Rito Hispano-mozárabe

TEXTOS LITÚRGICOS

RITO HISPANO-MOZÁRABE

Textos propios de la Misa de la Invención de la Santa Cruz.

 

Misa en Rito Hispano-Mozárabe


 

Prælegendum / Canto de entrada Sal 95,10.1
D�cite in natiónebus, Allelúia, Dóminus regn�vit a ligno, Allelúia, et corr�xit orbem terræ, Allelúia, Allelúia. Decid a los pueblos, aleluya, el Señor rein� desde el madero, aleluya, y afianzó el orbe, aleluya, aleluya.
V/. Cantate Domino canticum novum, cantúte Dómino, omnis terra.
R/.
Dóminus regn�vit a ligno, Allelúia, et corr�xit orbem terræ, Allelúia, Allelúia.

V/. Glória et honor Patri et Fílio et Spirítui Sancto, in sæcula sæculórum. Amen.
R/.
Dóminus regn�vit a ligno, Allelúia, et corr�xit orbem terræ, Allelúia, Allelúia.

V/. Cantad al Señor un cántico nuevo, cantad al Señor, toda la tierra.
R/.
El Señor rein� desde el madero, aleluya, y afianzó el orbe, aleluya, aleluya.

V/. Gloria y honor al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, por los siglos de los siglos. Amén.
R/.
El Señor rein� desde el madero, aleluya, y afianzó el orbe, aleluya, aleluya.

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Oratio post Gloriam / Oración después del Gloria
Christe Dei Fílius, in cuius nómine per Crucis mystérium omne genu fl�ctitur; da nobis in Cruce tua copi�sius exsult�re.
Ut in eius victória et ill�si mare sæculi transe�mus, et ad te coron�ndi post nostrum tr�nsitum acced�mus.

R/.
Amen.

Oh Cristo, Hijo de Dios, haz que nos alegremos sobremanera en tu Cruz, ya que por el misterio que en ella se consum», toda rodilla se dobla a tu nombre.
Concédenos que por tu victoria atravesemos sin daño el mar de esta vida y cuando llegue nuestro tránsito, lleguemos hasta ti para ser coronados.
R/. Amén.

Per misericórdiam ipsíus Christi Dei nostri, qui cum Patre et Spíritu Sancto, unus Deus, vivit et regnat in sæcula sæculórum.
R/.
Amen.
Por la misericordia del mismo Cristo, Dios nuestro, que con el Padre y el Espíritu Santo, un solo Dios vive y reina por los siglos de los siglos.
R/. Amén.

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LITURGIA VERBI / LITURGIA DE LA PALABRA

Prophetia / Profecía Ap 21,10.9; 22,1-5 (2)
Léctio Apocal�psis Ioánnis Apóstoli
R/. Deo grátias.
Lectura del Apocalipsis del Apóstol san Juan.
R/. Demos gracias a Dios.
In diébus illis:

Ego Ioánnes, vidi ángelum, et s�stulit me in spíritu super montem magnum et altum et osténdit mihi civitætem sanctam. Et venit unus de septem ángelis et osténdit mihi fl�vium aquæ vitæ spl�ndidum tamquam cryst�llum, proced�ntem de throno Dei et Agni.

In médio plateæ eius et flúminis ex utr�que parte lignum vitæ áfferens fructus du�decim, per menses síngulos reddens fructum suum, et fília ligni ad sanitátem géntium. Et omne maledíctum non erit �mplius.

Et thronus Dei et Agni in illa erit; et servi eius s�rvient illi et vidébunt f�ciem eius, et nomen eius in fr�ntibus e�rum. Et nox ultra non erit, et non egent lúmine lucérnæ neque lúmine solis, quóniam Dóminus Deus illuminábit super illos, et regn�bunt in sæcula sæculórum.

R/. Amen.

En aquellos días:

Yo Juan, vi a un ángel y me llevó en espíritu a un monte grande y elevado, y me mostró la ciudad santa. Y vino uno de los siete ángeles y me mostró un río de agua de vida, reluciente como el cristal, que brotaba del trono de Dios y del Cordero .

