Misa en
Rito Hispano-Mozárabe
Feria II in quarta
hebdomada Quadragesimæ
Lunes de la cuarta semana de Cuaresma (1)
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LITURGIA VERBI
/ LITURGIA DE LA PALABRA
Lectio Sapientialis
/ Lectura sapiencial |
Eclo 4,1-11 |
Léctio libri Ecclesiástici.
R/. Deo
grátias. |
Lectura del libro del
Eclesiástico.
R/. Demos
gracias a Dios. |
Fili:
Eleem�synam páuperis ne defr´udes
et óculos tuos ne transv�rtas a páupere.
ánimam esurión.em ne contrist�veris
et non exásperes páuperem in inópia sua.
Cor ínopis ne affl�xeris
et non pr�trahas datum angustiónei.
Rogatiónem contribuláti ne ab�cias
et non avértas f�ciem tuam ab eg�no.
Ab �nope ne avértas óculos tuos propter iram
et non des ei locum tibi retro maledic�ndi;
maledicántis enim tibi in amaritúdine ánimæ,
exaudi�tur prec�tio illíus:
exáudiet autem eum, qui fecit illum.
Congregatióne aff�bilem te f�cito
et presbítero hum�lia ánimam tuam
et magn�to hum�lia caput tuum.
Decl�na páuperi sine trist�tia aurem tuam
et redde débitum tuum
et respónde illi pacífica in mansuetúdine.
Líbera eum, qui ini�riam p�titur, de manu opprim�ntis eum
et non �cide feras in ánima tua in iudic´ndo.
Esto pup�llis miséricors ut pater
et pro viro matri illórum;
et eris velut fílius Altíssimi obédiens,
et miser�bitur tui magis quam mater.
R/.
Amen. |
Hijo: No quites al pobre su
subsistencia,
no tengas esperando los ojos implorantes.
No entristezcas al hambriento,
no exasperes a nadie en su necesidad.
No irrites al corazón exasperado,
no retardes tu don al menesteroso.
No rechaces al suplicante atribulado,
no apartes tu rostro del pobre.
No retires tus ojos del necesitado,
y no des a nadie motivo para que te maldiga.
Pues si te maldice en la amargura de su alma,
su hacedor escuchar� su oración.
Hazte amar de la comunidad,
y ante el jefe baja la cabeza.
Inclina tu oído al pobre,
y responde a su saludo afablemente.
Arranca al oprimido de mano del opresor,
no te acobardes al hacer justicia.
Sé para los huérfanos un padre
y un marido para su madre;
serás como hijo del Altísimo,
que te amar� más que tu propia madre.
R/.
Amén. |
Lectio Historica
/ Lectura histórica |
1Sam 3,1-19 |
Léctio libri primi
Samu�lis.
R/. Deo
grátias. |
Lectura del primer libro de
Samuel.
R/. Demos
gracias a Dios. |
In diébus illis:
Puer autem S�muel ministr´bat Dómino
coram Heli. Et sermo Dómini erat pretiósus in diébus illis:
non erat v�sio frequens. Factum est ergo in die quadam, Heli
iac�bat in loco suo, et óculi eius calig�verant, nec páterat
vidére. Luc�rna Dei nondum exst�ncta erat, et S�muel
dormi�bat in templo Dómini, ubi erat arca Dei.
Et vocávit Dóminus S�muel, qui
respóndens ait: �Ecce ego». Et
cucúrrit ad Heli et dixit: «Ecce ego; vocásti enim me». Qui
dixit: «Non vocávi. Revértere; dormi�. Et �biit et dormávit.
Et Dóminus rursum vocávit S�muel.
Consurg�nsque S�muel �biit ad Heli et dixit: «Ecce ego, quia
vocásti me». Qui respóndit: «Non vocávi te, fili mi.
Revértere et dormi�. Porro S�muel necdum sci�bat Dóminum,
neque revelátus fúerat ei sermo Dómini.
Et Dóminus rursum vocávit S�muel
tértio, qui consírgens �biit ad Heli et ait: «Ecce ego, quia
vocásti me». Intell�xit ígitur Heli quia Dóminus vocáret
púerum, et ait ad S�muel: «Vade et dormi; et, si deánceps
vocáverit te, dices: «L�quere, Dómine , quia audit servus
tuus��. �biit ergo S�muel et dormávit in loco suo.
