Misa en
Rito Hispano-Mozárabe
12 Novembris
/
12 de noviembre In diem
sancti �miliani, abbatis
En el día de san
Emiliano, abad
Memoria
(1)
|
|
Prælegendum
/ Canto de entrada |
Sal 74,10; 114,7 |
Ego in sécula gaud�bo, Allelúia, confit�bor,
Allelúia, et psallam Deo, Allelúia, Allelúia. |
Yo
siempre proclamar�, aleluya, su grandeza, aleluya, y tañer� para
Dios, aleluya, aleluya. |
V/.
Conv�rtere, ánima mea, in r�quiem tuam, quia Dóminus
benefícit mihi.
R/. Confit�bor, Allelúia, et psallam Deo,
Allelúia, Allelúia.
V/. Glória et
honor Patri et Fílio et Spirítui Sancto, in
sécula sæculórum. Amen.
R/. Confit�bor, Allelúia, et psallam Deo,
Allelúia, Allelúia. |
V/. Alma mía, recobra tu calma, que el
Señor fue bueno contigo.
R/. Su grandeza, aleluya, y tañer�
para Dios, aleluya, aleluya.
V/. Gloria y honor
al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, por los
siglos de los siglos. Amén.
R/. Su grandeza, aleluya, y tañer�
para Dios, aleluya, aleluya. |
Oratio post Gloriam
/ Oración después del
Gloria |
Confessóris
tui beatíssimi �mili�ni �nnua recussióne, Dómine, memóriam
sollémniter recol�ntes, supern� grátiæ aspersióne locupl�ta.
Ut qui nunc festa devóto pros�quimur ann�ssu, eius quoque
pérpetim cleménti regántur et protegántur int�itu.
R/. Amen.
|
Colma,
Señor, de tu gracia celestial a los que celebramos solemnemente
la memoria anual de tu confesor san Millán de la Cogolla (2), de forma que los
que ahora seguimos esta fiesta con ilusión devota seamos
perpetuamente dirigidos y protegidos por su amorosa mirada de
clemencia.
R/. Amén. |
Per misericórdiam tuam, Deus
noster, qui es benedíctus et vivis et ómnia regis in sécula sæculórum.
R/. Amen. |
Por tu misericordia,
Dios nuestro, que eres bendito y vives y todo lo gobiernas, por
los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
LITURGIA VERBI
/ LITURGIA DE LA PALABRA
Prophetia
/ Profecía |
Eclo 51,1-4
|
Léctio libri
Ecclesiástici.
R/. Deo
grátias. |
Lectura del
libro del Eclesiástico.
R/. Demos
gracias a Dios. |
Oratio
Iesu fílii Sirach.
«Confit�bor tibi, Dómine rex;
et collaud�bo te Deum salvatórem meum.
Confit�bor nómini tuo,
quóniam adi�tor et prot�ctor factus es mihi
et liberásti corpus meum a perditióne,
a l�queo linguæ in�qu�
et a l�biis oper�ntium mend�cium,
et in conspéctu insurg�ntium factus es mihi adi�tor.
Et liberásti me,
secóndum magnitúdinem misericórdiæ et nóminis tui�.
R/.
Amen.
|
Oración de Jesús, hijo de Sira.
�Te doy gracias, Señor y Rey,
te alabo, oh Dios mi salvador,
a tu nombre doy gracias.
Porque fuiste mi protector y mi auxilio,
y libraste mi cuerpo de la perdición,
del lazo de una lengua traicionera,
de los labios que urden mentiras;
frente a mis adversarios
fuiste mi auxilio y me liberaste,
por tu inmensa misericordia y por tu nombre».R/. Amén.
|
Psallendum
/ Salmo de meditación |
Sal 70,22.24 |
Confit�bor
tibi, Dómine, in vasis psalm�rum veritátem tuam; psallam tibi in
cíthara, Deus sancte Ísrael. |
Te alabaré, Señor,
con el salterio, ponderando tu fidelidad, te cantaré con la
cítara, Dios santo de Israel. |
V/.
Sed et lingua mea annunti�bit iustítiam tuam, tota die laudem
tuam.
R/. Psallam tibi in cíthara,
Deus sancte Ísrael. |
V/. Mi lengua
publicaré tu justicia, te alabaré durante todo el día.
R/. Te cantaré con la cítara, Dios santo de Israel. |
Apostolus
/ Apóstol |
Rom 10,8-13
(3) |
Epístol� Pauli apóstoli ad Rom�nos.
R/.
Deo grátias. |
Epístola del
apóstol san Pablo a los romanos.
R/. Demos gracias a
Dios. |
Fratres:
Hoc est verbum fídei, quod prædic�mus. Quia si confite�ris in ore tuo: �Dóminum Iesum», et in corde
tuo credéderis quod Deus illum excit�vit ex mórtuis, salvus
eris. Corde enim créditur ad iustítiam, ore autem Conféssio fit in
salútem. Dicit enim Script�ra:
«Omnis, qui credit in illo, non confundétur�.