En medio de su plaza, a un lado y otro del río, hay un árbol de vida que da doce frutos, uno cada mes. Y las hojas del árbol sirven para la curación de las naciones. Y no habrá maldición alguna.

Y el trono de Dios y del Cordero estar� en ella, y sus siervos le darán culto.Y verán su rostro, y su nombre está sobre sus frentes. Y ya no habrá más noche, y no tienen necesidad de luz de lámpara ni de luz de sol, porque el Señor Dios los iluminar� y reinar�. por los siglos de los siglos.

R/. Amén.

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Psallendum / Salmo de meditación Sal 95,10-11 (3)
D�minus regn�vit a ligno.
�tenim corr�xit orbem terræ, qui non commov�bitur.
El Señor rein� desde el madero.
Él afianzó el orbe, y no se moverá.
V/. L�tántur cœli et exsúltet terra.
R/. Qui non commov�bitur..
V/. Alégrese el cielo y goce la tierra.
R/.
Y no se moverá.

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Apostolus / Apóstol Fil 2,5-11
Epístola Pauli apóstoli ad Philip�nses.
R/.
Deo grátias.
Epístola del apóstol Pablo a los filipenses.
R/.
Demos gracias a Dios.
Fratres:

Hoc sent�te in vobis, quod et in Christo Iesu: qui cum in forma Dei esset, non rapénam arbitrátus est esse se æquálem Deo, sed semet�psum exinan�vit formam servi accípiens, in similitúdinem hóminum factus; et ha�bitu invéntus ut homo, humili�vit semet�psum factus obédiens usque ad mortem, mortem autem crucis.

Propter quod et Deus illum exalt�vit et don�vit illi nomen, quod est super omne nomen, ut in nómine Iesu omne genu flectátur cæléstium et terr�strium et infern�rum, et omnis l�ngua confite�tur: «Dóminus Iesus Christusæ in glóriam Dei Patris.

R/. Amen.

Hermanos:

Tened entre vosotros los sentimientos propios de Cristo Jesús. El cual, siendo de condición divina, no retuvo ávidamente el ser igual a Dios; al contrario, se despoj� de sí mismo tomando la condición de esclavo, hecho semejante a los hombres. Y así, reconocido como hombre por su presencia, se humill� a sí mismo, hecho obediente hasta la muerte, y una muerte de cruz.

Por eso Dios lo exalt� sobre todo y le concedió el Nombre-sobre-todo-nombre; de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra, en el abismo, y toda lengua proclame: «Jesucristo es Señor», para gloria de Dios Padre.

R/. Amén.

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Evangelium / Evangelio Jn 3,1-17 (4)
Léctio sancti Evangélii secóndum Ioánnem.
R/.
Glória tibi, Dómine.
Lectura del Santo Evangelio según san Juan.
R/.
Gloria a ti Señor.
In illo témpore:

Erat autem homo ex pharis�is, Nicod�mus nómine, princeps Iudærum; hic venit ad eum nocte et dixit ei: «Rabbi, scimus quia a Deo venísti magíster: nemo enim potest hæc signa f�cere, quæ tu facis, nisi fúerit Deus cum eo».

Respóndit Iesus et dixit ei: «Amen, amen dico tibi: Nisi quis natus fúerit désuper, non potest vidére regnum Dei�.

Dicit ad eum Nicod�mus: «Quómodo potest homo nasci, cum senex sit? Numquid potest in ventrem matris suæ iter�to intro�re et nasci?».

Respóndit Iesus: «Amen, amen dico tibi: Nisi quis natus fúerit ex aqua et Spíritu Sancto, non potest intro�re in regnum Dei. Quod natum est ex Spíritu, spíritus est. Non mir�ris quia dixi tibi: Op�rtet vos nasci d�nuo. Spíritus, ubi vult, spirat, et vocem eius audis, sed non scis unde véniat et quo vadat; sic est omnis, qui natus est ex Spírituæ.

Respóndit Nicod�mus et dixit ei: «Quómodo possunt hæc fúeri?».

