Misa en
Rito Hispano-Mozárabe
Feria IV in tertia
hebdomada Quadragesimæ
Miércoles de la tercera semana de Cuaresma (1)
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LITURGIA VERBI
/ LITURGIA DE LA PALABRA
Lectio Sapientialis
/ Lectura sapiencial |
Prov 21,22-31 |
Léctio libri Proverbiórum.
R/. Deo
grátias. |
Lectura del libro de los
Proverbios.
R/. Demos
gracias a Dios. |
Fili:
Civitætem f�rtium ascéndit s�piens
et d�struit robur fidúci� eius.
Qui custódit os suum et linguam suam,
custódit ab angústiis ánimam suam.
Supérbus et �rrogans vocátur der�sor,
qui operútur in ira supérbi�.
Desidéria occ�dunt pigrum;
nolu�runt enim quidquam manus eius operúri:
tota die concupíscit et des�derat;
qui autem iustus est, tr�buet et non parcit.
Hó$1tiæ impiórum abomin�biles,
eo magis quia offeréntur ex sc�lere.
Testis mendax perúbit;
vir obédiens loqu�tur in victóriam.
Vir ímpius obf�rmat vultum suum;
qui autem rectus est, c�rrigit viam suam.
Non est sapión.ia, non est prud�ntia,
non est consílium contra Dóminum.
Equus pará.ur ad diem belli,
Dóminus autem salútem tr�buit.
R/.
Amen. |
Hijo: El sabio asalta una
ciudad de héroes
y derriba la muralla en que aquílla conf�a.
El que guarda su boca y su lengua
se preserva a sí mismo de angustias.
�Insolente� es el nombre del soberbio, del arrogante,
que obra con extrema insolencia.
Los deseos del perezoso lo matan,
porque sus manos rechazan el trabajo.
Todo el día se lo pasa deseando,
pero el justo da sin cesar.
El sacrificio del injusto es un sacrilegio,
pues lo ofrece con malas intenciones.
El falso testimonio perecer�,
el que sabe escuchar podrá hablar siempre.
El delincuente aparenta seguridad,
el hombre recto está seguro de su conducta.
Ni sabiduría, ni inteligencia,
ni consejo existen ante el Señor.
Se apareja el caballo para el día del combate,
pero del Señor depende la victoria.
R/.
Amén. |
Lectio Historica
/ Lectura histórica |
Jue 1,1-26 |
Léctio libri Iúdicum.
R/. Deo
grátias. |
Lectura del libro de los
Jueces.
R/. Demos
gracias a Dios. |
In diébus illis:
Post mortem I�sue consulu�runt fílii
Ísrael Dóminum dicéntes: «Quis nostrum primus ascéndet ad
Chanan�um ad pugn�ndum contra eum?».
Dixítque Dóminus: «Iudas ascéndet: ecce
trádidi terram in manus eius».
Et ait Iudas Simeóni fratri suo: «Ascénde
mecum in sorte mea, et pugn�mus contra Chanan�um, et ego
pergam tecum in sorte tua».
Et �biit cum eo S�meon. Ascend�tque Iudas,
et trádidit Dóminus Chanan�um ac Pherez�um in manus e�rum,
et percuss�runt in Bezec decem m�llia vir�rum. Inveneréntque
Adonib�zec in Bezec et pugnav�runt contra eum ac
percuss�runt Chanan�um et Pherez�um. Fugit autem Adonib�zec,
quem persecúti comprehend�runt, c�sis poll�cibus m�nuum eius
ac pedum.
Dixítque Adonib�zec: «Septuag�nta reges,
amputátis m�nuum ac pedum poll�cibus, collig�bant sub mensa
mea cib�rum reléquias. Sicut feci, ita r�ddidit mihi Deus».
Adduxeréntque eum in Ierúsalem, et ibi
mórtuus est.
Oppugn�ntes ergo fílii Iudé Ierúsalem
cep�runt eam; et percuss�runt in ore gládii trad�ntes
incóndio civitætem.