Et venit Dóminus et stetit et vocávit,
sicut vocáverat prius: «S�muel, S�muel�. Et ait S�muel:
�L�quere, quia audit servus tuus».
Et dixit Dóminus ad S�muel: «Ecce ego
f�cio verbum in Ísrael, quod quic�mque aud�erit, t�nnient
amb� aures eius. In die illo suscit�bo advérsum Heli ómnia,
quæ locútus sum super domum eius: inc�piam et compl�bo.
Pr�d�xi enim ei quod iudicat�rus essem domum eius in ætérnum
propter iniquitátem, eo quod n�verat fílios suos cont�mnere
Deum et non corr�puit eos. Idc�rco iurávi dómui Heli quod
non expi�tur in�quitas domus eius víctimis et munéribus
usque in ætérnum».
Dormávit autem S�muel usque mane
aperu�tque �stia domus Dómini. Et S�muel tim�bat indic�re
visión.m Heli. Voc�vit ergo Heli Samu�lem et dixit: �S�muel,
fili mi�. Qui respóndens ait: «Præsto sum».
Et interrog�vit eum: «Quis est sermo,
quem locútus est ad te? Oro te, ne cel�veris me. Hæc f�ciat
tibi Deus et hæc addat, si absc�nderis a me sermónem ex
ómnibus verbis, quæ dicta sunt tibi�.
Indic�vit ítaque ei S�muel univérsos
sermónes et non abscóndit ab eo. Et ille respóndit: «Dóminus
est. Quod bonum est in óculis suis, f�ciat�.
Crevit autem S�muel, et Dóminus erat
cum eo, et non cœcidit ex ómnibus verbis eius in terram.
R/.
Amen.
|
En aquellos días:
El joven Samuel estaba al servicio del Señor con Elí. En
aquel tiempo era raro oír la palabra de Dios, y las visiones
no eran frecuentes. Un día Elí permanecía acostado en su
habitación. Sus ojos se habían debilitado y ya no podía ver.
La lámpara de Dios todavía no estaba apagada, y Samuel
dormía en el templo del Señor, donde estaba el arca de Dios.
El Señor lo llamó: ««Samuel, Samuel!». Él respondió:
«Aquí estoy�. Fue corriendo donde estaba Elí y le dijo:
«Aquí estoy, pues me has llamado». Elí dijo: «No te he
llamado; vuelve a dormir�. Y Samuel fue a acostarse.
Por segunda vez lo llam� el Señor: ««Samuel!». Y Samuel
se levant�, fue adonde estaba Elí y le dijo: «Aquí estoy,
pues me has llamado». Elí respondió: «No te he llamado;
vuelve a acostarte, hijo mío». Samuel no conocía todavía al
Señor, pues la palabra del Señor todavía no se le había
revelado.
Por tercera vez lo llam� el Señor: ««Samuel!». Se
levant�, fue adonde estaba Elí y le dijo: «Aquí estoy, pues
me has llamado». Comprendió entonces Elí que era el Señor el
que lo llamaba, y le dijo: «Vete a acostarte, y si te
llaman, dir�s: Habla, Señor, que tu siervo escucha». Y
Samuel fue a acostarse.
El Señor se presentó y lo llam� como otras veces:
«¡Samuel, Samuel!». Samuel respondió: «Habla, que tu siervo
escucha».
El Señor le dijo: «Voy a hacer en Israel una cosa tal que
al que la oiga le zumbar�. los oídos. Aquel día har� venir
sobre Elí todo lo que he dicho contra su casa, desde el
principio hasta el fin. Dile que yo condeno a su casa para
siempre, porque Él sabía que sus hijos maldecían a Dios y no
los corrigió. Por eso juro a la casa de Elí que nunca podrá
borrarse con sacrificios y ofrendas la culpa de la casa de
Elíæ.
Samuel siguió acostado hasta la mañana, y entonces abrió
las puertas del templo del Señor. Samuel tenía miedo de
contar a Elí la visión que había tenido. Pero Elí le llam�,
y le dijo: ««Samuel, hijo mío!». Él respondió: «Aquí estoy�.
Y le preguntó: «¿qué es lo que te ha dicho? «No me
ocultes nada! Que Dios te castigue si me ocultas una palabra
de lo que Él te ha dicho».
Entonces Samuel se lo cont� todo; no le ocult� nada. Elí
dijo: «�l es el Señor; h�gase su voluntad�.