Respóndit Iesus et dixit ei: «Tu es magíster Ísrael et hæc ignóras? Amen, amen dico tibi: Quod scimus, l�quimur et, quod vídimus, testámur; et testimónium nostrum non accípitis. Si terróna dixi vobis, et non créditis, quómodo, si dúxero vobis c�le�stia, cred�tis? Et nemo ascéndit in cœlum, nisi qui descéndit de cœlo, Fílius hóminis. Et sicut Móyses exalt�vit serpéntem in desérto, ita exaltári opórtet Fílium hóminis, ut omnis, qui credit, in ipso hábeat vitam ætérnam».

Sic enim dil�xit Deus mundum, ut Fílium suum unigénitum daret, ut omnis, qui credit in eum, non p�reat, et hábeat vitam ætérnam. Non enim misit Deus Fílium in mundum, ut iúdicet mundum, sed ut salv�tur mundus per ipsum.

R/. Amen. 

En aquel tiempo:

Había un fariseo llamado Nicodemo, jefe judío. Este fue a ver a Jesús de noche y le dijo: «Rab�, sabemos que has venido de parte de Dios, como maestro; porque nadie puede hacer los signos que tú haces si Dios no está con él�.

Jesús le contestó: «En verdad, en verdad te digo: el que no nazca de nuevo no puede ver el reino de Dios».

Nicodemo le pregunta: «¿Cómo puede nacer un hombre siendo viejo? «Acaso puede por segunda vez entrar en el vientre de su madre y nacer?».

Jesús le contestó: «En verdad, en verdad te digo: El que no nazca de agua y de Espíritu Santo no puede entrar en el reino de Dios. Lo que nace Espíritu es espíritu. No te extreñes de que te haya dicho: «Tenéis que nacer de nuevo». El viento sopla donde quiere y oyes su ruido, pero no sabes de dónde viene ni adánde va. Así es todo el que ha nacido del Espírituæ.

Nicodemo le preguntó: «¿Cómo puede suceder eso?».

Le contestó Jesús: «¿Tú eres maestro en Israel, y no lo entiendes? En verdad, en verdad te digo: Hablamos de lo que sabemos y damos testimonio de lo que hemos visto, pero no recibís nuestro testimonio. Si os hablo de las cosas terrenas y no me creáis, �cómo creer�is si os hablo de las cosas celestiales? Nadie ha subido al cielo sino el que bajá del cielo, el Hijo del hombre. Lo mismo que Moisés elev� la serpiente en el desierto, así tiene que ser elevado el Hijo del hombre, para que todo el que cree en Él tenga vida eterna.

Porque tanto am� Dios al mundo, que entregó a su Unigénito, para que todo el que cree en Él no perezca, sino que tenga vida eterna. Porque Dios no envió a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por Él.

R/. Amén. 

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Laudes Col 1,20 (5)
Allelúia. Aleluya.
V/. Tu es crux fidélis, in qua pepóndit salus nostra.
R/.
Allelúia.
V/. Tú eres la cruz fiel, en la que colgó nuestra salvación.
R/.
Aleluya.

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Sacrificium / Canto del Ofertorio Ap 1,8; 2,8; 5,11; 1,5; 7,10-11
Hæc dicit Dóminus qui erat, et qui est, et qui ventúrus est, omnípotens, primus et novíssimus, qui mórtuus est et resurréxit, et ecce vivens est.
Lavit nos supra lignum sánguine suo, ipsi glória in sæcula sæculórum Allelúia.
Esto dice el Señor, el que es, el que era y el que viene, el todopoderoso, el primero y el último, el que murió y ha vuelto a la vida.
El que nos ha lavado con su sangre sobre el madero, a Él la gloria por los siglos de los siglos, aleluya.
V/. Audávi voces angelórum mult�rum dic�ntium ante Agnum, qui est primogénitus mortuærum et princeps regum terræ: Salus Deo nostro sedánti supra thronum.
Et omnes ángeli in circúitu stabant, et senióres prostrav�runt se et adoravérunt eum sedántem super cœlos, clamántes voce magna.

R/.
Ipsi glória in sæcula sæculórum Allelúia.
V/. Escuch� la voz de muchos ángeles cantando ante el Cordero, que es el primogénito de entre los muertos y el príncipe de los reyes de la tierra: La victoria es de nuestro Dios, que está sentado en el trono.
Y todos los ángeles que estaban de pie alrededor y los ancianos se postraron y adoraron al que estaba sentado sobre los cielos, clamando a gran voz.
R/. A Él la gloria por los siglos de los siglos, aleluya.