Et p�stea descend�ntes pugnav�runt contra Chanan�um, qui
habitábat in montónis et in Nageb et in Seph�la.
Perg�nsque Iuda contra Chanan�um, qui habitábat in
Hebron, cui nomen fuit antíquitus Cariath�rbe, perc�ssit
Sesai et Ahiman et Tholmai. Atque inde proféctus �biit ad habitatóres Dabir, cuius
nomen vetus erat Cariathsepher (id est c�vitas Litter�rum).
Dixítque Chaleb: «Qui percísserit Cariathsepher et
c�perit eam, dabo ei Axam fíliam meam ux�rem».
Cumque cepísset eam Oth�niel fílius Cenez frater Chaleb
minor, dedit ei Axam fíliam suam c�niugem.
quæ cum veníret, incit�vit eum, ut páteret a patre suo
agrum. Dem�sit ergo se de ásino, et dixit ei Chaleb: «Quid
habes?».
At illa respóndit: «Da mihi
benedictiónem; quia terram aríetem dedísti mihi, da et
irr�guam aquis».
Dedit ergo ei Chaleb irriguum superius
et irr�guum inférius.
Fílii autem Hobab Cin�i cogn�ti Móysi ascend�runt de
civitæte Palm�rum cum fíliis Iudé in desértum Iudé, quod est
ad merídiem Arad, et habitav�runt cum Amalec�tis.
�biit autem Iudas cum Simeóne fratre suo et percuss�runt
simul Chanan�um, qui habitábat in Sephath, et percuss�runt
urbem anath�mate. Vocat�mque est nomen eius Horma (id est
An�thema).
Cep�tque Iudas Gazam cum fínibus suis et Ascalónem atque
�ccaron cum t�rminis suis.
Fu�tque Dóminus cum Iuda, et montóna poss�dit; nec p�tuit
exp�llere habitatóres vallis, quia falc�tis c�rribus
abund�bant.
Dederéntque Chaleb Hebron, sicut dúxerat Móyses, qui
�xpulit ex ea tres fílios Enac.
Iebus�um autem habitatórem Ierúsalem non expul�runt fílii
Ben�amin, habitav�tque Iebus�us cum fíliis Beniamin in
Ierúsalem usque in præséntem diem.
Domus quoque Ioseph ascéndit Bethel, fu�tque Dóminus cum
eis.
Nam, cum explor�rent urbem, quæ prius Luza vocab�tur,
vidérunt custódes hóminem egredión.em de civitæte
dixeréntque ad eum: «Ost�nde nobis intr�itum civitætis, et
faci�mus tecum misericórdiam».
Qui cum ostendísset eis, percuss�runt urbem in ore
gládii; hóminem autem illum et omnem cognatiónem eius
dimis�runt. Qui dim�ssus �biit in terram Hetthim et ædificávit ibi
civitætem vocav�tque eam Luzam, quæ ita appell�tur usque in
præséntem diem.
R/.
Amen.
|
En aquellos días:
Después de la muerte de Josué, los israelitas
consultaron al Señor: «¿Quén de nosotros subir� el primero
para
luchar contra los cananeos?».
El Señor respondió: «Subirá
Judá, pues he puesto el país en sus manos».
Entonces Judá
dijo
a Simeón, su hermano: «Sube conmigo al territorio que me ha
tocado en suerte para luchar contra los cananeos; después
luchará
yo contigo en tu territorio».
Y Simeón se le unió. Judá
subió, y el
Señor puso en sus manos a los cananeos y a los fereceos;
derrotaron
en Bézec a diez mil de ellos, entre los que se encontraba
Adonisedec. Adonisedec se dio a la fuga; pero ellos lo
persiguieron, lo alcanzaron y le cortaron los pulgares de
las manos
y de los pies.
Adonisedec dijo: «Setenta reyes, cortados
los
pulgares de pies y manos, recogían las migajas debajo de mi
mesa;
Dios me paga con la misma medida».
