Rito Hispano-mozárabe

TEXTOS LITÚRGICOS

RITO HISPANO-MOZÁRABE

Textos propios de la Misa del Domingo VIII de Cotidiano

 

Misa en Rito Hispano-Mozárabe

DE COTIDIANO
In VIII Dominico
/ Domingo VIII (1)

 

Domingo VIII de Cotidiano. ("Jesús y la hemorroísa" El Veron�s. Kunsthistorisches Museum, Viena, 1565)
 

 

Prælegendum / Canto de entrada Sal 28,11; 105,4
Da, Dómine, virtútem pópulo tuo, Allelúia, et b�nedic plebi tuæ in pace, Allelúia, Allelúia, Allelúia. Da, Señor, fortaleza a tu pueblo, aleluya, y bendícelo con la paz, aleluya, aleluya, aleluya.
V/. Mem�nto nostri, Dómine, in beneplácito pópuli tui; v�sita nos in salutári tuo.
R/. Et b�nedic plebi tuæ in pace, Allelúia, Allelúia, Allelúia.
V/. Glória et honor Patri et Fílio et Spirítui Sancto in sæcula sæculórum. Amen
R/. Et b�nedic plebi tuæ in pace, Allelúia, Allelúia, Allelúia.
V/. Cuando seas propicio con tu pueblo, acuérdate de nosotros, Señor, cuando vengas a salvarlo no te olvides de nosotros.
R/. Y bendice a tu pueblo con la paz, aleluya, aleluya, aleluya.
V/. Gloria y honor al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, por los siglos de los siglos. Amén.
R/. Y bendice a tu pueblo con la paz, aleluya, aleluya, aleluya.

Inicio página

Oratio post Gloriam / Oración después del Gloria
Christe, glória nostra: glóriam summam tibi solo débitam persolvámus; nostram dignánter súscipe obsequ�llam, ut in monte santo tuo sanctórum consórtiis connect�mur, et cum eis cæléstis regni ión.am e�ntes intr�mus.
R/. Amen.

Oh Cristo, gloria nuestra, te ofrecemos la suprema alabanza que sólo tú mereces; acepta benigno nuestro homenaje y haz que, en tu monte santo, tengamos parte en la comunión de los santos y con ellos entremos por la puerta del reino del cielo.
R/. Amén.

Per misericórdiam tuam, Deus noster, qui es benedíctus et vivis et ómnia regis in sæcula sæculórum.
R/. Amen.

Por tu misericordia. Dios nuestro, que eres bendito y vives y todo lo gobiernas por los siglos de los siglos.
R/. Amén.

Inicio página


LITURGIA VERBI / LITURGIA DE LA PALABRA

Prophetia / Profecía Is 49,1-6
Léctio libri Isaíæ prophétæ.
R/. Deo grátias.
Lectura del libro del profeta Isaías.
R/. Demos gracias a Dios.
Hæc dicit Dóminus:

Audíte me, ínsulæ, et att�ndite, pópuli de longe:
Dóminus ab étero vocávit me,
de ventre matris meæ recordátus est nóminis mei;
et pósuit os meum quasi gládium ac�tum,
in umbra manus suæ protéxit me
et pósuit me sicut sagúttam eléctam,
in ph�retra sua abscóndit me
et dixit mihi: «Servus meus es tu,
Ísrael, in quo gloriábor�.

Et ego dixi: «In vácuum laborávi,
sine causa et vane fortitúdinem meam cons�mpsi;
ver�mtamen iudícium meum cum Dómino
et merces mea cum Deo meo».

Et nunc dicit Dóminus,
qui formávit me ex étero servum sibi,
ut redícerem Iacob ad eum,
et Ísrael ei congregará.ur;
et glorificátus sum in óculis Dómini,
et Deus meus factus est fortitúdo mea.

Et dixit: «Parum est ut sis mihi servus
ad suscit�ndas tribus Iacob
et reléquias Ísrael reducéndas:
dabo te in lucem géntium,
ut sit salus mea usque ad extrémum terræ.
Ait Dóminus omnípotens.

R/. Amen.