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Oratio Admonitionis / Monición sacerdotal
Glori�mur in Cruce Dómini nostri Iesu Christi, fratres dilectíssimi, et tota mentis exsultatióne læt�mur, et huis di�i festivitætem cum grande reveréntia et spiritúli gáudio celebrámus.
In qua Cruce ipse Dóminus noster et Salvátor pro nostra salúte pepóndit et de diábolo triumph�vit.
In ist�us namque delécta suspénsa sunt, et manus illæ quæ vet�tum ori porexérunt cibum, clav�rum impressión. transf�x� sunt.

Per hanc ergo Crucem malí concupiscéntiæ appet�tum, quod dulc�bo árboris ill�xit, amaritúdo fellis coércuit; et gulæ desidérium, quod suávitas pomi dec�pit, ac�ti asp�ritas refren�vit.

Per han ígitur Crucem venénum, quod serpens protopl�stis homínibus propin�vit, medicaméntum quod de Christi l�tere manávit a fidélium pect�ribus expurg�vit.
Postr�mo, per hanc Crucem, hóminem, quem transgréssio præcépti de paradíso �xpulit, Conféssio nóminis Christi sine d�bio reformávit.

R/.
Amen.

Queridos hermanos, gloriémonos en la Cruz de nuestro Señor Jesucristo y con el corazón lleno de alegría, con toda reverencia y gozo espiritual, celebremos la solemnidad de este día.
Nuestro Señor y Salvador, para nuestra salvación estuvo colgado en la Cruz y en ella venció al diablo.
En la altitud de esta misma Cruz fueron suspendidos los delitos del primer hombre y las manos que ofrecieron a la boca la comida prohibida fueron atravesadas por la dureza de los clavos.

Por esta Cruz, el apetito de la concupiscencia desordenada, que suscit� la aparente dulzura del árbol, fue vencido con la amargura de la hiel y el deseo de la gula, al que engañó el atractivo del fruto, fue refrendado por la aspereza del vinagre.

Por esta Cruz, el veneno que la serpiente brind� a los primeros hombres, fue expurgado del pecho de los fieles por la medicina que brot� del costado de Cristo.
Finalmente, por esta Cruz, la confesión del nombre de Cristo, restauró sin duda al hombre expulsado del paraíso por haber desobedecido al precepto.
R/. Amén. 

Adiuv�nte Dómino nostro Iesu Christo, qui in Trinitáte, unus Deus, vivit et regnat in sæcula sæculórum.
R/.
Amen.
Con la ayuda de nuestro Señor Jesucristo, que vive y reina en la Trinidad santa, un solo Dios, por los siglos de los siglos.
R/. Amén.

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Alia / Oración entre los Dípticos
Dómine Iesu Christe, qui in patíbulo Crucis suspénsus, Patrem ex forma servi quam susc�peras, hi�sdem fuísti verbis deprecátus, et ut quid te derelóquerit, cum ab eo non rec�deres, acclam�sti; et ut in�quis ac sceler�tis persecut�ribus véniam trib�eret postul�sti; atque ut spíritum tuum in suis gloriósis tibi tant�mmodo c�gnitis susc�peret mánibus indic�sti.

Unde nos ex�gui fámuli tui tuærum sermónum trámitem sec�ti, tuam súpplices implorémus cleméntiam, ut quod tunc pro susce�pt� carnis humilitáte a Patre exp�tere videb�ris, nunc cum e�dem conn�xa semper divinitátis potestáte cons�stens præstáre dign�ris, ut Ecclésiam tuam cath�licam, quam pretióso sánguine redem�sti nunquam derel�nquas, nob�sque indígnis in e�dem concurr�ntibus, et Crucis tuæ sollémnia celebrántibus, ut críminum indulgéntiam conc�das prec�mur; atque ut ánimas nostras in conspéctu tuo semper susc�pias, custódias et benedícas, hum�llima prece dep�scimus.

Et qui latrónis tecum in Cruce pend�ntis confessión.m iustific�re dignátus es, ómnium recte in te credéntium fidem �ugeas, multíplices, et s�lita pietáte consérves.
R/.
Amen.