Fue llevado a Jerusalén,
y allí
murió.
Los de la tribu de Judá atacaron Jerusalén y la
tomaron,
pasaron a filo de espada a todos sus habitantes y le
prendieron
fuego.
Después bajaron a atacar a los cananeos que vivían
en la
montaña, el Negueb y la Sefela. Atacaron también a los cananeos que vivían en Hebrón.
Hebrón se llamaba antiguamente Quiriat Arbá. Y derrotaron a
Sesay, a Ajimán y a Talmay. Luego atacaron la ciudad de
Debir.
Debir se llamaba antiguamente Quiriat Séfer.
Entonces
Caleb
prometió: «A quien ataque y tome Quiriat Séfer, le daré por
mujer a
mi hija Acsá.
La tomó Otoniel, hijo de Quenaz, hermano
menor de Caleb, y éste le dio por esposa a su hija Acsá. Cuando
la llevaban a casa de su marido, éste la convenció para que
pidiera a
su padre un campo. Ella se bajá del asno, y Caleb le
preguntó:
«¡qué quieres?».
Ella respondió: «Hazme un favor. Ya que
me has dado una tierra de secano, dame al menos una fuente».
Y
Caleb le dio la fuente de arriba y la de abajo.
Los hijos de Jobab, el quenita, suegro de Moisés,
subieron con los de Judá desde la ciudad de las palmeras al
desierto
que está al mediodía de Judá, en la bajada de Arad, y
vivieron con los
amalecitas.
Después Judá fue con Simeón, su hermano, y derrotaron a
los
cananeos que vivían en Sefat, y entregaron al exterminio la
ciudad.
Por eso aquella ciudad se llamó Jormá. Pero no pudieron
apoderarse de Gaza, Ascalón y Ecrón con sus respectivos
términos. El Señor estaba con Judá, que conquist� la
montaña; pero no pudo expulsar a los habitantes de la
llanura,
porque tenían carros de guerra. Siguiendo las órdenes de
Moisés, Hebrón fue dado a Caleb, que echó de allí a los tres
hijos de
Anac.
Sin embargo, los de la tribu de Benjamín.no
pudieron
echar de Jerusalén a los jebuseos, que han continuado
viviendo allí
hasta el día de hoy con los de Benjamín.
A su vez, la casa de José subió contra Betel, y el Señor
estuvo
con ella. Exploraron los alrededores de Betel, llamada
antiguamente Luz. Los espías vieron a un hombre que salía
de
la ciudad y le dijeron: «Indícanos por dónde se puede entrar
en la
ciudad y seremos benévolos contigo».
Él les indicó por
dónde
podían entrar en la ciudad. Pasaron a filo de espada a la
ciudad, pero
dejaron libre a aquel hombre con toda su parentela. Aquel
hombre se fue al país de los hititas, edificó una ciudad y
la llamó
Luz, nombre que aún conserva hoy.
R/.
Amén. |
Threni /
Trenos |
Job 7,20-21.7.19-21.16 (2) |
Peccávi.
Quid f�ciam, o custos hóminum? |
Si he pecado, ¿qué
te he hecho a ti con ello, oh guardión de los hombres? |
V/.
Quare posuísti me contrárium tibi, et factus sum mihimet�psi
gravis? V/. Quare non
tollis peccátum meum, et quare non aufers iniquitátem meam?
V/. Ecce nunc in p�lvere
d�rmiam; et si mane me qu�s�eris, non subs�stam.
V/. Mem�nto quia ventus est
vita mea; et ut non rev�rtar ultra, �squequo non parcis mihi,
nec dim�ttis me ut gl�tiam sal�vam meam?
V/. Parce ergo mihi. Nihil
sunt dies mei. |
V/.
¿Por qué me has hecho blanco tuyo?¿Por qué te causo inquietud? V/.
¿Por qué mi ofensa no toleras y no ignoras mi delito?