Samuel creci�, y el Señor estaba con él; no dej� de
cumplirse ni una sola de sus palabras.
R/.
Amén. |
Psallendum
/ Salmo de meditación |
Sal 37,16-17a.18 |
In
te sper�vi, Dómine. Tu exáudies, Dómine, Deus meus, quóniam
dixi: nequ�ndo gáudeant de me inimíci mei. |
Tú eres, Señor, en
quien espero, tú me responder�s, Señor, Dios mío; me digo: que
no se rían de mí mis enemigos. |
V/.
Ego ad flag�lla parátus sum, et dolor meus contra me est semper.
R/. Nequ�ndo gáudeant de
me inimíci mei. |
V/. Ya
estoy a punto de caer, el dolor no me deja ni un momento.
R/. Que no se rían de mí
mis enemigos. |
Apostolus
/ Apóstol |
2Pe 1,1-11 |
Princípium Epístol� Petri apóstoli
secónda.
R/. Deo
grátias. |
Inicio de la segunda Epístola del apóstol
Pedro.
R/. Demos gracias a
Dios. |
Simon Petrus servus et
apóstolus Iesu Christi his, qui co�qu�lem nobis sort�ti sunt
fidem in iustítia Dei nostri et salvatóris Iesu Christi: grátia
vobis et pax multiplicátur in cognitióne Dei et Iesu Dómini
nostri. Quómodo ómnia nobis divínæ virtátis suæ ad
vitam et pietátem don�tæ per cognitiónem eius, qui vocávit nos
própria glória et virtúte, per quæ pretiósa et máxima nobis
prom�ssa don�ta sunt, ut per hæc effici�mini divínæ consórtes
natúræ, fugión.es eam, quæ in mundo est in concupiscéntia,
corruptiónem. Et propter hoc ipsum curam omnem
subinferéntes ministr´te in fide vestra virtútem, in virtúte
autem sción.iam, in sción.ia autem contin�ntiam, in contin�ntia
autem patióneiam, in patióneia autem pietátem, in pietáte autem
amórem fraternitátis, in amóre autem fraternitátis caritátem.
Hæc enim vobis, cum adsint et ab�ndent, non vácuos nec
sine fructu vos const�tuunt in Dómini nostri Iesu Christi
cognitiónem; cui enim non præsto sunt hæc, cœcus est et nihil
procul cernens, oblivión.m accípiens purgatiónis váterum suórum
delict�rum. Quapr�pter, fratres, magis sat�gite, ut firmam
vestram vocatiónem et electiónem faci�tis. Hæc enim fación.es
non offend�tis aliquándo; sic enim abund�nter ministr´bitur
vobis intr�itus in ætérnum regnum Dómini nostri et salvatóris
Iesu Christi. R/. Amen. |
Sim�n Pedro, siervo y apóstol de
Jesucristo, a los que han alcanzado una fe no menos preciosa que
la nuestra mediante la justicia de nuestro Dios y Salvador
Jesucristo: La gracia y la paz abunde en vosotros mediante el
conocimiento de Dios y Jesús, nuestro Señor. El poder divino
nos ha otorgado todo lo necesario para la vida y la piedad,
dándonos a conocer al que nos ha llamado por su propia gloria y
su grandeza. Por ellos hemos entrado en posesión de las más
ricas y preciosas promesas para hacernos así partícipes de la
naturaleza divina, una vez que hayamos escapado de la corrupción
que hay en el mundo por causa de las pasiones.
Por eso debóis esforzaros en añadir a vuestra fe virtud, a la
virtud ciencia, a la ciencia templanza, a la templanza
paciencia, a la paciencia piedad, a la piedad cariño fraterno,
al cariño fraterno amor.
Pues si estas virtudes se encuentran en vosotros y van en
aumento, no permanecer�is ociosos y estáriles en el conocimiento
de nuestro Señor Jesucristo. Al contrario, el que carece de
ellas es ciego y miope, que se ha olvidado de purificar sus
antiguos pecados. Por consiguiente, hermanos, esforzaos más y
más por asegurar vuestra vocación y elección. de esta manera no
tropezaréis jamás y se os abrirán de par en par las puertas del
reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.
R/.
Amén. |
Evangelium
/ Evangelio |
Jn 6,53.58-63a |
Léctio sancti Evangélii
secóndum Ioánnem.