Non enim est dist�nctio Iudéi et Gr�ci, nam idem Dóminus
ómnium, dives in omnes, qui �nvocant illum: Omnis enim, quic�mque invocáverit nomen Dómini, salvus erit. R/. Amen. |
Hermanos: Esta es la palabra
de la fe que anunciamos. Porque, si profesas con tus labios que
Jesús es Señor, y crees con tu corazón que Dios lo resucitó de
entre los muertos, serás salvo. Pues con el corazón se cree para
alcanzar la justicia, y con los labios se profesa para alcanzar
la salvación. Pues dice la Escritura: Nadie que crea en Él
quedar� confundido.
En efecto, no hay distinción entre judío y griego, porque uno
mismo es el Señor de todos, generoso con todos los que lo
invocan, pues todo el que invoque el nombre del Señor ser�
salvo.
R/.
Amén. |
Evangelium
/ Evangelio |
Mt 11,25-30 |
Léctio sancti Evangélii
secóndum Matthéeum.
R/. Glória tibi,
Dómine. |
Lectura del santo
Evangelio según san Mateo.
R/. Gloria a ti,
Señor. |
In illo témpore:
Iesus dixit: «Conf�teor tibi, Pater, Dómine
cœli et terræ, quia abscond�sti hæc a sapi�ntibus et prud�ntibus
et revel�sti ea párvulis. Ita, Pater, quóniam sic fuit plácitum
ante te.
Ómnia mihi trádita sunt a Patre meo; et
nemo novit Fílium nisi Pater, neque Patrem quis novit nisi
Fílius et cui vol�erit Fílius revel�re.
Veníte ad me, omnes, qui laborátis et
oner�ti estis, et ego reféciam vos. T�llite iugum meum super vos
et d�scite a me, quia mitis sum et h�milis corde, et inveni�tis
r�quiem anim�bus vestris. Iugum enim meum suave, et onus meum
leve est�.
R/.
Amen.
|
En aquel tiempo:
Tom� la palabra Jesús y dijo: «Te doy gracias, Padre, Señor del
cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los
sabios y entendidos, y se las has revelado a los pequeños. S�,
Padre, así te ha parecido bien.
Todo me ha sido entregado por mi Padre, y nadie conoce al Hijo
más que el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a
quien el Hijo se lo quiera revelar.
Venid a mí todos los que est�is cansados y agobiados, y yo os
aliviar�. Tomad mi yugo sobre vosotros y aprended de mí, que soy
manso y humilde de corazón, y encontrar�is descanso para
vuestras almas. Porque mi yugo es llevadero y mi carga ligera».
R/. Amén.
|
Laudes |
Sal 74,10 |
Allelúia. |
Aleluya. |
V/.
Ego in sécula gaud�bo, confit�bor Dómino et psallam Deo
Iacob.
R/. Allelúia. |
V/. Yo siempre proclamar� su grandeza, y
tañer� para el Dios de Jacob.
R/. Aleluya. |
Sacrificium
/ Canto del Ofertorio |
Is 56,7 |
M�nera accépta
erunt super altáre meum, et domus oratiónis meæ honor�bitur,
Allelúia. |
Aceptar�
sobre mi altar tus holocaustos y sacrificios, porque mi casa es
casa de oración, aleluya. |
Oratio Admonitionis
/ Monici�n
sacerdotal |
Inter conspécua vir�rum f�rtium gesta, quos ob amórem
Christi triumphális victóriæ
pugna prov�xit ad
palmam, non
mánimam, caríssimi fratres, �mili�nus hic noster rec�nti
témpore sortátus est glóriam.
Quem Deus
nobis
omnípotens, speciále pr�videns ad exémplum,
senesc�nte iam sículo et rerum lab�ntium ruin�sis
c�sibus nutab�ndo, et patrónum serv�vit
et médicum.
Est �tenim patrónus ver�citer pr�valens,
quo defend�mur oppr�si, et necess�rius
m�dicus, quo, fav�nte Dómino san�mur �gr�ti.
Adhuc ergo, fidélium plebs, devóta mente conc�rrite, huic dol�ntis ánimæ
lacrim�sa suspíria p�ndite; ob memóriam eius vota Deo débita r�ddite, ob méritum
festa celebritátis excélite.
Obtin�bitis sine dubitatióne quod p�scitis, tantum promer�ndi f�d�ciam habeátis.
Valet enim apud Deum impetr�re quod p�titur, qui e�dem gubern�nte, calc�re
p�tuit quod tim�tur.
Ille, inquam, ille hic noster �mili�nus est, qui in hac nostrórum témporum
virtútum indígna paupert�te, ad instar apostólicæ potestátis car�smatum div�tiis
abund�vit, martyri�mque quod tranquillitáte fídei d�fuit, carnis contritióne
compl�vit.