V/. Muy pronto yacer� en el
polvo; me buscar�., y ya no existir�.
V/. Recuerda que mi vida es un
soplo, que mis huesos no volverán a ver la dicha. «Hasta cuándo
seguirás vigil�ndome? «No me dejar�. ni tragar la saliva?
V/. D�jame, pues mis días son un
soplo. |
Apostolus
/ Apóstol |
1Pe 2,25-3,9 |
Epístol� Petri apóstoli prima.
R/. Deo
grátias. |
Primera Epístola del apóstol
Pedro.
R/. Demos gracias a
Dios. |
Caríssimi:
Er�tis enim sicut oves errántes, sed convérsi
estis nunc ad pastórem et epíscopum animárum vestrórum.
Simíliter muláeres s�bditæ sint suis viris,
ut et si qui non credunt verbo, per muláerum conversatiónem
sine verbo lucrif�ant, consideréntes castam in timóre
conversatiónem vestram; quarum sit non extr�nsecus capillat�r�
aut circumdatiónis auri aut indum�nti vestiment�rum cultus, sed qui abscónditus cordis est homo, in incorruptibilitáte mitis
et quieti spíritus, qui est in conspéctu Dei l�cuples.
Sic enim aliquándo et sanctæ muláeres speréntes in Deo
orn�bant se subiéct� própriis viris, sicut Sara obédiébat
Abrahæ dóminum eum vocans: cuius estis fíli� benefación.es et
non timóntes ullam perturbatiónem.
Viri simíliter cohabitántes secóndum sción.iam quasi
infirmi�ri vaso muláebri impertiónees honórem , tamquam et
coherédibus grátiæ vitæ, uti ne impedión.ur oratiónis vestr�.
In fine autem omnes unánimes, compatiónees, fraternitátes
amatóres, misericórdes, h�miles, non redd�ntes malum pro malo
vel maledíctum pro maledícto, sed e contrário benedicéntes, quia
in hoc vocáti estis, ut benedictiónem hereditáte accipi�tis.
R/. Amen. |
Queridísimos: Pues erais como
ovejas descarriadas, pero
ahora habéis vuelto al pastor y guardión de vuestras vidas.
Vosotras mujeres, sed sumisas a vuestros
maridos, para que si alguno de ellos se muestra reacio a la
palabra,
pueda ser ganado sin necesidad de palabras por vuestra conducta al ver vuestro comportamiento respetuoso y honesto. Lo importante no es el adorno exterior, compuesto de
peinados, joyas y vestidos, sino el interior que radica en la
integridad de un alma dulce y apacible; eso es lo que tiene
valor ante
Dios.
Así se adornaban en otro tiempo las santas mujeres que
tenían su esperanza puesta en Dios y obedecían a sus maridos; ejemplo es Sara que obedeció a Abrahán, llAméndole
Señor. Vosotras pod�is ostentar el título de hijas suyas si
hacéis el
bien sin dejaros atemorizar por nada.
Igualmente, vosotros, maridos, comportaos sabiamente
con vuestras esposas, como con un sexo más débil. Puesto que son
herederas, con el mismo título que vosotros, del don de la vida
sed
respetuosos con ellas para que vuestras oraciones no encuentren
obstáculos.
Finalmente, vivid todos unidos en armonía. Sed
compasivos, fraternales, misericordiosos, humildes, no
devolv�is mal por mal ni injuria, por injuria sino todo lo
contrario
bendecid siempre pues para esto habéis sido llamados para ser
herederos de la bendición.
R/.
Amén. |
Evangelium
/ Evangelio |
Jn 6,35-40 |
Léctio sancti Evangúlii
secóndum Ioánnem.
R/. Glória tibi
Dómine. |
Lectura del santo Evangelio según
san Juan.