R/. Glória tibi
Dómine. |
Lectura del santo Evangelio según
san Juan.
R/. Gloria a ti,
Señor. |
In illo témpore:
Dóminus noster Iesus Christus dixit eis: «Hic est
panis, qui de cœlo descéndit, non sicut manducav�runt patres et
mórtui sunt; qui mandícat hunc panem, vivet in ætérnum�.
Hæc dixit in synagóga docens in
Caphárnaum. Multi ergo audión.es ex discípulis eius dixérunt:
«Durus est hic sermo. Quis potest eum aud�re?».
Sciens autem Iesus apud semet�psum quia
murmur�rent de hoc discípuli eius, dixit eis: «Hoc vos
scandal�zat? Si ergo vidéritis Fílium hominis ascend�ntem, ubi
erat prius? Spíritus est, qui vivíficat, caro non prodest
quidquam�. R/. Amen. |
En
aquel tiempo: Nuestro Señor Jesucristo les dijo: «�ste es el
pan que ha bajado del cielo; no como el que comieron los padres,
y murieron. El que come este pan vivir� eternamente».
Dijo todo esto enseñando en la sinagoga de Cafarna�n. Muchos
de sus discípulos, al oírlo, dijeron: «Esto que dice es
inadmisible. ¿Quén puede admitirlo?».
Jesús, conociendo que sus discípulos hacían esas críticas,
les dijo: «¿Esto os escandaliza? «Pues si vierais al hijo del
hombre subir adonde estaba antes! El espíritu es el que da vida.
La carne no sirve para nada».
R/.
Amén. |
Laudes |
Sal 135,1-2a |
Confit�mini
Dómino quóniam bonus, quóniam in sæculum misericórdia eius. |
Dad
gracias al Señor, porque es bueno, porque es eterna su
misericordia. |
V/. Confit�mini Deo de�rum.
R/. Quóniam in sæculum
misericórdia eius. |
V/.
Dad gracias al Dios de los dioses.
R/. Porque es eterna su
misericordia. |
Sacrificium
/ Canto del Ofertorio |
1Crón 29,17b-18a |
In
simplicitáte cordis mei, Dómine, látus �fferam sacrifícium tibi. |
Con rectitud de
corazón, Señor, gozoso he hecho yo mis ofrendas. |
V/.
Dómine, Deus meus, custódi pópulum istum cum ingánti gáudio,
et ego látus.
R/. �fferam
sacrifícium tibi.V/.
Ascéndit sacérdos in montem Dómini, et exp�ndens manus suas,
et dixit: Deus Ábraham, rex cœli.
R/. Látus �fferam
sacrifícium tibi. |
V/. Señor, Dios
mío, conserva a este pueblo con gran alegría y me gozarán
R/. He hecho yo mis ofrendas.V/.
Ascendió el sacerdote al monte del Señor y extendiendo sus manos
dijo: Oh Dios de Abraham, rey del cielo.
R/. Gozoso he hecho yo mis
ofrendas. |
Oratio Admonitionis / Monición
sacerdotal |
Humilitátis, salutáris
abstinéntia pro immort�li salúte, corpóribus, et obláto pro
ætérna animárum satiet�te ie�nio, Dómino Deo nostro, fratres
caríssimi, supplic�mus: ut ieión.um hoc contr�ti cordis et
castific�ti córporis eff�ciens, velut pingues hóstias et
plácitum suavíssimi incónsi munus accípiat; apposit�que
angélicæ protectiónis custódia, ánimas nostras ab omni
viti�rum impugnatióne deféndat. Non nos ad
ingl�viem l�rgior mensa, non ad ebrietátem p�cula dulci�ra
soll�citent; non in libídinem bl�ndior vultus ed�cat
aspéctus; non in cupiditátem semper egens plus habóndi ardor
�nstiget; non irac�ndiam inimíci consílio furos acc�ndat;
non in supérbia ruit�rus �ltius tumor att�llat; non de
alión. felicitáte �nfelix urat inv�dia. Sed exp�lsa
proturbat�que viti�rum dominóntium turba, dignum Deo
habitáculum, ipso in nobis operénte quæ sua sunt, mundi
cordis et impoll�ti córporis præpará.ur.