Ita enimsui córporis cratem abstinéntiæ rig�re subi�git, excúbiis macer�vit,
nuditáte dest�tuit, solitúdine trivit, calére térruit, alg�re restr�nxit,
p�nar�mque divers�rum cruci�tibus tortor ultr�neus lacer�vit, ut quamvis
persecútor atrocíssimus inmin�ret, pœnam inveníre vix posset, quam non in se
prius spont�ne� pro Dómino iam subísset, anim�mque p�nere, si ita res ex�geret,
preopt�ret; qui tot amóra pérpetim tormentórum inc�mmoda non timóret.
Ide�que apóstolis ac martáribus æquális rite dign�scitur, quia i�sdem toler�ndis
supplíciis patrand�sque mir�culis non impar habétur.
Ob hoc ergo Trinitáti Dómino supplic�mus, ut sicut illi tant�rum bonárum
largátus est grátiam, ita ei�sdem patroc�nio, nostris facin�ribus attr�buat
véniam.
R/. Amen.
|
Entre
los hechos destacados de los varones decididos, que por el
amor de Cristo alcanzaron la palma de la victoria, por su
lucha triunfal, este Emiliano nuestro, queridos hermanos, ha
alcanzado en tiempos más cercanos una gloria no menor.
Dios omnipotente, preparando para nosotros un ejemplo
especial, en los últimos años del siglo, entre las ruinas
que amenazaban con sepultarnos, nos lo ha puesto como
patrono y médico.
Es ciertamente un patrono que prevalece en la verdad, que
nos defiende a los oprimidos, y médico necesario, que con el
favor de Dios sana a los enfermos.Así pues, pueblo fiel,
acudid devotamente, manifestadle entre lágrimas los suspiros
del alma doliente, cumplid vuestro votos ofrecidos a Dios en
su memoria, celebrad para mérito vuestro la fiesta de su
conmemoración.
Obtendr�is así, sin duda alguna, lo que pid�is, con tal de
que tengáis esperanza de conseguirlo.
Porque puede impetrar ante Dios lo que se pide, el que,
dejándose llevar por Él, pudo antes superar aquello que
temía.
Este, dir�, es nuestro Millán, que en esta indigna
pobreza de virtudes de nuestro tiempo, rebasó con la riqueza
de los carismas, a la manera de los apóstoles, y consum» con
la mortificación de la carne, el martirio que le falt� por
falta de persecuciones a la fe.
Pues de tal manera sometió su cuerpo por el rigor de la
abstinencia, lo macer� con las vigilias, lo despoj� con la
desnudez, lo tritur� con su abandono, lo castigó con el
calor, lo redujo por el frío, y lo llagó como el torturador
a ultranza, con los tormentos de las más diversas penas, que
aunque no hubieran sobrevenido otros perseguidores, apenas
hubieran podido encontrar pena que Él no se hubiera aplicado
espontáneamente por el Señor.
Y hubiera dado su vida, si las circunstancias lo hubieran
exigido, el que no temi� sufrir constantemente los más duros
tormentos.
Y por eso le reconocemos igual a los apóstoles y a los
mártires, porque le reconocemos igual capacidad para tolerar
los suplicios y obrar milagros.
Roguemos por ello al Señor, en la Trinidad, que como a Él
le dio la gracia de tantos bienes, así por su patrocinio,
conceda el perdón a nuestras malas obras.
R/. Amén. |
Adiuv�nte misericórdia divinitátis suæ
qui in Trinitáte, unus Deus, vivit et regnat in sécula
sæculórum.
R/. Amen.
|
Por la misericordia de la
divinidad del que es un sólo Dios en la Trinidad y vive y
reina por los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Alia / Oración entre los
Dípticos |
Deus, qui humáni géneris
miserátus mis�riam, in consolatiónem nostri
�perum tu�rum
magnólia, extrémis étiam temp�ribus, innotesc�ndo
mir�ficas, quo vitæ nostr� dure frag�litas,
qu� suórum merit�rum non
corr�gitur plagis, virtútum saltim provocátur exémplis, réspice tu�rum súpplicum
vota, quæ tibi ob rever�ntiam cult�ris tui, nostri sine dubitatióne patróni
�mili�ni
sanctíssimi, cordis persólvimus obsequ�la
devóti.
Da nobis, Dómine, e�dem
patrocin�nte præsídium, quo ille, fultus, et diábolum vicit et
sæculum.
Sit nobis apud te fidelíssimus intercéssor,
qui viti�rum ómnium
�xstitit debell�tor.
Interpéllet
pro máseris, qui nunc sanctis lætátur
cum ángelis.
Solvat víncula
peccáminum, qui
iam tuæ pi� claritátis contempl�tur aspéctum.
Concéde, quæsumus, hoc rog�nte, miséricors
Deus, puritátem móntibus et sanitátem corpóribus; fidélibus custódiam et
cred�ndi non credéntibus viam; sacerdótibus concórdiam, et
cl�ricis disciplínam; m�nachis perseverántiam, et sacris virg�nibus sanctim�niam;
v�duis contin�ntiam,
et cunctis comm�niter viv�ntibus in
religi�ne caut�lam.