R/. Gloria a ti,
Señor. |
In illo témpore:
Dóminus noster Iesus Christus dixit eis: «Ego sum panis vitæ. Qui
venit ad me, non es�riet; et, qui credit in me, non s�tiet
umquam. Sed dixi vobis, quia et vidéstis me et non créditis. Omne, quod dat mihi Pater, ad me véniet; et eum, qui venit ad
me, non e�ciam foras, quia descéndi de cœlo, non ut f�ciam
voluntátem meam sed voluntátem eius, qui misit me.
Hæc est autem volóntas eius, qui misit me, ut omne, quod
dedit mihi, non perdam ex eo, sed res�scitem illud in novíssimo
die. Hæc est enim volóntas Patris mei, ut omnis, qui videt Fílium
et credit in eum, hábeat vitam ætérnam; et resuscit�bo ego eum
in novíssimo die». R/. Amen. |
En
aquel tiempo: Nuestro Señor Jesucristo les dijo: «Yo soy el
pan de la vida. El que viene a mí no tendr� hambre, y el que
cree en mí no tendr� sed jamás. Pero ya os he dicho que, aunque
me habéis visto, no creáis. Todos los que el Padre me da vendrán
a mí. Al que viene a mí no lo rechazo, pues he bajado del cielo
no para hacer mi voluntad, sino la
voluntad del que me ha enviado.
Y ésta es la voluntad del que me ha enviado, que yo no pierda
a ninguno de los que Él me ha dado, sino que los resucite en el
último día. Pues es voluntad de mi Padre que todo el que vea al
hijo y crea en Él tenga vida eterna y yo lo resucite en el
último día».
R/.
Amén. |
Laudes |
Sal 70,23a.22a |
Gaud�bunt
l�bia mea cum cantúvero tibi et ánima mea quam redem�sti. |
Mis
labios cantará alegres porque tú has rescatado mi vida. |
V/. Et ego confit�bor tibi in vasis
psalm�rum, Deus, psallam tibi.
R/. Et ánima mea quam redem�sti. |
V/.
Yo te ensalzar� con el arpa por tu fidelidad, Dios mío, y con la
cítara tocar� para ti.
R/. Porque tú has rescatado mi
vida. |
Sacrificium
/ Canto del Ofertorio |
Sal 19,4.6a |
Memor
sacrifícii nostri esto, Dómine, ut holocáustum nostrum pingue
fiat. |
Acu�rd�te de todas
nuestras ofrendas, Señor, y nuestros holocaustos acepta con
agrado. |
V/.
L�t�bimur in salutári tuo et in nómine Dei nostri lev�bimus
signa.
R/. Ut holocáustum
nostrum pingue fiat. |
V/. Entonces
celebraremos tu victoria y en nombre de Dios tremolaremos las
banderas.
R/. Y nuestros holocaustos acepta
con agrado. |
Oratio Admonitionis / Monición
sacerdotal |
Si gustátis, dilectíssimi
fratres, quam suavis est Dóminus, quamque in omitt�ndis
iniquitátibus sit piíssimus, ad eum ex fide acc�dite et
votum ieión.i vestri ante altáre suum persolventes
exp�scite, ut d�leat delécta nostra et c�nferat grátiam
suam: quíliter et abstinéntiæ vestræ votum acc�mulet, et
desidéria nostræ petitiónis clem�nter i�beat accept�re.
R/. Amen.
|
Queridos hermanos, si habéis
gustado la dulzura del Señor y hasta dónde llega su
misericordia en el perdón de los pecados, acercaos a Él por
la fe, y poned ante su altar la ofrenda de vuestro ayuno,
para que borre nuestros delitos y nos dé su gracia,
acreciente el valor de vuestra abstinencia, y acepte con su
clemencia los deseos que manifestamos en nuestras oraciones.
R/. Amén. |
Per grátiam pietátis suæ
qui est benedíctus in sæcula sæculórum.