R/. Amen.
|
Sometidos los cuerpos por la
saludable abstinencia para la salvación indefectible y
ofrecido el ayuno en orden a la plenitud eterna de las
almas, supliquemos, hermanos queridos, al Señor Dios nuestro
que, transformando a éste en ayuno de un corazón contrito y
de un cuerpo castificado, lo acepte como hostia ping¨e y don
placentero de suavísimo incienso; y asignándoles custodia y
protección angélica, defienda nuestras almas del acoso de
los vicios. Que una mesa bien abastecida no tiente la
glotonería, ni tampoco los sabrosos caldos para la
embriaguez; no nos lleve a la impureza la sensual
contemplación de un rostro, ni el insaciable afán de poseer
siempre más nos arrastre a la avaricia; que el furor no
inflame nuestra ira bajo el soplo del Enemigo, ni la
hinchazón nos impulse hacia lo alto para venir a caer en
soberbia, o la envidia desdichada nos requeme con ocasión de
la ajena dicha.
Sino más bien, expulsada y desterrada la algarabía de
vicios dominantes, nos preparemos para ser una digna morada
de Dios de corazón puro y cuerpo inmaculado, obrando Él
mismo en nosotros lo que es propio suyo.
R/.
Amén. |
Auxilión.e Dómino nostro
Iesu Christo, cuius arma victr�cia p�rmanent per numquam
finíta sæcula sæculórum.
R/. Amen.
|
Con la ayuda de nuestro Señor Jesucristo,
cuyas armas vencedoras permanecen por los sin nunca término
siglos de los siglos.
R/.
Amén. |
Alia / Oración entre los
Dípticos |
Tibi, Dómine, Deus noster,
totis visc�ribus supplic�mus, ut ieión.a nostra velut
p�nguia holocáusta susc�pias, peccáta dim�ttas, cogitatiónis
quibus delect�ris insp�res, actus regas, erráres c�rrigas,
consción.ias mundes, corda sanctífices, subdens et spirítui
carnem, et spíritum tibi. Ut offícium suum caro
humili�ta cogn�scens, subripión.ia incent�va rep�diet, et
victor spíritus viti�rum, tibi Dómino ac Deo suo, r�ddita
libert�te des�rvial.
R/. Amen.
|
A ti, Señor,
Dios nuestro, pedimos de todo corazón que recibas nuestros
ayunos como ping¨e holocausto, perdones los pecados, nos
inspires propósitos en que te deleites, gobiernes las
acciones, corrijas los errores, limpies las conciencias,
santifiques las almas sometiendo la carne al espíritu y el
espíritu a ti.
Para que, humillada la carne y reconociendo su función,
rechace los estámulos que se insinían blandamente y el
espíritu, vencedor sobre los vicios, ya recobrada la
libertad, te sirva a ti, su Señor y Dios.
R/. Amén. |
Per misericórdiam tuam, Deus
noster, in cuius conspéctu sanctórum apostolórum et
mártyrum, confessórum atque vírginum nómina recitántur.
R/. Amen.
|
Por tu misericordia, Dios nuestro,
en cuya presencia recitamos los nombres de los santos
Apóstoles y Mártires, Confesores y Vírgenes.
R/. Amén. |
Post Nomina / Oración
después de los Dípticos |
Qu�sumus, Dómine Deus, ut
sicut pr�fuit nobis te cognovísse per grátiam fídei, ita
prosit te postulísse per aflictiónem spiritúlis ie�nii.
Ac sicut per illam iub�mur sper�re ætérna, ita per istam
promere�mur apud te, tam vivis quam defúnctis, impetr�re
remédia postul�ta.
R/. Amen.
|
Te rogamos,
Señor Dios, que, como nos result� provechoso conocerte por
el don de la fe, nos aproveche también ahora la oración
impregnada de penitencia, de este tiempo cuaresmal. Y pues
la fe nos manda esperar los bienes eternos, logremos
alcanzar de ti, por la penitencia, los remedios deseados
para vivos y difuntos.
R/. Amén. |
Quia tu es vita vivórum,
sánitas infirmórum ac r�quies ómnium fidélium defunctórum in
ætérna sæcula sæculórum.
R/. Amen.
|
Porque tú eres la vida de los que viven, la
salud de los enfermos, y el descanso de todos los fieles
difuntos por todos los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Ad Pacem / Oración
de la Paz |
Dono pacis
ac tuæ dilectiónis rogámus, Deus, ut ieiun�ntium corda
præm�nias, et huius oblatiónis nostræ lib�mine benedícas.