Sit vita princípibus moder�ta,
et pax géntibus indisrúpta; frugum ómnium opul�ntia,
rer�mque necessari�rum largitáte
c�pia.
Et, quia quantum
nostra necéssitas
�xpetit, tantum lingua prorog�re non s�fficit, tu, nostrórum córdium scrut�tor, omnípotens
Deus et conscienti�rum iudex, omni conditi�ni, s�xui vel �t�ti,
ita c�mmoda concéde
præséntia, ut b�atæ vitæ gáudia non d�neges infiníta.
R/. Amen.
|
Dios,
que compadeciéndote de la másera condición del género
humano, para consuelo nuestro das a conocer tus grandezas,
incluso en los últimos tiempos, para que la dureza de
nuestra vida, que no se libra de sus penalidades por los
méritos, al menos se anime con los ejemplos de las virtudes,
mira propicio los votos de los que te suplican, que te
dedicamos con toda devoción, en reverencia del cuidador de
tu culto, el santísimo Millán, nuestro patrono.
Concédenos, Señor, por su patrocinio, la ayuda en que Él se
apoy� para vencer al diablo en este mundo.
Sea delante de ti fidelísimo intercesor en favor nuestro,
quien combatió contra todos los vicios.
Interpele por los desvalidos, el que ahora goza de la
compañía de los ángeles.
Desate las ataduras de nuestros pecados, el que ya contempla
la belleza de tu resplandor.Otárganos por sus peticiones,
Dios misericordioso, la pureza del alma y la salud del
cuerpo, la custodia de los fieles, la posibilidad de creer a
los que no creen, concordia a los sacerdotes, disciplina a
los clérigos, perseverancia a los monjes, y santidad a las
sagradas vírgenes, continencia a las viudas, y cautela a
todos los que viven en religión.
Sea moderada la vida de los príncipes y continua la paz
entre las naciones, tengamos sobreabundancia de todos los
productos de la tierra, y abundancia de todo lo necesario.
Y como no podemos extender nuestros ruegos a todo lo que en
verdad necesitamos, tú, que conoces perfectamente nuestros
corazones, Dios omnipotente y juez de las conciencias,
concede para esta vida todo lo conveniente a toda condición,
sexo y edad, y no nos niegues los gozos infinitos de la vida
dichosa.
R/. Amén. |
Per misericórdiam tuam,
Deus noster, in cuius conspéctu sanctórum
Apostolórum et Mártyrum, Confessórum atque
Vírginum nómina recitántur.
R/. Amen.
|
Por tu
misericordia, Dios nuestro, en cuya presencia
recitamos los nombres de los santos
Apóstoles y Mártires, Confesores y
Vírgenes.
R/. Amén. |
Post Nomina
/ Oración
después de los Dípticos |
Sanct�rum tu�rum, Dómine, vocábulis recens�tis,
offer�ntium quoque votis ac dormi�ntium spirítibus memor�tis, abundantíssimam
tu� pietátis cleméntiam postul�mus, ut sanctis præmia prom�ssa rest�tuens,
offer�ntibus fructum bonæ voluntátis acc�mules, et defunctórum spirítibus ætérni
refrig�rii quiéte l�t�fices.
R/. Amen.
|
Recitados
los nombres de tus santos, Señor, recordados también los
deseos de los oferentes, y las almas de los que ya duermen
en ti, imploramos la abundantísima clemencia de tu piedad,
para que cumpliendo las promesas hechas a los santos, colmes
a los oferentes con el fruto de tu benevolencia, y alegres
con el descanso del eterno refrigerio las almas de los
difuntos.
R/. Amén. |
Quia tu es vita
vivórum, sánitas infirmórum ac r�quies
ómnium fidélium defunctórum in ætérna
sécula sæculórum.
R/. Amen.
|
Porque tú eres
la vida de los que viven, la salud de los
enfermos, y el descanso de todos los fieles
difuntos, por todos los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Ad Pacem
/ Oración
de la Paz |
Fons pacis, or�go dilectiónis, perféctio caritátis,
Dómine Iesu Christe,
sinc�r� pacis ósculo cultóres tuos cons�cia, et puré caritátis afféctu
cunctos tibi servi�ntes aggl�mera, ut in hac
elécti tui festivitáte præc�lebri, ita cunctos vera pax pacútos eff�ciat, ne
qu�mpiam amaritúdo fellis ad discórdiam p�rtrahat.
R/. Amen.
|
F
uente de la paz, origen del amor, perfección de la caridad,
Señor Jesucristo, asocia en el ósculo de la paz sincera a
todos los que te rinden culto, y re�ne a todos los que te
sirven en el afecto de la más pura caridad; para que en esta
festividad celeb�rrima de tu elegido, la verdadera paz nos
haga a todos tan pacíficos, que ninguno se sienta llevado a
la discordia por la amargura de la hiel.
