pro
sol�mine nostro loqu�mur, �spiam reperúre, nequ�mus.
Ligav�runt nos iniquitátes nostræ, et e�rum vínculis
detin�mur per ómnia vincti. Nihil est ex nobis, quod mérito
prosperútur nobis. Sed quia nos de tua pietáte confídere
iubes, qui non vis mortem peccatóris sed ut convertátur et
vivat, ob hoc, speréntes in tuo nómine, non defécimus
toleréntia bon� spei.
Trium enim diérum per uniuscuiúsque mensis curric�lum
exhomol�gesim fación.es pro totíus pópuli deléctis, hoc tibi
lib�men dedic�mus sacrifícii salutáris, posc�ntes, ut
quidquid cotidiónis diébus generíliter actu vel cogitatióne
off�ndimus, miserátus ign�scas. M�nuum �tenim tuærum
opif�cium sumus; non nos in tua ira diiódices, ut mer�mur.
Princípibus quoque nostris et potestátibus sæculi huius
fidélibus commoditátem vitæ, sim�lque mansuetúdinis
temperéntiam tr�bue; et univérso pópulo tuo christióne,
quidquid contra tuam voluntátem agit, propitiátus om�tte.
De infidélium sane �ntimis profanatiónis nodos
res�lve, et cóllidi hostis ab eis ast�tiam excl�de, atque
eos qui nequ�quam sunt transgressiónis exp�rti scelus, ne
aliqu�tenus pervertántur, custódias. Pestil�ntiam, famem,
vari�que cladis incúrsum, a nostris procul �ffice fínibus;
quiétem terræ, opul�ntiam frugum et grátiæ tuæ tr�bue dona,
atque infírmis salutáre fom�ntum. Qu�tenus dum ea, quæ os
nostræ mortalitátis a te, piíssime Pater, exsp�stulat,
largition�que tua exst�terint attrib�ta, totíus pópuli
críminis noxa det�rsa, caritátis dono t�bimet glomer�ti,
mere�mur fiduciíliter cum omni virtútum cæléstium frequ�ntia
proclamóre: |
En
verdad es digno, Dios todopoderoso, en verdad hermoso y
glorioso sobre toda ponderación, que sin cesar te demos
gracias, Señor, Dios nuestro, y con júbilo incontenible
ensalcemos tu majestad. Cuando manifiestas tu ira estás
reconviniendo a los equivocados con piedad paterna, y cuando
te muestras benigno nos concedes los inmensos dones de tu
gracia.
¿Quén podría ofrecer dignos obsequios a tu majestad? No
tenemos medio de comparar tu grandeza y tu misericordia. Son
tantos los crímenes y las malas acciones que se perpetran
sin vacilar, que con razón dice el Apóstol que no hay nadie
digno de alcanzar el reino celeste. Pues la fornicación
hiere las almas de muchos, la impureza los ensucia, la
lujuria los mancha; la avaricia, que es servidumbre de
idolatría, los corrompe, los favores les pervierten, las
disensiones les perturban; la profanación de tu nombre y la
transgresión del juramento gravemente los deprime; y otras
muchas cosas que con turbulentos movimientos desgarran los
corazones de los hombres y van tomando incremento para
nuestro mal. Según va envejeciendo el mundo, vemos hervir al
fuego la enorme olla de nuestros pecados.
Y viéndonos asediados de tales molestias, no hallamos
mérito alguno en nuestras vidas que podamos alegar en tu
presencia para consuelo nuestro. Nos tienen atados nuestras
maldades y estamos paralizados totalmente porque nada hay en
nosotros que escape a tan estrechos lazos. Ninguna de
nuestras acciones podemos alegarla como mérito. Pero como
nos mandas tener confianza en tu piedad, porque no quieres
la muerte del pecador sino que se convierta y viva, seguimos
esperando en tu nombre y nos mantenemos en la paciencia que
brota de la esperanza saludable.
Practicando, pues, la penitencia que en el transcurso de
los meses nos va marcando por los delitos de todo el pueblo,
te ofrecemos este sacrificio de salvación, pidiéndote que
perdones con tu misericordia todo aquello con que
diariamente te ofendemos, de obra y pensamiento. Pues somos
obra de tus manos, no nos juzgues en tu ira tal como
merecemos. Da el bienestar temporal a nuestros reyes y a las
autoridades de este mundo que te son fieles: dales al mismo
tiempo la moderación en el ejercicio del poder. Perdona
propicio a todo el pueblo cristiano todo lo que hace
contrario a tu voluntad.