R/. Amen.
|
Por la gracia de la misericordia del que es
bendito por los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Alia / Oración entre los
Dípticos |
Mem�nto, Dómine,
miseratiónem tuærum quas contr�tis semper móntibus clem�nter
imp�ndis: ut tui nos aux�lii grátia prosequ�nte, tale tibi
spiritúlis contin�ntiæ ieión.um persolvámus, in quo non
invenión.ur nostræ voluntátes a tua voluntáte diss�miles.
R/. Amen.
|
Acu�rdate,
Señor, de tu misericordia, de la clemencia con que acoges a
los corazones contritos; mientras nosotros con la ayuda de
tu gracia, te ofrecemos con el ayuno nuestra austeridad
espiritual, poniendo nuestras voluntades en sintonía con la
tuya.
R/. Amén. |
Per misericórdiam tuam,
Deus noster, in cuius conspéctu sanctórum Apostolórum et
Mártyrum, Confessórum atque Vírginum nómina recitántur.
R/. Amen. |
Por tu misericordia, Dios nuestro,
en cuya presencia recitamos los nombres de los santos
Apóstoles y Mártires, Confesores y Vírgenes.
R/. Amén. |
Post Nomina / Oración
después de los Dípticos |
Deus, cuius Nomen magnum
est, atque mir�bile, tu et nómina offeréntium in libro vitæ
ascríbe, et defunctórum ánimas ætérn� quiétis amenitátibus
r�fove: quo abstinéntiæ nostræ susc�piens precem, ómnibus in
comm�ne a te conced�tur donum indulgéntiæ sempitérn�.
R/. Amen.
|
Dios, cuyo
nombre engrandecemos y admiramos, asienta los nombres de los
oferentes en el libro de la vida, y alegra las almas de los
difuntos con las delicias del descanso eterno, así,
aceptando nuestras súplicas y nuestra abstinencia, nos
concedas a todos el don del perdón que dura para siempre.
R/. Amén. |
Quia tu es vita vivórum,
sánitas infirmórum ac r�quies ómnium fidélium defunctórum in
ætérna sæcula sæculórum.
R/. Amen.
|
Porque tú eres la vida de los que viven, la
salud de los enfermos, y el descanso de todos los fieles
difuntos por todos los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Ad Pacem / Oración
de la Paz |
Deus, qui
ieiun�ntium humilitáte placéris, et humilión.ium se tibi
précibus libánter infl�cteris, exáudi quæsumus preces
nostras, et divers�rum t�rbinum quibus qu�timur, tempestáte
discíssa, pacem nobis tuæ serenitátis infúnde: ut, quam
peccatórum nostrærum nimiet�te perd�dimus, tuæ pietátis
indulgéntiam consequ�mur.
R/. Amen.
|
Dios, que te complaces en la
humildad de los que ayunan, y te inclinas con agrado a las
preces de los humildes, escucha, te rogamos, nuestras
plegarias, infúndenos la paz de tu excelsa serenidad y
disuelve las tempestades que nos sacuden; para que así nos
acerquemos de nuevo a tu piedad perdonadora de la que nos
apartaron nuestros muchos pecados.
R/. Amén. |
Quia tu es vera pax nostra et cáritas
indisrúpta, qui vivis tecum et regnas cum Spíritu Sancto,
unus Deus, in sæcula sæculórum.
R/. Amen. |
Porque tú eres
nuestra paz verdadera, caridad indivisible; tú, que vives
contigo mismo y reinas con el Espíritu Santo, un solo Dios,
por los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Illatio / Acción de
gracias |
Dignum et iustum est nos
tibi grátias ágere, Dómine sancte Pater, ætérne omnípotens
Deus, qui paras adinventiónis tuas sapión.er et disp�nis
ómnia suáviter. Qui ascend�sti super occásum, Dóminus nomen
est tibi.
Tu panis es vivus et verus, qui descend�sti de cœlo,
ut dares escam esurión.ibus, immo, ut ipse esses esca
viv�ntium: qui es nobis in pane, quo corda firmóntur; ut in
virtúte panis huius per hos dic�tos Nómini tuo dies, sine
impedim�nto carnis et sánguinis ieiun�re vale�mus, te ipsum
panem habóntes.