Gratuæta quoque nos sanctificatióne perléstrans, et
vot�v� abstinéntiæ hanc súscipe hóstiam, et corda nostra tuæ
semper caritátis ubert�te mult�plica.
R/. Amen.
|
Te rogamos, Dios nuestro,
que dotes de antemano los corazones de los que ayunan con el
don de tu luz y de tu amor, bendiciéndoles con la
participación en este sacramento. Acepta esta ofrenda de
penitencia, haz brillar en nosotros tu gracia santificante,
y multiplica en nuestros corazones las riquezas de tu amor.
R/. Amén. |
Quia tu es vera pax nostra et cáritas
indisrúpta, vivis tecum et regnas cum Spíritu Sancto, unus
Deus, in sæcula sæculórum.
R/. Amen.
|
Porque tú eres
nuestra paz verdadera, caridad indivisible; tú, que vives
contigo mismo y reinas con tu Hijo y el Espíritu Santo, un
solo Dios, por los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Illatio / Acción de
gracias |
Dignum
et iustum est, �quum vere et salutáre est, nos te laud�re ac
benedícere, si tamen tu, cuius dignitáti atque iustítiæ
nihil ab homínibus quod offértur �quum et iustum est,
præstáre dign�ris ineff�bili pietáte, unde tibi poss�mus
débitas grátias laudásque ref�rre, et imménsam misericórdiæ
tuæ glóriam indef�ssis láudibus prædic�re, Dómine, sancte
Pater, ætérne omnípotens Deus. Tu enim, Dómine, ut
primi hóminis let�le deléctum, per quod addícti teneb�mur,
abol�res, et regnans in nos crimen transgressiónis, pius
ultor ext�ngueres, Unigénitum tuum nihil peccáto debóntem ad
terróna mis�sti; ut, pœna innocéntiæ, víncula quibus
noc�ntes teneb�mur abr�mperet.
Ille enim primam edacitátis culpam ad pósteros
damnatióne transmissam, quadragínta diérum ie�niis expi�vit,
quibus alión.m solvens triste chirógraphum, pi� mortis
oblatióne del�vit, offeréndo se pro reis iúdicem, pro
peccatóribus innocentem, pro servis dóminum, pro mórtuis
vitam, pro homínibus Deum.
Et quasi parvum humáno géneri
dignitátis hóminem suscipiúnto præstáterit, ieun�vit pro
ómnibus, omnes pascens, et pro gulæ aviditáte, eius suc�etas
es�riit.
Adi�cit étiam huic benefício, ut pœnam crucis
excéperet: pro his qui a ligno reatum s�mpserant, p�nderet
in ligno.
Pro hoc ergo, Dómine, ineff�bili redemptiónis nostræ
pr�tio, in quo non tempor�les �liquid, sed se ipsum ábtulit
pro redímptis, offérimus tibi humilitáti cordis et contr�ti
córporis quæ ipse fúeri i�beas pura lib�mina, rog�ntes, ut
huius ie�nii nostri víctimas placítus int�ndas.
Sint tibi sacrifícia hæc odéra; sint p�ngua; sint
digna quæ nobis cleméntiam tuæ pietátis conc�lient; sint quæ
preces nostras ut vota comm�ndent; sintque in similitúdinem
córporis ac sánguinis, Dómini nostri iesu Christi transl�ta,
ut cunctis proféciant, communicant�sque vivis ac
vivific�ntibus sacraméntis cælésti benedictióne
sanctíficent, ac membra Unigéniti tui facta, cápitis sui
virtútum perfectióne conión.ant.
Præsta per eum, cui mérito omnes ángeli et archángeli non cessant
clamóre cotídie, ita dicéntes: |
Es digno y
justo, verdaderamente equitativo y saludable, que te
alabemos y te demos gracias, Señor, santo Padre, eterno Dios
omnipotente, siempre que tú nos lo permitas, con bondad
inefable, y nos facilites tú mismo los elementos necesarios,
para que la pobreza de nuestros recursos humanos alcance de
lejos lo que se debería a tu dignidad y justicia,
proclamando con fidelidad incansable la inmensa gloria de tu
Majestad misericordiosa. Tú, Señor, para quitar su fuerza
al pecado mortal del primer hombre, que nos dominaba, y
extinguir como vengador piadoso las consecuencias del
pecado, enviaste a la tierra a tu Unigénito, libre de tal
pecado, para que con el sufrimiento del inocente, rompiera
las ligaduras que sujetaban a los verdaderos reos.