Líbralos de todas las vejaciones que pretende imponerles
la prepotencia de los infieles, y aparte de ellos las
insidias del astuto enemigo. Protege a los que alguna vez
han caído en el pecado para que no vuelvan a incurrir en Él.
Aleja de nuestras fronteras la peste, el hambre y cualquier
calamidad; concédenos la tranquilidad de la tierra, la
abundancia de sus frutos y de tus gracias, y la mejoría que
alivie a los enfermos. Así, Padre todopoderoso, por tu
largueza veremos conseguido todo lo que nuestros labios
mortales se atreven a pedirte; y bien unidos a ti por el don
de la caridad, llevados por la esperanza, podremos proclamar
con todas las potestades del cielo: |
Post Sanctus
/ Oración
después del Sanctus |
Vere sanctus,
vere benedíctus Dóminus noster Iesus Christus Fílius
tuus. Qui et iuste peccatóres flag�llat, et pietáte
s�lita a débitis angústiis líberat. Pro�nde c�rnui te prec�mur,
clementíssime Deus, ut et quæ male sunt consuéta a córdibus
nostris procul exp�llas; et per hæc sacra lib�mina c�nsecres nos
t�bimet, in quibus hábites, vasa mundíssima. Christus
Dóminus ac Redémptor ætérnus.
|
Santo
y bendito es en verdad nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo. Él
castiga con justicia a los pecadores y los libra con su
misericordia de las angustias que tienen merecidas. Por eso te
pedimos humildemente, Dios clementísimo, que apartes de nuestros
corazones nuestras malas costumbres, y por estas sagradas
ofrendas nos consagres para ti mismo como mansiones limpias en
que puedas reposar. Cristo, Señor y Redentor eterno. |
Post
Pridie / Invocación |
Illíbere,
quæsumus, omnípotens Deus super sacrifícii huius libatiónem,
quam tibi deférimus; et licet impéris hanc tibi mánibus
dedic�mus ac méritis, resp�ctu tamen cleméntiæ tuæ in
conspéctu tuo máneat accept�bilis.
Quo dum quisque, devotióne promptíssima, et ed�lium
sacri córporis et sánguinis tui perc�perit, s�ntiat se
dignus promeruísse custódiam, indígnus suórum críminum
véniam, l�nguidus fom�nti med�lam, contrátus vel
desesperútus spem consolatiónis s�bimet impert�tam; et hi
qui non habent subst�ntiam bonárum �perum, a te, mole dempta
peccáminum, sese gáudeant percepísse consórtium beatórum.
R/. Amen. |
Derr�mate, Dios todopoderoso, sobre este
sacrificio que te ofrecemos, y aunque nosotros te lo
ofrezcamos con manos impuras y sin méritos, por tu
clemencia, resulte aceptable en tu presencia. Así, al
recibir cada uno de nosotros con plena devoción el manjar
dulcísimo de tu sagrado cuerpo y sangre, sienta el que
procedió rectamente que ha alcanzado por ello tu protección,
sienta el indigno que alcanzó el perdón de sus faltas, el
enfermo el alivio de sus males, el arrepentido que no tenía
esperanza sienta que se le imparte el consuelo y el ánimo, y
los que se encontraban vacíos de buenas obras, libres del
peso de los pecados, se gocen de haber alcanzado de ti la
compañía de tus santos.
R/. Amén. |
Præsta, Pater ingénite, per
Unigénitum tuum, Dóminum nostrum Iesum Christum, per quem tu
hæc ómnia nobis indígnis servis tuis valde bona creas,
sanctíficas, vivíficas ac præstas nobis, ut sint benedícta a
te Deo nostro in sæcula sæculórum.
R/. Amen. |
Concédenoslo,
Padre sin principio, por tu Unigénito, Jesucristo, nuestro
Señor, por quien creas todas estas cosas para nosotros,
indignos siervos tuyos, y las haces tan buenas, las
santificas, las llenas de vida, las bendices y nos las das,
así bendecidas por ti, Dios nuestro, por los siglos de los
siglos.
R/. Amén. |
Ad
Orationem Dominicam / Introducción al Padre
nuestro |
Quid
páterit, o piíssima Trínitas Deus noster, cond�gne tibi
infírmitas humánæ fragilitátis trib�ere, quæ tantis
facónorum pond�ribus prægr�vatur cotídie? Et quia non est
hora, punctus atque mom�ntum quo a nobis non offend�ris,
Deus, ideo, coarct�ti angústiis, ad domum tuæ maiestátis
tremónd� conc�rrimus. Sc�lera nostra confessión. oris
próprii patef�cimus, advérsum nos iniquitátes nostras
pronunti�mus, vúlnerum nostrærum infirmitátes osténdimus, et
a te, vero médico malígma nostris ulc�ribus adhib�ri
expostul�mus.