Qui páuperes tuos cæléstibus sat�ras p�nibus; qui
Móysi et Elíæ per quadrag�nos dies ieión.a incho�ntibus,
quadrag�num númerum dedic�sti. Deinde, étiam ipse ieión.ns,
e�ndem númerum nobis diérum ieión.i sollemnitáte sign�sti:
ut quod ipse in nostri córporis infirmitáte pro nobis
i�giter in quadragínta diébus et nóctibus expl�sti, nos vel
minut�tim e�ndem númerum diérum adimpl�ntes, c�lculi
distrib�ta observ�ntia vespert�nis semper oratiónebus
termin�mus. Te nos adiuv�nte et salv�nte, cui
mérito omnes ángeli et archángeli non cessant clamóre
cotídie ita dicentes: |
Es digno y
justo que te demos gracias, Señor, Padre santo, Dios
todopoderoso y eterno, que preparas con sabiduría tus
designios y dispones todo con suavidad. Que te levantas por
encima del horizonte y tienes por nombre el Señor. Tú eres
el pan vivo y verdadero que has bajado del cielo para dar de
comer a los hambrientos, para ser tú mismo alimento de los
que viven y dejar vigorizadas nuestras almas con la fuerza
de este pan, de forma, que durante estos días dedicados a tu
gloria, podamos ayunar sin impedimento de carne y sangre.
Tú eres el que sacias a tus pobres con el pan celestial;
tú el que designaste el número de cuarenta días para los
ayunos de Elías y de Moisés.
Y después, ayunando tú mismo, señalaste solemnemente para
nosotros el número de días, aunque tú lo mantuvieras
constantemente durante cuarenta días con sus noches, y para
nosotros lo estableciste parcialmente, con una sola comida
al día, señalando para ello el tiempo la oración vespertina.
Porque tú nos ayudas a obtener la salvación, y por eso,
todos los ángeles y arcángeles no cesan de aclamarte sin
cesar, diciendo a una voz: |
Post Sanctus / Oración
después del Sanctus |
Vere
sanctus, vere in altíssimis gloriósus, cuius mélior est
misericórdia super vitam, qui dives est in misericórdia.
Ille �tenim ieiónis visc�ribus spiritúlis alimóni� �pulum
donat, et anim�bus v�tio abstinéntibus, grátiæ cæléstis dona
subminístrat.
Christus Dóminus ac Redémptor ætérnus. |
Santo y bendito es
en verdad en las alturas, aquel cuya misericordia es mejor que
la vida, el rico en misericordia.
Él da a los que ayunan un manjar espiritual, y a los que se
apartan del vicio les da los dones de la patria celestial.
Cristo, Señor y Redentor eterno. |
Post
Pridie / Invocación (3) |
Sanctífica, Dómine, quod
per manus nostras tibi cum abstinéntiæ contritióne lit�mus:
ut benedictiónis tuæ fove�mur ex donis, qui Maiestáti tuæ
cum ieión.i contritióne, offérimus hoc sacrifícium laudis.
R/. Amen.
|
Santifica,
Señor, todo lo que nuestras manos te ofrecen, junto con la
abstinencia penitencial, de modo que bendigas estos dones
que,
con el ayuno penitencial, ofrecemos como sacrificio de
alabanza a tu majestad.
R/. Amén. |
Præsta, Pater ingénite, per
Unigénitum tuum, Dóminum nostrum Iesum Christum, per quem tu
hæc ómnia nobis indígnis servis tuis valde bona creas,
sanctíficas, vivíficas ac præstas nobis, ut sint benedícta a
te Deo nostro in sæcula sæculórum.