R/. Amén. |
Quia tu es pax vera nostra et cáritas
indisrúpta, vivis tecum et regnas cum Spíritu Sancto, unus
Deus, in sécula sæculórum.
R/. Amen.
|
Porque tú eres
nuestra paz verdadera caridad indivisible;
tú que vives contigo mismo y reinas con tu
Hijo y el Espíritu Santo un solo Dios, por
los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Illatio / Acción de
gracias |
Dignum et iustum est, vere
dignum
satis et
pulchrum est, nobis quoque convéniens ac probátum, omnipoténtiæ tuæ grates
summas persólvere, laudes
m�ximas
c�nere, hóstias præc�puas immol�re, indivísa Trínitas,
Deus noster.
Cuius grátia hic venerab�lis atlh�ta
tuus �mili�nus, in conversióne mir�ficus, in vita
clarus, post tr�nsitum �xstitit gloriósus.
Cuius
convérsio admir�bilis cápit, cuius vita virtútibus abund�vit, post cuius �xitum crebr�scunt
signa per virtútum méritum.
Hic ille tuus est agon�sta
fortíssimus, qui S�tane duríssimos in congressióne
confl�ctus, et invisibíliter ed�muit et visibíliter effugávit; quique in carne
p�situs, ita carnis reténdit acúleos, ut et in sexus disp�ris contub�rnio
d�geret et male sua damna córporis incitam�nta nescáret.
Hic ígitur coll�ta sibi a te largit�re Dómino, virtúte subn�xus, cœcis lumen reparávit
ext�nctum, paral�ticis
membr�rum r�ddidit usum, clodis gressum redintegr�vit am�ssum,
energ�minis purg�ti péctoris rest�tuit intelléctum,
et cunctis generíliter diversitáte langu�ntium �gretúdinum qu�s�te pr�buit sanitátis
effectum.
Nec tant�mmodo
mira hæc corporíliter vivus ex�rcuit, verum
�tiam maióra mórtuus,
et præstat et præstitit.
O inef�bilem magnificéntiæ tuæ poténtiam.
O virtútum immensur�bilem
summam.
O sanctu�rum
tu�rum admir�bilem vitam.
Tu es
enim, Dómine
Deus noster, magnif�cus in sanctitáte,
terr�bilis in virtúte, laud�bilis in mirab�lium
potestáte.
Libet ergo inter hæc, Dómine, in laudis tu�
præc�nia paul�sper ora res�lvere, et nova cum
illis vet�ribus comparáre, ut per hæc
prob�mus
te unum
Deum esse legis et gr�tiæ,
cum te
solum ostend�rimus nunc ins�gna oper�ri per
christ�colas sanctos, qui olim sub lege sim�lia
operátus es per eléctos.
Tu dudum,
per virgam
Móysi rubri �qu�ris prof�nda des�ccans, ut viam inter fluctus aper�res pópulo
gradi�nti, spum�sos sali g�rgites et crebra fluctuatióne vag�biles in c�mulum relig�sti; tu nunc, per
�mili�ni
tui b�culum gressum quem
orbi valitúdo lig�verat,
ut viam exped�te c�rperet resoluísti.
Tu
dudum, per Elíam, tant�llo
panis et �lei domum
v�du� multo témpore sustent�sti; tu nunc, per �mili�ni liqu�re vini paucíssimo
vir�rum multitúdinem
refecísti.
Tu
dudum per Elíseum, contra vim natúræ ferrum l�vigans
nat�re iuss�sti; tu nunc, per �mili�num, succ�sum lignum præterans
excr�scere voluísti.
Atque, ut ex eius, ita et
ex ist�us �ssibus gloriósis, mortis
umbra iam
di�tina
cons�piti, ex�ngues artus auris vit�libus
reddid�sti.
Tu dudum
Dani�li cibos ad lacum;
tu nunc �mili�no sumptus mittis ad pr�ndium.
Unde non immérito t�lia p�tuit, qui mérito
t�libus indiss�milis �xtitit.
In caritáte primus,
in patiéntia s�lidus, in humilitáte fundátus; ad
pietátem parátus, in largitióne promptíssimus;
in oratióne ass�duus, in vig�liis str�uus, in iei�niis
�rduus; in morum probitáte compásitus in ómnibus omn�no virtútibus clarus, in discretiónis
grátia subtilíssimus.
Pro his inenarrab�libus virtútibus tuis et donis, atque incomparab�libus eius
bonis, hanc libi hóstiam offérimus iubilatiónis, quam seróno tuæ pietátis
int�itus sanctificáre dign�ris.