As� dice el Señor:

Escuchadme, islas; prestad atención, pueblos
lejanos:
El Señor me ha llamado desde el vientre de mi madre,
desde el seno ha pronunciado mi nombre.
Hizo de mi boca una espada afilada,
con la sombra de su mano me guard�;
hizo de mí una flecha aguzada,
en su aljaba me escondi�.
Y me dijo: Tú eres mi siervo,
Israel, en quien me glorificar�.

Yo decía: «En vano me he afanado,
para nada he gastado mis fuerzas.
Pero mi derecho está en las manos del Señor,
mi recompensa en mi Dios».

Y ahora ha hablado el Señor,
que desde el seno me form� para ser siervo suyo,
para hacer que Jacob vuelva a él
y reunir con Él a Israel
-pues glorioso era yo a los ojos del Señor
y mi Dios era mi fortaleza-.

Y dice: «Poca cosa es que seas mi siervo
para restablecer las tribus de Jacob
y traer de nuevo a los supervivientes de Israel.
Yo te he puesto como luz de las gentes,
para que llegue mi salvación hasta los extremos de la tierra».
Dice el Señor todopoderoso.

R/. Amén.

Inicio página

Psallendum / Salmo de meditación Sal 19,5.7.3
Tr�buat tibi Dóminus secóndum cor tuum, et omne consílium tuum conf�rmet. Que el Señor te conceda todo lo que quieras y realice todos tus proyectos.
V/. �mpleat Dóminus omnes petitiónis tuas, mittat tibi aux�lium de sancto, et de Sion tue�tur te.
R/. Et omne consílium tuum conf�rmet.
V/. Que el Señor te conceda todo lo que pidas, te env�e su socorro desde su santuario, que sea desde Sión tu apoyo.
R/. Y realice todos tus proyectos.

Inicio página

Apostolus / Apóstol Rom 16,17-20
Epístola Pauli apóstoli ad Romános.
R/. Deo grátias.
Epístola del apóstol san Pablo a los romanos.
R/. Demos gracias a Dios.
Fratres:

Rogo vos, ut observ�tis eos, qui dissensiónis et offend�cula préter doctrínam, quam vos didic�stis, f�ciunt, et declin�te ab illis; hui�smodi enim Dómino nostro Christo non s�rviunt sed suo ventri, et per dulces sermónes et benedictiónis sed�cunt corda innocéntium.

Vestra enim obédión.ia ad omnes pervénit; gáudeo ígitur in vobis, sed volo vos sapión.es esse in bono et s�mplices in malo. Deus autem pacis c�nteret S�tanam sub pédibus vestris velíciter. Gr�tia Dómini nostri Iesu vobíscum.

R/. Amen.

Hermanos:

Os ruego que no perd�is de vista a los que causan divisiones y escándalos contra la doctrina que habéis aprendido, y apartaos de ellos; porque �sos no sirven a Cristo nuestro Señor, sino a su estámago, y con palabras dulces y agradables engaían a la gente sencilla.

Porque vuestra obediencia a la fe es ya conocida de todos. Por esto estoy satisfecho de vosotros, pero quiero que seáis listos para el bien y simples para el mal. El Dios de la paz pronto aplastar� a Satanás bajo vuestros pies. La gracia de nuestro Señor Jesucristo está con vosotros.

R/. Amén.

Inicio página

Evangelium / Evangelio Mc 5,21-34
Léctio sancti Evangélii secóndum Marcum.
R/. Glória tibi, Dómine.
Lectura del santo Evangelio según san Marcos.
R/. Gloria a ti, Señor.
In illo témpore:

Cum transcendísset Iesus in navi rursus trans fretum, convénit turba multa ad illum, et erat circa mare. Et venit quidam de archisynagógis nómine Ia�rus et videns eum pr�cidit ad pedes eius et deprec�tur eum multum dicens: «Fil�ola mea in extrémis est; veni, imp�ne manus super eam, ut salva sit et vivat�. Et �biit cum illo. Et sequebátur eum turba multa et comprim�bant illum.

Et múlier, quæ erat in profl�vio sánguinis annis du�decim et fúerat multa perp�ssa a compl�ribus médicis et erog�verat ómnia sua nec quidquam profécerat, sed magis det�rius habíbat, cum audísset de Iesu, venit in turba retro et t�tigit vestiméntum eius; dicébat enim: «Si vel vestiménta eius tet�gero, salva ero». Et conf�stim siccátus est fons sánguinis eius, et sensit córpore quod san�ta esset a plaga.