Expió con el ayuno de cuarenta días aquel primer pecado
de gula transmitido por sentencia a los descendientes, con
ello abolió la triste condena, que no le afectaba, y la
borr� con la expiación de su piadosa muerte, ofreciéndose
Él, que era el juez, en lugar de los reos, el inocente por
los pecadores, el Señor, por los siervos, la vida por los
que estaban muertos, Dios por los hombres.
Y como si hubiera dado poca dignidad al género humano en
hacerse hombre, ayuno por todos, Él que a todos alimenta, y
por la avidez de los que se dejan arrastrar a la gula, tuvo
hambre el que siempre está saciado.
Añadi� todavía a este beneficio, su aceptación del
sacrificio de la cruz: colgar en un leño por aquellos que
habían tomado precisamente de un árbol la ocasión del primer
pecado.
Por todo esto, Señor, con este inefable precio de nuestra
redención, en el que no se ofreció nada temporal, sino que
se ofreció a sí mismo en favor de los redimidos, te
ofrecemos, con humildad de corazón y cuerpo contrito,
rogándote que las aceptes propicio, estas ofrendas que tú
mismo quieras hacer puras.
Que estos sacrificios te agraden por su buen olor y su
grosura sean aptos para atraernos tu misericordia, y para
recomendar nuestras preces y deseos.
Convertidos en el cuerpo y la sangre de Jesucristo, nos
aprovechen a todos, haciéndonos participes del sacramento
vivo y vivificante nos santifiquen con la bendición
celestial, haciéndonos miembros de tu Unigénito, y
uniéndonos a la perfección de virtudes de su cabeza.
Concédelo por Él, a quien justamente, todos los ángeles y
arcángeles no cesan de aclamar cada día,
diciendo así: |
Post Sanctus / Oración
después del Sanctus |
Vere
sanctus, vere benedíctus Dóminus noster Iesus Christus Fílius
tuus: qui appet�tum gulæ, ie�nii austeritáte mulet�vit; qui pro
nobis �nnocens pati vóluit; qui olim redímit v�nditos, et
salváre non désinit multímoda pietáte redímptos. Te
ígitur, Deus, rogámus, ut ille sit in�diæ nostræ reféctio, qui
est accépt� fídei plenitúdo.
Ille nos ie�niis fóveat, qui h�miles spíritu salvat.
Ille nos tibi, Pater, conc�liet, qui nostras iniquitátes suo
port�vit in córpore.
Christus Dóminus ac Redémptor ætérnus. |
Verdaderamente
santo, realmente bendito nuestro Señor Jesucristo tu Hijo, que
pagó el desenfreno de la gula con el ayuno; que siendo inocente
quiso padecer por nosotros; que rescat� a los antes vendidos y
no deja de salvar a los rescatados con su multiforme piedad.
Te suplicamos, pues, Señor, que se haga refección de nuestra
abstinencia quien ya es plenitud de la fe abrazada; que nos
sostenga en el ayuno quien salva a los humildes de espíritu; que
nos reconcilie contigo, Padre, el que cargó sobre su cuerpo
nuestras iniquidades.
Cristo Señor y Redentor eterno.
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Post
Pridie / Invocación |
In te est, Deus, omne desidérium
spei nostræ, in quo est beatitúdo dulcédinis reprom�ss�.
Tu ígitur reléxans peccáta, carnem nostram vúlnere
crucis tuæ mort�fica.
Ut qui hos dies passiónis tuæ cum voto ie�nii celebrámus, in
futára beatitúdine munerámur.
Has quoque hóstias ita, quæsumus, tua, divínitas
benedícat, ut ex his libántibus críminum purgatiónem
exh�beant.
R/. Amen.
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En ti está,
Dios, todo el deseo de nuestra esperanza, porque en ti está
la bienaventuranza de las dulzuras prometidas. Tú, pues,
borra nuestros pecados, mortificando nuestra carne con las
llagas de tu cruz.
Así, los que celebramos con la ofrenda del ayuno, estos días
cercanos a tu pasión, obtengamos la recompensa de la futura
inmortalidad.
Bendice estas hostias, para que generen la pureza de los
que en ellas participen.