Prostrat�sque cum tu�rum angelórum innumerab�libus
choris, cum ter oct�nis seniórum claríficis togis, cum bis binis animálibus
honóris evangélici diad�mate laure�tis, cum sanctórum ómnium inexpleb�libus
votis, hymnum tibi débitum concónnimus laudis, oris atque cordis árgano,
conclam�ntes atque ita dicéntes:
|
Es digno y justo, verdaderamente digno y hermoso,
conveniente para nosotros y saludable, que rindamos gracias
a tu omnipotencia, cantemos las mayores alabanzas y te
inmolemos las mejores hostias, Trinidad indivisa, Dios
nuestro.
Por tu gracia este venerable atleta Emiliano, después de una
conversión maravillosa, de una vida luminosa, result�
glorioso después de su muerte.
Su conversión empezó admirable desde el principio, su vida
abund� en virtudes, y después de su muerte se van repitiendo
los prodigios por el mérito de sus virtudes.
Este es aquel luchador valentísimo, que doblegó de manera
invisible a Sat�n, tras duras luchas, y lo ahuyentó
visiblemente.
Y si se trata de la carne, así embot� sus aguijones, que
pudo convivir en comunidad con personas de otro sexto, sin
sentir los incitamentos del cuerpo.Este, pues, basado en
la virtud que alcanzó por ti, Señor, devolvió la vista
perdida a los ciegos, devolvió el uso de sus miembros a los
paralíticos, devolvió la andadura a los cojos, restituy� la
inteligencia a los energúmenos, una vez purificado su
interior, y en general, a todos los afectados por varias
dolencias, les reintegr� la salud perdida.
Y no sólo ejecut� estas maravillas en su vida mortal, sino
que una vez muerto, las sigue realizando todavía mayores.
«Oh inefable poder de tu majestad!
«Oh suma sin medida de virtudes!
«Oh vida admirable de tus santos!
Tú eres ciertamente, Señor Dios nuestro, magnífico en tu
santidad, terrible por tu poder, laudable en el poder
taumatúrgico.
Nos agrada, pues, Señor, en todo esto, ejercitar un poco
nuestras bocas en proclamar tus alabanzas, y comparar lo
nuevo con lo antiguo, para que así comprobemos que tú eres
el único Dios de la ley y de la gracia, al mostrar que eres
tú solo, el mismo que ahora operas por los cristianos
santos, como en otro tiempo bajo la ley, obrabas cosas
semejantes a través de tus elegidos.
Tú, en otro tiempo, por el báculo de Moisés, secando las
profundidades del Mar Rojo, para abrir un camino entre las
olas al pueblo que caminaba, consolidaste en una masa a los
espumantes remolinos de sal constantemente fluctuantes; tú,
ahora, por el báculo de Millán, resolviste la invalidez que
privaba de andar a un abandonado, para que pudiera continuar
su camino sin dificultades.
Tú, en otro tiempo, por Elías, con un poquito de pan y
aceite, sustentaste por muchos días la casa de una viuda, y
ahora, por Millán, con una pequeñísima cantidad de vino,
diste fuerza a una multitud de hombres.
En otro tiempo, por Eliseo, hiciste que el hierro flotara,
contra las leyes de la naturaleza, y ahora, por Millán,
quisiste que un leño seco se convirtiera en árbol frondoso.
Y en uno y otro hiciste también que de sus gloriosos huesos
saliera un aura vital que volviera a la vida los miembros
exang¨es, adormecidos largo tiempo por la sombra de la
muerte.
Hace mucho tiempo enviaste alimentos a Daniel, encerrado en
la caverna, y ahora envías a Millán dinero para comprar
comida.
De donde se colige que con razón pudo obrar tales
maravillas el que aparece semejante a los citados.
Primero en la caridad, asentado en la paciencia, fundado en
la humildad, dispuesto a la piedad, prontísimo para repartir
de lo suyo, asiduo en la oración, decidido para las vigilias
y para el ayuno; bien compuesto en la honestidad de
costumbres, claro en todas las virtudes sin excepción,
utilísimo en la gracia de la discreción.
Por estas inenarrables virtudes y dones tuyos y los
incomparables bienes de Él, te ofrecemos esta hostia de
alegría: santif�cala, miróndola con el sereno rostro de tu
piedad.
Postrados con los innumerables coros de tus ángeles, con las
brillantes togas de los veinticuatro ancianos, con los seis
seres vivos coronados, con las diademas de la gloria
evangélica, con los votos inacabables de todos los santos,
te cantamos el himno de alabanza que te corresponde,
aclamando con nuestras bocas y con el árgano del corazón,
diciendo: |
Post Sanctus
/ Oración
después del Sanctus |
Vere sanctus, vere benedíctus Dóminus noster
Iesus Christus Fílius tuus.
Qui, ut mort�lium
sordes el�eret, oppr�brium mortalitátis accípit,
ut nos a pœnis perpétuis liberáret; p�n�rum
cruciam�nta sust�nuit, ut mortem
in nobis vita
per�meret.