Et statim Iesus cogn�scens in semet�pso virtútem, quæ exíerat de eo, convérsus ad turbam ai�bat: «Quis t�tigit vestiménta mea?». Et dicébant ei discípuli sui: «Vides turbam comprim�ntem te et dicis: «Quis me tetigit?��. Et circumspici�bat vidére eam, quæ hoc f�cerat. M�lier autem timens et tremens, sciens quod factum esset in se, venit et pr�cidit ante eum et dixit ei omnem veritátem. Ille autem dixit ei: «Fília, fides tua te salvam fecit. Vade in pace et esto sana a plaga tua».

R/. Amen.

En aquel tiempo:

Cuando Jesús regresó en barca a la otra orilla, se reunió con Él mucha gente, y se quedó junto al lago. Llegó uno de los jefes de la sinagoga, llamado Jairo, y, al ver a Jesús, se ech� a sus pies rogándole con insistencia: «Mi hijita se está muriendo; ven a poner tus manos sobre ella para que se cure y viva». Jesús fue con Él. Lo seguía mucha gente, que lo apretujaba.

Y una mujer que padecía hemorragias desde hacía doce años, que había sufrido mucho con muchos médicos y había gastado toda su fortuna sin obtener ninguna mejoría, e incluso había empeorado, al oír hablar de Jesús, se acercó a Él por detrás entre la gente y le tocó el manto, pues se decía: «Con sólo tocar sus vestidos, me curo». Inmediatamente, la fuente de las hemorragias se secó y sintió que su cuerpo estaba curado de la enfermedad.

Jesús, al sentir que había salido de Él aquella fuerza, se volvió a la gente y dijo: «¿Quén me ha tocado?». Sus discípulos le contestaron: «Ves que la multitud te apretuja, �y dices que quién te ha tocado?». Él seguía mirando alrededor para ver a la que lo había hecho. Entonces la mujer, que sabía lo que había ocurrido en ella, se acercó asustada y temblorosa, se postró ante Jesús y le dijo toda la verdad. Él dijo a la mujer: «Hija, tu fe te ha curado; vete en paz, libre ya de tu enfermedad�.

R/. Amén.

Inicio página

Laudes Sal 27,9
Allelúia. Aleluya.
V/. Salvum fac, Dómine, pópulum tuum, et b�nedic hereditáti tuæ.
R/. Allelúia.
V/. Señor salva a tu pueblo y bendice tu heredad.
R/.
Aleluya.

Inicio página

Sacrificium / Canto del Ofertorio Éx 29,18; 30,6-7
V/. Allelúia.
Oblátio Dómini est odor suavíssimus víctima Dei, Allelúia, Allelúia, Allelúia.
V/. Aleluya.
Es un holocausto en honor del Señor, un olor agradable, un sacrificio en honor del Señor, aleluya, aleluya, aleluya.
V/. Allelúia.
Locátus est Dóminus ad Móysen dicens: «Pones altáre ante arcam testimónii, coram propitiat�rio, ubi loquar ad te.
Et ponet incónsum sacérdos super eum delect�bile flagrans�.
V/. Aleluya.
El Señor habl� a Moisés y le dijo: «Pondrás el altar delante del arca del testimonio, frente al propiciatorio, donde yo me encontraré contigo.
Y el sacerdote quemar� sobre Él, incienso de agradable fragancia».
R/. Odor suavíssimus víctima Dei, Allelúia, Allelúia, Allelúia. R/. Un olor agradable, un sacrificio en honor del Señor, aleluya, aleluya, aleluya.

