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HIMNOS DE
LA LITURGIA DE LAS HORAS HISPANO-MOZÁRABE
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YMNI DE TOTO CIRCULO ANNI
HIMNOS
PARA TODO EL A�O LIT�RGICO
Ymnus in sacratione
baselice / Himno en la consagración de una iglesia |
Ecce
te Christe tibi cara semper
Te Redemptorem omnium potentem
Supplici poscit pietate Patrem
Turba
precantum.
Hic sacra ut sedis tua
sempiterna
Perpetim constet maneatque nostris
Proxima culpis veniam perhactis
Corpore corde
Porta hic celi pateat
sedentis
Clausa damnatis reserata iustis
Veritas vita via lux et ignis
Influe mitis.
Hic homo verus Deus et
magister
Petra et pastor obis et sacerdos
Panis et vitis sator et creator
Respice
plebem
Hic manet
\[Forté,
manat] rupis latices beatos
Abluet noxas vitiis peremtis
Innobet mentes maculas remotis
Fonte
perennis
Hic caput membra propria
reviset
Lectio pascat populos aperta
Sponsus ut tradat animis amicis
Oscula sancta
Fraglet hic virtus species
decora
Summat hic dogma doceatque corda
Inriget summa dubiam patentes
Pectora vita
Lapsus et mestus pariterque
lugens
Fessus et languens simul omnis errans
Quippiam quisquis humilis precatur
Omnia prestat.
Gloriam
psallat chorus, et resultet:
Gloriam dicat, canat, et revolvat:
Nomini trino Deitati soli
Sidera clament.
R/. Amen.
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He aquí, Cristo, la
multitud de los que ruegan,
para ti querida siempre,
pidiéndote con piedad suplicante a ti, Padre,
poderoso redentor de todos.
Que tu sede aquí consagrada se mantenga
perpetuamente eterna y permanezca cercano
el perdón para las culpas cometidas
por nuestro cuerpo y por nuestro corazón.
Que la
puerta del cielo est� aquí abierta a los redimidos,
cerrada a los condenados, accesible a los justos;
verdad, vida, camino, luz y fuego,
desciende con mansedumbre.
Aqu�, hombre
verdadero, Dios y maestro,
piedra y pastor, oveja y sacerdote,
pan y vid, sembrador y creador,
mira por tu pueblo.
Aquí la roca
mane benditas aguas,
lave nuestras injurias destruyendo los vicios,
renueve las almas quitando las manchas
con su fuente perenne.
Aquí la
cabeza vuelva a ver a sus miembros
la lectura clara alimente a los creyentes,
para que el esposo d� a las almas amigas
ósculos santos.
Brille aquí
la virtud hermosa por su aspecto,
aquí la doctrina retenga y enseñe a los corazones,
que la vida suprema riegue
el pecho vacilante del que pide.
El caído y
el afligido y también el que llora,
el cansado y el débil, al mismo tiempo todo el que se extravía,
quienquiera que te pida algo con humildad,
concédeselo todo.
Salmodie el
coro gloria y exulte,
diga, cante y repita gloria;
al nombre trino, única deidad,
aclamen las estrellas.
R/. Amén. |
Ymnus in anniversario
sacrationis baselice / Himno en el aniversario de la
consagración de una iglesia |
Christe
cunctorum dominator alme
Patris eterni genitus ab ore
Supplicum vota pariter et ymnum
Cerne
benignus
Cerne quod puro Deus in
honore
Plebs tua supplex resonet in aula
Annua cuius reveunt colendum
Tempore
festum
He
[Hæc] domus rite tibi
dedicat
Noscitur in qua populos sacratum
Corpus adsumit bibit et beati
Sanguinis
austum
Hii sacrosancti latices
veternos
Diluunt culpas perimuntque noxas
Crismate vero genus ut creetur
Christicolarum
Hic salus egris medicina
fessis
Lumen orbatis veniamque nostris
Fertur offensis timor adque meror
Pellitur
omnis
Demnis seva perit hic rapina
Pervicax montrum pavet et retemta
Corpora linquens fugit hic remotus
Ocius umbras
Hic locus nempe vocitatur
aula
Regis inmensi niveaque celi
Portaque vite patriam petentes
Accipit omnes
Turbo quam nullus quatit aut
vagantes
Diruunt venti penetrantque nimbi
Non tetrus ledit piceus tenebris
Tartarus
orrens
Quesumus ergo Deus ut sereno
Annuas vultu famulos gubernans
Qui tui summo celebrant amore
Gaudia templi
Nulla nos vite cruciet
molestas [molestia]
Sint dies leti placideque noctes
Nullus ex nobis pereunte mundo
Sentiat ignes
Hic dies in quo tibi
consecratam
Conspicis aram tribuat perennem
Gaudium nobis vigeatque longo
Tempore husu
Gloriam summo resonet
Parenti
Gloria Christo pariterque sancto
Spiritui dulci modulemur ymno
Omni per evo.