Señor Jesucristo, suspendido en el patíbulo de la Cruz en la condición de esclavo que asumiste, te dirigiste al Padre con las palabras apropiadas, y a pesar de que te sentías abandonado, lo aclamaste para no apartarte de él; le pediste que otorgara su perdón a sus inicuos y criminales perseguidores; y le pediste que aceptase tu espíritu en sus gloriosas manos que solamente tú conocías.

Por eso nosotros, tus pequeños siervos, que seguimos la senda indicada por tus palabras, humildemente imploramos tu clemencia. Lo que entonces te atrevías a pedir al Padre desde el abajamiento de la asumida condición humana, ahora, que junto con la misma disfrutas de la plenitud del poder divino, d�gnate conceder lo que te pedimos, que no abandones nunca a tu Iglesia Católica, a la que redimiste con tu sangre preciosa, que a nosotros, que hemos venido, aunque indignos, para celebrar la solemnidad de tu santa Cruz nos concedas el perdón de todos nuestros pecados. Con humilde plegaria te rogamos también que siempre en tu presencia nos recibas, custodies y bendigas.

Tu que te dignaste justificar la confesión del malhechor crucificado contigo, aumenta la fe de los que rectamente creen en ti, multipl�cala y consérvala con tu acostumbrado amor.
R/. Amén. 

Per misericórdiam tuam, Deus noster, in cuius conspéctu sanctórum Apostolórum et Mártyrum, Confessórum atque Vírginum nómina recitántur.
R/.
Amen.
Por tu misericordia, Dios nuestro, en cuya presencia recitamos los nombres de los santos Apóstoles y Mártires, Confesores y Vírgenes.
R/. Amén.

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Post Nomina / Oración después de los Dípticos
Deus, qui tam ineff�bilis quam in�stim�bilis esse cognosc�ris, concéde nobis unde te �stim�mus, quantum de te humána natúra s�fficit, et enarrárre poss�mus.

Asp�ra placítus votis et sacrifíciis ómnium, et qui in die Crucis et Passiónis tuæ sanctórum quiescéntium de sepúlcris córpora suscit�sti, non perm�ttas in inférno inferióri fidélium ánimas detin�ri, sed in tuærum r�quie elect�rum f�cias coll�t�ri.
R/.
Amen.

Oh Dios, que sabemos que no es posible expresar y apreciar cómo eres, concédenos que en la medida que nuestra naturaleza humana puede percibirlo, podamos estimarte y proclamarlo convenientemente.

Acepta con benevolencia las oraciones y los sacrificios de todos, y ya que en el día de tu Cruz y de tu Pasión hiciste salir los cuerpos de los santos del sepulcro en el que descansaban, no permitas que las almas de tus fieles queden detenidas en la profundidad del abismo, sino que les concedas alegrarse en el descanso de tus elegidos.
R/. Amén.

Quia tu es vita vivórum, sánitas infirmórum ac r�quies ómnium fidélium defunctórum in ætérna sæcula sæculórum.
R/.
Amen.
Porque tú eres la vida de los que viven, la salud de los enfermos, y el descanso de todos los fieles difuntos, por todos los siglos de los siglos.
R/. Amén.

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Ad Pacem / Oración de la Paz
Christe Dómine, Dei atque hóminum medi�tor, qui per sánguinem Crucis tuæ, cuncta quæ in cœlis et quæ in terris sunt, pacific�re dignátus es; hoc per troph�um passiónis tuæ tua p�etas �rigit, quod et in inítio tuæ secóndum carnem nativitætis ángelus nunti�vit, omn�sque cæléstis exércitus proclam�vit: Glória semper Deo in excélsis, et in terra pax homínibus bonæ voluntátis.

Hoc, et post triúmphum Crucis, tua placabílitas suis, et commend�vit discípulis, et don�vit, ut in ómnibus tui minístri appar�.ent, si perféctam pacis concórdiam ínvicem custod�rent.

Præsta ígitur, Dómine, ut hii qui vexíllum Crucis tuæ in fr�ntibus gestant, puram atque sinc�ram cum frátribus reténeant caritátem, et nos in ósculo sancto dign�ris reconcili�re.
R/.
Amen.