Ad mortem usque cunctórum vita
pervénit, ut viam nobis
cæléstis pátri� reser�ret; íeris l�quidi viam ipse dev�cta morte transc�rrens,
supra cœlos in tua parte déxtera regnat�rus
ascéndit.
Per quem te súpplices
exorémus, ut hæc típica
sacram�nta respici�ndo sanctífices, et sanctificándo
resp�cias; ut, córporis ac sánguinis sui
mystéria percept�ris, ipse fautor exs�stat ad véniam,
qui liberális �xstitit redémptor ad vitam.
Ipse Dóminus ac Redémptor ætérnus.
|
Verdaderamente
es santo, verdaderamente bendito, nuestro Señor Jesucristo, tu
Hijo.
Él, para lavar las manchas de los mortales, acept� el oprobio de
la mortalidad; para librarnos de las penas perpetuas, soport�
los tormentos, para dar muerte en nosotros a la misma muerte,
con la vida, viene la vida hasta la muerte de todos; para
abrirnos el camino hacia la patria celestial, atravesando Él,
después de vencer a la muerte, el camino del aire líquido, llega
a los cielos para reinar a tu derecha.Por Él te suplicamos
que santifiques estos sacramentos representativos, miróndolos
con agrado.
Para que a los que van a recibir los misterios de tu cuerpo y de
tu sangre, les asista como operador del perdón, el que
libremente estuvo a su lado como redentor, para darles la vida.
El mismo Señor y Redentor eterno. |
Post Pridie
/ Invocación |
Hæc sunt, Christe Dómine, sacros�ncta Novi
lib�mina Testam�nti, quæ tibi in
commemoratiónem tuæ passiónis off�rre iuss�sti.
Hoc vere sacrifícium salutáre, per quod dum
tibi humánum
genus reconc�lias, regno tuæ maiestátis ass�cias.
Prec�mur ígitur, omnípotens
Deus noster,
ut supplicatiónibus nostris plac�bilis adsis, et
sanctificatiónem tuæ benedictiónis huic hó$1tiæ propitiátus asp�res.
Descéndat de reg�li tu�
s�lio potestátis ángelus pacis et gr�tiæ, qui et
obláta sanctíficet et vota pópuli serenitátis tu�
n�tibus repræséntet.
Qu�sumus, ineff�bilis Trínitas Deus, ut hoc tibi
holocáustum ob honorific�ntiam tui sacerdótis s
oblátum, leg�timum eff�cias et accéptum.
Prof�ciat
ad fortitúdinem sanis, ad med�lam �gr�tis, ad
castitátem lasc�vis, ad obédiéntiam t�midis, ad
concórdiam odi�sis, ad perseverántiam iam pacútis,
ad sublev�men oppr�ssis, ad consolatiónem affl�cti, ad receptiónem
pátri� peregrínis, ad gubernatiónem eg�nis,
ad indulgéntiam reis, ad emendatiónem omn�modam
deprav�tis.
Ut quic�mque ex hac víctima spiritúli libav�rint, et cunctis bonis
ex�berent et malis ómnibus caruísse trip�dient.
R/. Amen.
|
Estos son, Señor, los sacrificios sacrosantos del
Nuevo Testamento, que ordenaste se te ofrecieran en
conmemoración de tu pasión.
éste es el verdadero sacrificio saludable, por el cual,
mientras reconcilias contigo al género humano, lo asocias al
reino de tu majestad.
Te rogamos por eso, omnipotente Dios nuestro, que te
muestres propicio a nuestra súplica y comuniques a esta
hostia la santificación de tus bendiciones.
Descienda del trono real de tu Majestad el ángel de la paz y
de la gracia, que santifique lo ofrecido y lleve los votos
del pueblo a tu divina presencia.Te rogamos, Dios,
inefable Trinidad, que este sacrificio que te ofrecemos para
gloria de tu sacerdote, lo hagas legítimo y aceptable.
Aproveche a los sanos para su fortaleza, para mejoría de los
enfermos, para castidad a los lascivos, para obediencia a
los infatuados, para concordia a los sembradores de odio,
para perseverancia a los que ya est�n pacificados, para
alivio a los oprimidos, para consuelo a los afligidos, para
que los peregrinos vuelvan a la patria, para sustento a los
necesitados, para perdón de los condenados por la justicia,
para total enmienda a los depravados.
De forma que quienes liben de esta víctima espiritual, sean
colmados de todos los bienes y salten de alegría al sentirse
libres de todo mal.
R/. Amén. |
Te præstánte, summe Deus,
qui in Trinitáte, unus Deus, glori�ris in sécula
sæculórum.
R/.
Amen. |
Concédenoslo, Dios
altísimo, glorioso en la Trinidad, por los siglos de los
siglos.
R/. Amén. |
Ad Orationem
Dominicam / Introducción al Padre
nuestro |
Nate Patris ingániti, Christe, qui ab arce sedis
�th�ri� t�lluris �nfima
petens, inter alima sacr� mónita iussiónis, quibus nostri sensus obtusi�nem
ex�cuis, precem étiam qua delict�rum véniam impetr�mus osténdis, réspice placítus
or�ta quæ docuísti, vota súscipe quæ mandísti, corda sanctífica quæ cre�sti.