Inicio página

Oratio Admonitionis / Monición sacerdotal
Deum, a quo avérti c�dere est, ad quem conv�rti res�rgere, a quo ex�re mori, in quo manáre vívere et cons�stere, ad quem red�re viv�scere, quem nemo qu�rit nisi ratióne comm�nitus, nemo �nvenit nisi corde purgátus, nemo am�ttit nisi erráre dec�ptus, int�ntis, fratres caríssimi, précibus, oróndo rogámus; ut in nobis qu�sátus exs�stat, neque cum fu�rit invocátus absc�dat, sed s�nsibus nostris st�dio misericórdiæ suæ se �nserat.
R/.
Amen.
Hermanos carísimos:
apartarse de nuestro Dios es sucumbir, convertirse a Él es resucitar, alejarse de Él es, morir, permanecer en Él es vivir y mantenerse, volver hacia Él es renacer; nadie lo busca sin ser aconsejado por la razón, nadie lo encuentra si no tiene el corazón limpio, nadie lo pierde si no es engañado por el error; oremos suplicando con insistentes plegarias que se haga presente, cuando se le busque, y que no está ausente cuando se le invoca, sino que se deje sentir en nuestro espíritu por la voluntad de su amor.
R/.
Amén.
Per grátiam pietátis suæ qui in Trinitáte, unus Deus, vivit et regnat in sæcula sæculórum.
R/. Amen.
Por la gracia del amor de aquel que es un sólo Dios en la Trinidad, y vive y reina por los siglos de los siglos.
R/. Amén.

Inicio página

Alia / Oración entre los Dípticos
Dómine Deus, qui tu a nobis indesin�nter rog�ris vis, et clem�nter tr�buis, ut rog�ris, qui das votum opt�nti et pie viv�nti nihil d�negas, pr�roga quod áudias, aut perfécias quod accéptas; da nobis quod ames in nobis, ut dign�ris semper exauñiri pro nobis.

Tr�bue vota fidélia,
sancta desidéria,
prompta offícia,
s�dula mystéria,
verba supplícia,
grata el�quia,
prec�nia indef�ssa;
sint puré preces,
petitiónis c�mmodæ,
supplicatiónis iust�,
rogatiónis crebr�,
laudes ass�duæ,
ut ad salútem ætérnam
ómnia præstes ómnibus,
dum invocáveris ab ómnibus.
R/. Amen.

Señor Dios, tú quieres, que, sin cesar, te recemos, y en tu bondad concedes que podamos invocarte, tú que alientas los buenos deseos y nada deniegas a los que llevan una vida honrada; inspira anticipadamente lo que deseas escuchar para poder realizar lo que te agrada; concédenos lo que deseas amar en nosotros para que puedas siempre escuchamos.

Concede que las aspiraciones sean sinceras;
los deseos, santos;
los servicios, eficaces;
los secretos, respetados;
las palabras, humildes;
las conversaciones, agradables;
las alabanzas, infatigables;
que las plegarias sean puras,
las peticiones, convenientes;
las súplicas, justas;
los ruegos, tenaces;
los encomios, constantes;
que, invocado por todos nosotros,
nos concedas a todos cuanto es necesario para alcanzar la vida eterna.
R/. Amén.

Per misericórdiam tuam, Deus noster, in cuius conspéctu sanctórum apostolórum et mártyrum, confessórum atque vírginum nómina recitántur.
R/. Amen.
Por tu misericordia, Dios nuestro, en cuya presencia recitamos los nombres de los santos Apóstoles y Mártires, Confesores y Vírgenes.
R/. Amén.

Inicio página

Post Nomina / Oración después de los Dípticos
Omnípotens sempitérne Deus, ad�sto quæsumus précibus supplic�ntium tibi propítius, et humilitátis nostræ oblatiónem att�nde placítus, ac præsta, Dómine, ut sacrifícium hoc quod offérimus, et nobis ómnibus proféciat ad salútem, et defunctis ómnibus præstátur ad r�quiem.
R/. Amen.

Dios eterno y todopoderoso, te pedimos que atiendas propicio las plegarias de los que te suplicamos, y aceptes benigno nuestra humilde oblación. concede, Señor, que este sacrificio que te ofrecemos, sea provechoso para todos nosotros y obtenga el descanso eterno para todos los difuntos.
R/. Amén.

Quia tu es vita vivórum, sánitas infirmórum ac r�quies ómnium fidélium defunctórum in ætérna sæcula sæculórum.
R/. Amen.
Porque tú eres la vida de los que viven, la salud de los enfermos, y el descanso de todos los fieles difuntos por todos los siglos de los siglos.
R/. Amén.

Inicio página

Ad Pacem / Oración de la Paz
Omnípotens Dómine, a quo est humilitátis bonum et caritátis st�dium, da quæsumus nobis ómnibus caritátis et humilitátis afféctum; ut h�miles ac pacífici in caritáte Dei et próximi vívere gratul�mur.
R/. Amen.