Señor Jesucristo, mediador entre Dios y los hombres, tú por la sangre de tu Cruz te dignaste pacificar a los hombres, los del cielo y los de la tierra. Tu piedad he erigido, como testimonio de tu pasión lo que al comienzo de tu nacimiento según la carne el ángel anunció y proclam� el ejército celestial: Gloria a Dios en el cielo para siempre y en la tierra paz a los hombres que ama el Señor.

Y así, después del triunfo de la Cruz, tu bondad recomend� y otorgó a tus discípulos que demostraran que son en realidad tus ministros si guardan entre sí la perfecta concordia de la paz.

Concede pues, Señor, a quienes llevan en su frente el signo de la Cruz, que mantengan con sus hermanos una auténtica y sincera caridad, y nos permitas vivir reconciliados con el beso santo.
R/. Amén.

Quia ipse est pax nostra et cáritas indisrúpta, qui vivit et ómnia regit in sæcula sæculórum.
R/. Amen.
Porque Él es nuestra paz verdadera, caridad indivisible; que vive y todo lo gobierna por los siglos de los siglos.
R/.
Amén.

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Illatio / Acción de gracias
Dignum et iustum est, �quum vere et salutáre est nos tibi grátias ágere Dómine sancte Pater, ætérne omnípotens Deus, tibi sacrifici�rum vota persólvere, te in laudis præc�nio indesin�nter att�llere, et in conspéctu admir�nd� cleméntiæ tuæ præterit�rum témporum acta rec�lere, ac de utriúsque Ad�, illíus sc�licet habitat�ris paradísi, et ist�us redempt�ris humáni géneris exémpla prop�nere.

Ille quidem prior, iste mélior.
Ille terrónus, iste cæléstis.
Ille de limo fictus, iste de verbo conc�ptus.

Tunc diábolo suadánte, Eva dec�pitur; nunc ángelo nuntiónee, María clarific�tur.
Tunc per inv�diam serpéntis, homo qui creátus fúerat perúmitur, nunc per misericórdiam redim�ntis homo qui peri�rat liberátur.

Ille per transgressión.m legis paradísum �misit, iste per passión.m Crucis mundum acquis�vit.
Ille per interdúct� árboris gustum mortem inc�rrit, iste per gloriós� Crucis triúmphum mortem d�vicit.
Ille post adm�ssum peccátum sub árbore abscónditur, iste propter deléctum nostrum in Cruce lev�tur.

Tunc post vet�t� árboris contagión.m sol merídie fr�guit; nunc in sanctæ Crucis manifestatióne, médio die sol �ccidit.
Tunc homo mandítum non custodiándo, de paradíso péllitur; nunc latro Christum confit�ndo, in paradíso introd�citur.

Unde rogámus et súpplices quæsumus, clementíssime Pater, per ínclitæ Crucis inenarrárbile sacraméntum, et per Dómini nostri Iesu Christi Fílii tui admir�bile regnum, ut hodi�rnum diem, in quo Crucis eius festivitætem celebrámus, nos cum lætítia spiritúli et modésta exsultatióne perúgere conc�das, et inter cæléstium virtútum laudes humilitátis nostræ voces susc�pias, súpplici confessión. dicéntes:

Es digno y justo, es necesario y saludable darte gracias, Señor, Padre santo, Dios eterno y todopoderoso, cumplir con nuestro deber de ofrecerte sacrificios y elevar sin cesar nuestras voces de alabanza; para recordar, ante tu admirable clemencia lo acaecido en tiempos pasados, y de modo especial proponer el ejemplo de los dos Adanes, el que habitá en el paraíso y el que es el redentor del género humano.

Aquel fue el primero, pero éste es mejor.
Aquel fue terreno, éste celeste.
Aquel hecho de barro, éste concebido por la palabra.

Entonces, por instigación del diablo, Eva fue engañada; ahora, por el anuncio del ángel, María es glorificada. Entonces, por envidia de la serpiente, el hombre, que había sido creado, pereci�; ahora, por misericordia del redentor, el hombre que había perecido es liberado.