Et, quia nemo mort�lium in hac flébili peregrinatióne sic durat, ut
cot�die non del�nquat, ita máseris nobis, per suffrágia patróni præséntis et
pietátis tuæ præsta grátiam fav�ris, ut ad te semper exaudi�mur e cœlis, quo
præcipi�nte i�giter proclam�mus e terris:
|
Cristo, Hijo del Padre Ing�nito, que desde tu
palacio etéreo bajas a lo más hondo de la tierra, y entre
los puros avisos de los santos mandatos, con los que afilas
el embotamiento de nuestros sentidos, nos enseñas también la
oración para pedir el perdón de nuestros delitos, mira
propicio a esta oración que nos enseñaste, acoge los deseos
que nos sugeriste, santifica los corazones que creaste.
Y como no hay mortal que mientras dure esta llorosa
peregrinación, no caiga cada día en el pecado, concédenos,
por la intervención de nuestro presente patrono, la gracia
de tu piedad y tu favor, y escucha desde el cielo lo que,
según tu mandato, te pedimos desde la tierra: |
Benedictio /
Bendición |
M�ritis elécti sui �mili�ni sanctíssimi, Christus Dóminus clamórem vestræ
pr�cis exáudiat, et sancta desideri�rum vota perféciat.
R/. Amen.
|
Por
los méritos de su elegido san Millán, Cristo el Señor, escuche
el clamor de vuestra súplica, haciendo que se cumplan las santas
aspiraciones de vuestros deseos.
R/. Amén. |
Tr�buat vobis Dóminus, e�dem
flagit�nte, quæ p�scitis, et propítius rem�veat quod tim�tis.
R/. Amen. |
Os conceda el Señor,
por sus instancias, todo lo que pedís, y aparte de vosotros todo
lo que tem�is.
R/. Amén. |
Ut qui in hac die fídei devotióne deprecat�ri Deum convenístis, culp�rum
n�xibus resol�tis, societátis eius præmio flore�tis.
R/. Amen. |
Para que los reunidos
en este día para orar con la devoción de vuestra fe, sueltos los
lazos del pecado, florezcáis con el premio de su compañía.
R/. Amén. |
Quod ipse præstáre dignátur,
cuius regnum et impérium sine fine p�rmanet in sécula sæculórum.
R/. Amen.
|
Que se digne
concederlo aquíl cuyo reino e imperio permanecen sin fin por los
siglos de los siglos.
R/.
Amén. |
Completuria
/ Oración
conclusiva |
Tuam, clementíssime
Pater, súpplices exorémus cleméntiam, ut
hodi�rna sollémnia quæ pro beatíssimi
confessóris tui Hier�nymi veneratióne
susc�pimus, ipse tibi comm�ndes. Et
sicut illi corínam sanctæ perfectiónis
tribuísti, ita nobis, eius intercessióne,
ómnium delict�rum véniam et indulgéntiam
largi�ris.
R/. Amen.
|
Invocamos tu clemencia, Padre
clementísimo, pidiéndote que recibas con agrado la
solemnidad que hoy hemos seguido en honor de tu santo
confesor Millán.
Y como a Él le concediste la corona de la santa
perfección, nos concedas a nosotros, por su intercesión, el
perdón y la indulgencia de todos nuestros delitos.
R/. Amén
|
Per misericórdiam tuam,
Deus noster qui es benedíctus et vivis et
ómnia regis in sécula sæculórum.
R/. Amen.
|
Por tu
misericordia, Dios nuestro, que eres bendito,
y vives y todo lo gobiernas, por los siglos
de los siglos.
R/. Amén. |
1. Las
partes variables de la misa que aquí se ofrecen (textos
eucológicos, cantos y lecturas) junto al Ordinario (Liber Offerentium
u Oferencio)
permiten componer la misa completa. Los textos latinos
son los oficiales y est�n tomados del Missale
Hispano-Mozarabicum II (pp. 633-642) y del Liber Commicus II.
(pp. 204-206). Los textos bíblicos en español est�n tomados de la
Sagrada Biblia, versión oficial de la Conferencia Episcopal
Española. BAC, Madrid 2011 y el resto de oraciones de la traducción
inédita del Tomo II del Misal Hispano-Mozárabe realizada por el Rvdo. P.
Balbino Gómez-Chacón y Díaz Alejo
(✝2006) y facilitada por uno de sus colaboradores para su difusión en
La Ermita en octubre de 2015.
(Se recuerda que hasta la fecha no existe misal oficial en español).
2. A san
Emiliano se le conoce comúnmente en España como san Millán (de la
Cogolla) por lo que en la traducción española se utilizan ambas
denominaciones.
3.
Rom 10,8b-13.
N. de La Ermita.
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