Señor todopoderoso, de quien proviene el bien de la humildad y el ardor de la caridad, concédenos crecer en el amor y en la sencillez, de manera que, humildes y pacíficos, nos alegremos de vivir en el amor a Dios y al prójimo.
R/. Amén.

Per te, qui es vera pax nostra et perpétua cáritas, Deus noster, et regnas in sæcula sæculórum.
R/. Amen.

Por ti, Dios nuestro, que eres la paz verdadera y la caridad perpetua, y reinas por los siglos de los siglos.
R/. Amén.

  Inicio página

Illatio / Acción de gracias
Dignum et iustum est te, Dómine, oráre semper et invocáre, qui serv�rum tuærum précibus ab inítio propitiátus �nnuis et placítus osténderis, quibus te invocántibus et benefícia pr�rogas et mirañilia patras, indulgéntiam non d�negas, benevol�ntiam præstas, et provid�ntiam dem�nstras.

Sic Móyses, mánibus in typum crucis te oróndo porr�ctis, in �malec diábolum superávit; sic I�sue �nvocans D�inum, in tanto nómine, dum hostem prost�rnit, diem tetóndit, ut Iesus noster lux vera ventúrus in exc�dio tenebrárum semper excr�sceret; sic S�muel, teste Christo, Dei evangélicis �ntonans m�nitis, pópuli dura pr�cordia précibus em�ssis, t�rbines térruit tonátruaque concíssit; sic David hymn�dicus, oratiónem grátia psalm�rum modulatiónem r�ddidit dulciórem sic S�lomon, ext�nsis et ipse mánibus, dum oróndo crucis fig�ram expréssit, templum Dómini dedic�vit; sic Asaph et I�sephat nobilíssimi reges, dum pie Dei pópulo pr�sunt hóstium catérvas imménsas prece p�tius quam ense prostr�runt; sic Ezequías, flendo dum de morte rádiit ad vitam, solis occ�duas horas conv�rtit in ortum.

Sic Elías, quasi clavem �theris ore gestáret, oratióne cœlum clausit et reser�vit; sic Elis�us, ex�nimes incumb�ndo alef�ciens artus, vivific�vit oratióne defúnctum; sic Ionas p�lago dim�rsus, ceto vorátus, nequ�quam ab oratióne cess�vit, quem in sinu�si ventris antro prec�ntem nec b�lua p�tuit lídere, nec proc�lla; sic tres oróntes púeri incóndia non sens�re rot�ntia, et crepit�ntium flamm�rum str�pitum precum concóntu vinc�re; sic in lacu D�niel oratióne leónum ávidos rictus et adaci�que ora restr�nxit.

Sic idem Dóminus noster Iesus Christus fidélis in verbis suis et sanctus in ómnibus opéribus suis, sequ�ntibus se oróndi normam, in qua sit summa salus, inst�tuit; sic oráre apóstolos et nunquam defécere imper�vit; sic pie fidelit�rque posc�ntibus quidquid oratióne cred�ntes pet�erint, se præstat�rum spop�ndit; sic ante passión.m oróndo non solum Patri discípulos commend�vit, sed étiam in passión. pro inimícis oravit; sic in déxtera Dei exaltátus pérpetim regnat et pro nobis i�giter int�rpellat.

Quem tecum, Pater, in unitáte Spíritus Sancti, cælórum ille exércitus innumer´bilis creatórem laudat, excélit, prec�tur, adórat, gloróficat, honórat, venerátur, ex�ltat, atque indef�sso præc�nio benedícit, att�llit, confitátur ac dicit:

Es justo y necesario, Señor, orar e invocarte siempre, a ti, que, desde el principio, escuchas con bondad las plegarias de tus siervos y te muestras propicio; anticipas tus beneficios a cuantos te invocan, realizas gestas maravillosas y no niegas tu perdón, otorgas siempre tu amor y muestras tu providencia.