Aquel, por haber trasgredido la ley, perdió el paraíso, éste, por la pasión de la Cruz, ha adquirido el mundo.
Aquel sucumbió a la muerte por comer del árbol prohibido, éste, por el triunfo de la Cruz gloriosa, venció a la muerte.
Aquel, al reconocer su pecado, se escondió bajo un árbol, éste, a causa de nuestros pecados, fue elevado en la Cruz.

Entonces por la falta de comer del árbol prohibido, se enfrió el sol al mediodía; ahora, en la manifestación de la santa Cruz, al medio día, se esconde el sol.
Entonces, el hombre que no guardaba el precepto, fue expulsado del paraíso; ahora, el malhechor que confiesa a Cristo como Señor, es introducido en el paraíso.

Por esto, humildemente te rogamos y suplicamos, Padre clementísimo, que por el signo admirable de la «nclita Cruz y por el admirable reino de nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, nos permitas celebrar con espiritual alegría y equilibrado gozo este día, en que conmemoramos la festividad de su Cruz, y, junto con las alabanzas de los coros celestiales, admitas la pequeñez de nuestras voces, mientras repetimos humildemente:

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Post Sanctus / Oración después del Sanctus
Vere sanctus, et benedíctus Dóminus noster Iesus Christus Fílius tuus, qui se pro peccátis nostris crucifig�ndum impiórum mánibus trádidit.

Qui próprias manus in Cruce pro nobis �xtulit.
Qui principátus et adversáris potestátes per Crucis mystérium abdic�vit, ac totíus humáni géneris delécta in ipsa Cruce transf�gens, tibi se immaculátam hóstiam ábtulit, et a nobis ex�guis servis, pro sui commemoratióne indesin�nter off�rri præc�pit.

Christus Dóminus ac Redémptor ætérnus.

Santo y bendito es en verdad nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que por nuestros pecados se entregó en manos de los impíos para ser crucificado.

Él por nosotros extendió sus propias manos en la Cruz.
Él, por el misterio de la Cruz, rechazó a los principados y autoridades contrarias, y clavando en la misma Cruz los pecados de todo el género humano, se ofreció a ti como víctima inmaculada y a nosotros, sus humildes siervos, nos mandí que en su memoria le ofreciéramos sin cesar.

Cristo Señor y Redentor eterno.

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Post Pridie / Invocación
Memínimus quidem, omnípotens Pater, et fidéli mente retin�mus Dómini nostri Iesu Christi Fílii tui, tráditum nobis nativitætis eius innenarrárbile sacraméntum, præcl�rum dev�cta per Crucem morte triúmphum, atque gloriósum ad cœlos post Crucis passión.m asc�nsum.

Crédimus étiam imménsum et incomprehens�bile consempitérnum tecum eius et consubstanti�le princípium.
Ipsum quoque ventúrum confit�mur iúdicem mortuærum atque viv�ntium.

Unde quæsumus, tremónde clementíssime Pater, ut hanc hóstiam, in similitúdinem córporis et sánguinis eius tibi oblátam, per signum Crucis sanctífices, et benedícas, in signo Crucis susc�pias et ass�mas, nob�sque fámulis tuis ei�sdem Crucis vexíllo pr�notátis placítus distr�buas, benígnus imp�rcias.
R/.
Amen.

Recordamos, Padre todopoderoso, y mantenemos con toda fidelidad lo que recibimos: el inefable misterio de la natividad de nuestro Señor Jesucristo tu Hijo, el admirable triunfo obtenido en la Cruz destruyendo a la muerte y la gloriosa ascensión a los cielos después de su pasión en la Cruz.

Creemos también en el inmenso, inefable, coeterno y consustancial origen de ti y de tu Hijo, al que confesamos igualmente como el que ha de venir como juez de vivos y muertos.

Por eso te pedimos, tremendo y clementísimo Padre, que santifiques y bendigas, por el signo de la Cruz, esta víctima que te ofrecemos como cuerpo y sangre de tu Hijo. Rec�bela y ac�ptala en el signo de la Cruz, distribóyela benévolo y concédela benigno a nosotros, tus siervos, que hemos sido signados con el signo de la Cruz.
R/. Amén.