R/. Amén. |
Te præstánte, summe Deus,
qui in Trinitáte, unus Deus, glori�ris in sæcula sæculórum.
R/. Amen. |
Concédenoslo, Dios altísimo, que glorioso
en la Trinidad eres un solo Dios, por los siglos de los
siglos.
R/. Amén. |
Ad
Orationem Dominicam / Introducción al Padre
nuestro |
S�tia
nos, Dómine, misericórdia tua, et ciba nos pane lacrim�rum
in hac ie�nii nostri �r�mna.
Ut attr�tum per abstinéntiam corpus tibi des�rviat, tib�que
præceptiónis tuæ oratiónem ánima cum l�crimis �fferat, et
sic a te efféctum c�piat petitiónis, sicut te p�tulo offício
�nvocat oris: |
S�cianos,
Señor, con tu misericordia, alimóntanos con el pan de las
lágrimas en esta necesidad de nuestro ayuno.
Para que se dedique a tu servicio el cuerpo macerado por la
abstinencia, y con lágrimas te presentemos la oración que tú
nos enseñaste, esperando lograr la eficacia prometida: |
Benedictio /
Bendición |
Benedícat
vobis benedictióne perpétua, et spiritúli abstinéntia mort�ficet
carnem vestram.
R/. Amen.
|
El Señor os
bendiga con bendición perpetua aceptando vuestras
mortificaciones de abstinencia.
R/. Amén. |
Mori�mini quoque v�tiis, et
vivific�mini virtútibus copi�si.
R/. Amen. |
Que, muriendo a los vicios, os vivifique la
abundancia de las virtudes.
R/. Amén. |
Tal�que a Dómino promere�mini
mun�ri protectióne, quo nec gula vos pr�vocet ad lasc�viam, nec
p�rcitas ie�nii elatiónis præc�pitet in ru�nam.
R/. Amen. |
Que os proteja la gracia preveniente, para que,
ni la gula os incline a la lascivia, ni el ayuno os haga caer en
la soberbia.
R/. Amén. |
Adiuv�nte Dómino nostro Iesu
Christo, qui in Trinitáte, unus Deus, vivit et regnat, in sæcula
sæculórum.
R/. Amen. |
Con la ayuda de nuestro Señor Jesucristo, que
es un sólo Dios en la Trinidad, y vive y reina por los siglos de
los siglos.
R/. Amén. |
Completuria
/ Oración
conclusiva |
Reple,
Dómine, cor nostrum lætítia, qui nobis dare dignátus es
sacri córporis tui Eucharistíam; ut qui esc�rum perceptióne
refécimur, spirituælibus benefíciis adimpl�ri felíciter
mere�mur.
R/. Amen.
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Colma,
Señor, de alegría nuestros corazones, ya que te has dignado
darnos la Eucaristía de tu sagrado Cuerpo; de forma que así
como somos reconfortados por la recepción de los alimentos,
merezcamos también saciarnos de felicidad con tus dones
espirituales.
R/. Amén. |
Per grátiam pietátis tuæ,
Deus noster, qui vivis et cuncta dominóris in sæcula
sæculórum.
R/. Amen. |
Por la dignación de tu misericordia,
Dios nuestro, que vives y lo señoreas todo por los siglos de
los siglos.
R/. Amén. |
1. Las
partes variables de la misa que aquí se exponen (textos
eucológicos, cantos y lecturas) junto al Ordinario (Liber Offerentium
u Oferencio)
permiten componer la misa completa. Los textos latinos
son los oficiales y están tomados del Missale
Hispano-Mozarabicum I (pp. 247-252) y del Liber Commicus I
(pp. 164-167). Los textos bíblicos en español están tomados de La
Santa Biblia, edición San Pablo.
La traducción de la oraciones oratio admonitionis, alia
y post sanctus está tomada de Colomina Torner, Jaime, La Fe de
nuestros padres. Temas de fe y vida cristiana en la misa
hispanomozárabe, Instituto de Estudios Visigótico Mozárabe, Toledo
2000, pp. 142 y 106-107 respectivamente; la
completuria
del Oferencio y el resto de
oraciones de Gómez-Chacón y Díaz Alejo,
Balbino, Misal Hispano-Mozárabe (obra inédita facilitada a La
Ermita en febrero de 2016).
(Se
recuerda que hasta la fecha no existe misal oficial en español).
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