Unde quia tu es Agnus Dei, qui tollis peccátum mundi,
ob hoc prostr�ti quæsumus tuæ omnipoténtiam deitátis, ut
qu�ties a nobis off�nderis, t�ties ign�scere dign�ris; quia
te pr�cipión.e, etsi indígni clam�mus e terris: |
�Qu�
podría ofrecerte dignamente, piadosa Trinidad y Dios
nuestro, la frágil y enferma naturaleza humana que cada día
se carga de tantas clases de pecados? No hay hora, minuto o
momento en el que no te ofendamos, oh Dios, y por eso nos
acercamos angustiados al trono de tu majestad. Ponemos de
manifiesto nuestros crímenes por medio de la confesión oral,
descubrimos nuestras iniquidades, destapamos nuestras
llagas, y solicitamos de ti, verdadero médico, que se
apliquen fomentos a nuestras úlceras.
Por eso, porque tú eres el Cordero de Dios que quitas el
pecado del mundo, nos postramos para solicitar de tu divina
omnipotencia, que quieras perdonarnos tantas veces cuantas
te ofendimos, para que según tu precepto, aunque seamos
indignos, alcemos nuestra voz desde la tierra: |
Benedictio /
Bendición |
Christus
Dei Fílius, qui cum Patre et Spíritu Sancto deitátis �btinet
unitátem, ipse in hoc ind�ctum abstinéntiæ ieión.um tridu�num,
pro statu Ecclésiæ Dei, et totíus pópuli salvatióne votum
vestrum clem�nter accéptet.
R/. Amen. |
Cristo,
Hijo de Dios, un solo Dios con el Padre y Espíritu Santo, reciba
con clemencia nuestro sacrificio en este ayuno penitencial, por
la estabilidad de la Iglesia de Dios y la salvación de todo el
pueblo.
R/. Amén. |
Quique solus pro
nostra salvatióne patíbulum p�rtulit crucis, ipse cor vestrum
em�culet ab omni appet�tu vanitátis.
R/. Amen. |
El que sufrió en solitario el
sacrificio de la cruz, por nuestra salvación, limpie vuestro
corazón de todo afecto de vanidad.
R/. Amén. |
Ut deféc�ti ab
univers�li colluvión. delécti, præmio ab eo poti�mini ind�pt�
promissiónis.
R/. Amen.
|
Para que, purificados de la
universal corrupción del delito, alcancéis de Él el premio de la
promesa realizada.
R/. Amén. |
Per
misericórdiam ipsíus Dei nostri qui est
benedíctus et vivit et ómnia regit in sæcula
sæculórum.
R/. Amen.
|
Por la misericordia del mismo
Dios nuestro, que es bendito y vive y todo lo
gobierna, por los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Completuria
/ Oración
conclusiva |
Ref�cti
Christi córpore, sanguiníque p�riter sanctificáti, Deo Patri
omnipoténti grátias refer�mus; ut in e�dem refectióne
sanctificatiónem habóntes hic, in futáro sæculo glóriam
percipi�mus.
R/. Amen.
|
Nutridos con el Cuerpo de Cristo y santificados
con su Sangre demos gracias a Dios, Padre todopoderoso, para
que en virtud de tal alimento perseveremos aquí en una vida
santa y consigamos la gloria en el reino venidero.
R/. Amén. |
Per grátiam pietátis eius
qui est benedíctus in sæcula sæculórum.
R/. Amen. |
Por la gracia y la
misericordia de Aquél que es bendito por los siglos de los
siglos.
R/. Amén. |
1. Las
partes variables de la misa que aquí se exponen (textos
eucológicos, cantos y y lecturas) junto al Ordinario (Liber Offerentium
u Oferencio)
permiten componer la misa completa. Los textos latinos
son los oficiales y están tomados del Missale
Hispano-Mozarabicum II (pp.525-532) y del Liber Commicus II
(pp.174-177).
Las lecturas y cantos bíblicos en español están tomados de La
Santa Biblia, edición San Pablo y la oración completuria del
Oferencio. El resto de oraciones en español está tomado de
http://www.lexorandies.blogspot.com.es/2012/09/13-de-septiembre-letanias-antes-de-san.html.
(Se recuerda que hasta la fecha no existe
misal oficial en español).
2.
Cf. Sal 149,5. N. de La
Ermita.
3.
Lev 26,3-4.11.
N. de La Ermita.
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