Te præstánte, sancte Dómine, quia tu hæc ómnia nobis indígnis servis tuis valde bona creas, sanctíficas, vivíficas, ac præstas nobis, ut sint benedícta a te Deo nostro in sæcula sæculórum.
R/.
Amen.
Concédelo, Señor santo, pues creas todas estas cosas para nosotros, indignos siervos tuyos, y las haces tan buenas, las santificas, las llenas de vida, las bendices y nos las das, así bendecidas por ti, Dios nuestro por los siglos de los siglos.
R/. Amén.

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Ad Orationem Dominicam / Introducción al Padre nuestro
Grátias tibi égimus, omnípotens ætérne Deus, et Dómino nostro Iesu Christo Fílio tuo, qui nos per sánguinem Crucis suæ redímit, qui pro delict�rum nostrærum indulgéntia ad te de Cruce clam�vit, qui discípulos suos, ántequam ad Crucis passión.m veníret, sic d�cuit oráre et dócere: Te damos gracias a ti, Dios eterno y todopoderoso, y a tu Hijo nuestro Señor Jesucristo, que nos redimió por la sangre de su Cruz y desde la Cruz te pidió perdón por todos nuestros pecados y que antes de padecer la Cruz enseñó a sus discípulos a orar y a decir:

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Benedictio / Bendición
Christus Dóminus, qui ext�nsis mánibus pepóndit in ligno, omni vos puréficet a delécto.
R/.
Amen.
Cristo Señor, que con las manos extendidas estuvo en la Cruz os purifique de todo pecado.
R/. Amén.
Reple�tque vos vino prud�ntiæ, qui ac�ti p�culum eb�bit app�nsus in Cruce.
R/.
Amen.
Que os colme del vino de la prudencia, aquel que colgado de la Cruz hubo de probar la bebida de vinagre.
R/.
Amén.
Ut per Crucem Crucif�xi sollemnitátem sanctæ Crucis celebrántes, et nunc et in ætérnum salvi esse poss�tis.
R/.
Amen.
Que por la Cruz del crucificado cuantos celebran la solemnidad de la santa Cruz puedan ser salvados ahora y siempre.
R/.
Amén.
Per Dóminum nostrum Iesum Christum, qui in Trinitáte, unus Deus, vivit et regnat in sæcula sæculórum.
R/.
Amen.
Por nuestro Señor Jesucristo que en la Trinidad es el único Dios y vive y reina por los siglos de los siglos.
R/. Amén.

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Completuria / Oración conclusiva
Christe Iesu, qui mortalitátis nostræ forma susc�pta, mortis nostræ et Crucis voluísti sustin�re ini�riam, da nobis, ut Crucis tuæ mun�mine circums�pti, devinc�mus omnes l�queos inimíci.
R/.
Amen.
Cristo Jesús, que asumiste la forma de nuestra mortalidad y quisiste soportar la injuria de nuestra muerte y de la Cruz, conoc�denos, que protegidos por la fuerza de tu Cruz, podamos vencer los ardides del enemigo
R/. Amén.
Ipso præstánte, qui vivit cum Deo Patre et Spíritu Sancto in sæcula sæculórum.
R/.
Amen.
Que lo conceda aquel que vive con el Padre y el Espíritu Santo por los siglos de los siglos.
R/.
Amén.

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1. Las partes variables de la misa que aquí se ofrecen (textos eucológicos, cantos y lecturas) junto al Ordinario (Liber Offerentium u Oferencio) permiten componer la misa completa. Los textos latinos son los oficiales y están tomados del Missale Hispano-Mozarabicum II (pp. 339-346) y del Liber Commicus II (pp. 116-118). Los textos bíblicos en español están tomados de la Sagrada Biblia, versión oficial de la Conferencia Episcopal Española. BAC, Madrid 2011. Las oraciones en español se toman de la Misa de la Santa Cruz celebrada en la Catedral de Toledo en 2010, con motivo del Congreso Eucarítico.

(Se recuerda que hasta la fecha no existe misal oficial en español).

2. Ap 21,10a.9a; 22,1-5. N. de La Ermita.

3. Sal 95,10a.11a. N. de La Ermita.

4. Jn 3,1-5.6b-17. N. de La Ermita.

5. No se corresponde. N. de La Ermita.

 

 

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