Así, cuando Moisés te suplicó con las manos extendidas, imagen de la cruz, en Amalec venció al diablo; así, cuando Josué invocó al Señor, por la fuerza del nombre divino, prolongó el día hasta vencer al enemigo, tal como nuestro Jesús, la luz verdadera que había de venir, crecería siempre más hasta destruir las tinieblas; así, Samuel, después de haber orado, aterrorizó los duros corazones del pueblo con un vendaval y los conmovió con truenos dando testimonio anticipado de Cristo, quien har�. resonar las amonestaciones evangélicas; así David, cantor de himnos, con la gracia de la oración hizo más dulce el canto de los salmos; así cuando Salomón dedicó el templo del Señor mientras oraba con las manos extendidas también Él indicó de alguna manera el signo de la cruz; así Asaph y Josafat, nobles reyes, que guiaban al pueblo de Dios con toda piedad, derrotaron más con la plegaria que con las armas a numerosas huestes de enemigos; así Ezequías, mientras entre lágrimas volvía de la muerte a la vida, convirtió las horas del ocaso del sol en un amanecer.

Así Elías en cuya boca parecía estar la llave del firmamento, con la oración cerr� y abrió el cielo; así Eliseo, devolvió la vida al difunto con la plegaria, cuando recostado trataba de reanimar los miembros inertes; así Jonás, hundido en el mar y devorado por el pez, no cesó ni un momento en la oración, de modo que ni el monstruo ni la tempestad pudieron dañar a quien suplicaba desde el antro de las intrincadas entrañas:
así los tres jóvenes orantes, no sintieron el fuego que los rodeaba y la armonía de la plegaria pudo vencer al estrepitoso crepitar de la llamas; así Daniel en el foso por medio de la oración contuvo las «vidas fauces y las bocas decididas de los leones.

Así nuestro Señor Jesucristo, fiel en todas sus palabras y santo en todas sus acciones, dio a los que le siguen una norma para orar, en la cual consiste toda la salvación; así ordenó a los apóstoles orar sin desfallecer nunca; así prometió a cuantos suplican con fidelidad y amor concederles lo que pidan con fe en la oración; así, no sólo encomend� sus discípulos al Padre, orando antes de la pasión, sino que también, durante la pasión, or� por sus enemigos; así, exaltado a la derecha de Dios, reina por siempre y por nosotros intercede sin cesar.

A Él, contigo, oh Padre, y en la unidad del Espíritu Santo, el innumerable ejército de los cielos alaba, respeta, suplica, adora, glorifica, honra, venera, exalta como Creador, y con incansable encomio bendice, ensalza, confiesa y dice:

Inicio página

Post Sanctus / Oración después del Sanctus
Vere sanctus, vere benedíctus Dóminus noster Iesus Christus Fílius tuus; qui, repudi�ta inmund�rum contagión. lib�minum, s�mplicem ritum novæ sanctiónis ins�tuit, docu�tque discípulos suos inter hæc sacros�ncta sollémnia innocéntia pura vívere, et Deo soli hóstiam laudis off�rre.

Ipse Dóminus ac Redémptor ætérnus.

Santo y bendito es en verdad nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que, desechando la deficiencia de los sacrificios impuros, instituy� el rito simplicísimo de la nueva sanción, y con estas santas celebraciones enseñó a sus discípulos a vivir en pura inocencia y a ofrecerte sólo a ti, oh Dios, el sacrificio de alabanza.

El mismo Señor y Redentor eterno.

Inicio página

Post Pridie / Invocación
Cred�ntes, Dómine univérsa mirab�lia Dómini nostri Iesu Christi Fílii tui, atque incarnatiónis suæ et divinitátis poténtiam confitántes, in tuis láudibus exsult�mus tib�que sacrifícium láudis offérimus, rog�ntes cleméntiam tuam, summa Trínitas Deus et infiníta maiéstas, ut hæc oblátio, quam in sancto altário tuo deférimus pro nostrærum expiatióne facónorum, sit tuis óculis plácita, sit semper accépta; sim�lque �ffice, illo sancto Spíritu supervenión.e septif�rmi, benedícta quo ub�que Deus manifestátur in ea; ut, te benedic�nte, si qui ex ea lib�verit, te largión.e, et in hoc sæculo perc�piat medic�nam, et in futáro consequ�tur vitam ætérnam.
R/.
Amen.

Señor, nos alegramos en tus alabanzas, creyendo todas las obras portentosas de nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, y confesando su encarnación y la potencia de su divinidad; al ofrecerte el sacrificio de alabanza, suplicamos de tu clemencia, oh Dios, inmensa Trinidad e infinita majestad, que esta oblación, depositada sobre tu santo altar, sea agradable en tu presencia y aceptable como expiación de nuestros pecados; d�gnate bendecirla enviando tu santo Espíritu septiforme, de manera que tú, oh Dios, te manifiestes en ella; para que, si alguien toma parte en ella, con tu bendición le concedas remedio en esta vida y pueda obtener después la vida eterna.
R/. Amén.