R/. Amen. |
Concédelo, Padre sin principio, por medio de tu
Unigénito, nuestro Señor Jesucristo, por quien creas todas
estas cosas para nosotros, indignos siervos tuyos, y las
haces tan buenas, las santificas, las llenas de vida, las
bendices y nos las das, así bendecidas por ti, Dios nuestro,
por los siglos de los siglos.
R/. Amén. |
Ad
Orationem Dominicam / Introducción al Padre
nuestro |
Deus,
qui nos spe reprom�ss� beatitúdinis foves, et panem illum
cælórum e s�dibus porr�ctum, nostræ abstinéntiæ ariditáti
imp�rtis atque conc�dis; tu pius nobis et in præsénti
ieión.i �r�mna consolatiónem attr�bue, et oróntibus atque
clamántibus ad te, verba doctrínæ tuæ, p�tul� pietátis
acc�moda aurem: |
Dios, que nos
alientas con la esperanza de la felicidad prometida, y
deparas el pan del cielo a la aridez de nuestra penitencia;
danos el consuelo en la presente necesidad del ayuno, y
concede la ben�vola acogida de tu piedad a los que claman a
ti con las palabras que les enseñaste: |
Benedictio /
Bendición |
Iesus
Salvátor ac Dóminus noster em�ndet vos, per abstinéntiæ
puritátem ab omni delécti contagión..
R/. Amen.
|
Jesús, salvador y
Señor nuestro, os limpie por la purificación de la abstinencia
de todo contagio de pecado.
R/. Amén. |
Quique est vestrórum redímptio
animárum, sit remunerátio vestrórum ieiuni�rum.
R/. Amen. |
El que redimió vuestras almas sea el premio de
vuestros ayunos.
R/. Amén. |
Ut ab eo don�tur vobis ætérna
glória, a quo sanctificári vultis per abstinéntiam.
R/. Amen. |
Para que os dé la eterna gloria aquel de quien
esperáis la santificación a través de vuestra penitencia.
R/. Amén. |
Adiuv�nte Dómino nostro Iesu
Christo, qui in Trinitáte, unus Deus, vivit et regnat in sæcula
sæculórum.
R/. Amen. |
Con la ayuda de nuestro Señor Jesucristo, que,
en la Trinidad, un solo Dios, vive y reina por los siglos de los
siglos.
R/. Amén. |
Completuria
/ Oración
conclusiva |
Reple,
Dómine, cor nostrum lætítia, qui nobis dare dignátus es
sacri córporis tui Eucharistíam; ut qui esc�rum perceptióne
refécimur, spirituælibus benefíciis adimpl�ri felíciter
mere�mur.
R/. Amen.
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Colma,
Señor, de alegría nuestros corazones, ya que te has dignado
darnos la Eucaristía de tu sagrado Cuerpo; de forma que así
como somos reconfortados por la recepción de los alimentos,
merezcamos también saciarnos de felicidad con tus dones
espirituales.
R/. Amén. |
Per grátiam pietátis tuæ,
Deus noster, qui vivis et cuncta dominóris in sæcula
sæculórum.
R/. Amen. |
Por la dignación de tu misericordia,
Dios nuestro, que vives y lo Señoreas todo por los siglos de
los siglos.
R/. Amén. |
1. Las
partes variables de la misa que aquí se exponen (textos
eucológicos, cantos y lecturas) junto al Ordinario (Liber Offerentium
u Oferencio)
permiten componer la misa completa. Los textos latinos
son los oficiales y están tomados del Missale
Hispano-Mozarabicum I (pp. 230-234) y del Liber Commicus I
(pp. 143-146).
Traducción: Textos bíblicos de La
Santa Biblia, edición San Pablo, completuria del Oferencio
y el resto de oraciones de Ivorra, Adolfo
(ed.), Misal Hispano-Mozárabe, Centre de Pastoral Litúrgica,
Barcelona 2015, pp. 146-149.
(Se
recuerda que hasta la fecha no existe misal oficial en español).
2. Job
7,20-22.7.19.16b. N. de La
Ermita.
3. Traducción incompleta en el
original.
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