Te præstánte, sancte Dómine, quia tu hæc ómnia nobis indígnis servis tuis valde bona creas, sanctíficas, vivíficas, ac præstas nobis, ut sint benedícta a te, Deo nostro, in sæcula sæculórum.
R/.
Amen.
Concédelo, Señor santo, pues creas todas estas cosas para nosotros, indignos siervos tuyos, y las haces tan buenas, las santificas, las llenas de vida, las bendices y nos las das, bendecidas por ti, Dios nuestro, por los siglos de los siglos.
R/.
Amén.

Inicio página

Ad Orationem Dominicam / Introducción al Padre nuestro
Simus ad Deum, fratres caríssimi, pro salúte nostra soll�citi, qui de merit�rum nostrærum non sumus felicitáte sec�ri; et quia ómnibus opus est indulgéntia Redempt�ris, ad impetr�ndam eius misericórdiam omnes unan�miter clam�mus e terris: Hermanos carísimos:
Seamos solícitos de nuestra salvación ante Dios, cuantos no estamos seguros de la eficacia de nuestros méritos; y, como a todos nos es necesario el perdón del Redentor para impetrar su misericordia digamos unánimemente desde la tierra:

Inicio página

Benedictio / Bendición
Clementíssimus Dóminus, in cuius manu est univérsa prosp�ritas, caritátis semper et pacis vobis tr�buat increm�nta.
R/. Amen.
El Señor clementísimo, en cuya mano está todo progreso, os conceda crecer siempre en la caridad y en la paz.
R/. Amén.
In bonis �ctibus unánimes atque concórdes sitis, ut a præcéptis Dómini null�tenus devi�tis.
R/. Amen.
Sed unánimes y concordes en las buenas acciones, para que nunca os desvi�is de los preceptos del Señor.
R/. Amén.
In timóre Dómini mens vestra firma permáneat, et eius vos misericórdia perénniter regat.
R/. Amen.

Vuestro espíritu permanezca firme en el temor del Señor, y os guiacute;e siempre su misericordia.
R/. Amén.

Per misericórdiam ipsíus Dei nostri, qui est benedíctus et vivit et ómnia regit in sæcula sæculórum.
R/. Amen.

Por la misericordia de nuestro Dios, que es bendito y vive y todo lo gobierna por los siglos de los siglos.
R/. Amén.

Inicio página

Completuria / Oración conclusiva
Christi Dómini nostri grátia satiáti, grátias égimus perpétuæ Trinitáti, cuius sánguine sumus pr�tio magno redímpti: p�timus ítaque sacrament�rum tuærum méritis ut de hoc sæculo nequam eripi�mur ill�si.
R/. Amen.
Demos gracias a la eterna Trinidad, saciados por la gracia de nuestro Señor Jesucristo, cuya Sangre nos redimió a precio elevado. Pedimos, pues, que por la fuerza de tus sacramentos, salgamos ilesos de este mundo malvado.
R/. Amén.
Te præstánte, summe Deus, qui in Trinitáte glori�ris in sæcula sæculórum.
R/. Amen.

Concédenoslo, Dios altísimo, glorioso en la Trinidad, por los siglos de los siglos.
R/. Amén.

Inicio página


1. Las partes variables de la misa que aquí se ofrecen (textos eucológicos, cantos y lecturas) junto al Ordinario (Liber Offerentium u Oferencio) permiten componer la misa completa. Los textos latinos son los oficiales y están tomados del Missale Hispano-Mozarabicum I (pp. 612-619) y del Liber Commicus I  (pp. 423-425). Los textos en español (no oficiales) están tomados de Gibert, Jordi y Torn�, Josep, Los domingos de Cotidiano. Cuadernos Phase nº 78, Barcelona 1997, pp. 40-45 y los bíblicos de La Santa Biblia, Ed. Paulinas.
(Se recuerda que hasta la fecha no existe misal oficial en español)
.

 

 

Índice LiturgiaInicio página

© La Ermita. España MMX