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Cristo, soberano santo del
universo,
nacido de la boca del Padre
eterno,
mira benévolo los votos y el himno
de los que te
suplican. Mira, Dios, lo que tu pueblo suplicante
hace resonar en tu
honor
puro en este palacio,
cuyo aniversario trae de nuevo
este
tiempo festivo para honrarlo.
Sabemos que a ti ha sido consagrada ritualmente esta casa,
en
la
que tu pueblo toma tu sagrado cuerpo
y bebe la bendita bebida
de tu sangre.
Aquí las sacrosantas aguas lavan las viejas culpas
y destruyen
nuestras injurias con el crisma verdadero,
para que nazca el
linaje
de los cristianos.
Aquí se da salud a los enfermos,
remedio a los debilitados,
luz a
los ciegos
y perdón a nuestras ofensas;
todo temor y tristeza
son
alejados.
Aquí desaparece el cruel saqueo del demonio,
se llena de
terror
el obstinado monstruo
y, soltando los cuerpos que retenía,
huye rápidamente a las remotas sombras.
Este lugar es llamado sin dudarlo
palacio del rey inmenso y
n�vea
puerta del cielo,
que acoge a todos los que buscan
la patria de vida.
A la que ningún torbellino sacude
ni los errantes vientos
derriban
ni las lluvias penetran ni daía el horrible y sombrío t�rtaro
con sus negras tinieblas.
Por eso te pedimos, Dios,
que con rostro sereno apruebes
y
guíes a tus siervos,
que con sumo amor a ti celebran
los gozos
de tu templo.
Que ninguna inquietud de esta vida nos atormente,
que sean
alegres los días y pl�cidas las noches,
que ninguno de nosotros
sienta las llamas
cuando el mundo perezca.
Este día, en el que contemplas el ara a ti consagrada,
nos
conceda perenne gozo
y florezca en el prolongado
paso del
tiempo.
Resuene gloria al Padre sumo,
gloria a Cristo e igualmente
al
Espíritu Santo;
cantúmosle con un dulce himno
por toda la
eternidad |
Ymnus in restauratione
baselice / Himno en la restauración de una iglesia |
O
beata Iherusalem
Predicanda civitas
Que tuis leta triumfis
In supernis civibus
Innobata regis amplo
Claritatis stigmate
Fulgidum gestans honorem
Plena mater filiis
Pacis alme gloriosis
Letabunda finibus
Rite restaurata claro
Sanctitatis lampade
Hic tui templi refulget
Sanctior memoria
Jure restaurationis
Lucido fundamine
Quum decoris pollet hacto
Dignitatis sidere
Te precamur hic adesse
Conditor sanctissime
Hicque promtus consecrandis
Sedibus inlabere
Adque consecrator ipse
Hic adesto iugiter
Iam templum tui honoris
Effice nos servulos
Non caro non corda nostra
Militent discrimini
Set tuo sacro dicati
Serviamus nomine
Hic tui altaris aram
Quum decoris gloriam
Rite rursus preparatam
Rex superne visita
Hic tua virtus redundet
Hic honor refulgeat
Regis hoc altare summi
Sit coruscum lumine
Sit honore mancipatum
Sit repletum munere
Sit beatum sit serenum
Sit placens Regi Deo
Hic tibi nostrorum alma
Cordium altaria
Consecra superne index
Innobans nos gratia
Sedibus inlapse donans
De supernis munera
Ut tibi per omne seclum
Trinitas sanctissima
Sit honor inmensa virtus
Et perennis gloria
Qui Deus in Trinitate
Permanes in secula.
Amen.
|
Oh Jerusalén santa,
ciudad digna de alabanza,
que, alegre por
tus triunfos
en los ciudadanos del cielo,
has sido renovada con
el brillante signo
del rey de la luz. Ostentas un brillante honor,
madre de muchos hijos,
llena de
alegría
en las regiones gloriosas de la paz divina,
restaurada
ritualmente
con la reluciente antorcha de santidad.
Aquí el recuerdo de tu templo
resplandece más santo por su
restauración
conforme a la ley,
por su luminoso fundamento,
cuando destaca con el acrecentado brillo
de su decoro y nobleza.
Te rogamos, santísimo creador,
que te muestres aquí
y aquí
desciendas dispuesto
a consagrar esta morada
y muéstrate aquí
siempre como consagrante.
Haznos ya a nosotros,
tus humildes siervos,
templo de tu
gloria,
no militen para la discordia
ni nuestro cuerpo ni nuestros
corazones,
sino que te sirvamos consagrados a tu santo nombre.
Visita aquí, rey celestial,
con la gloria de tu majestad
el
ara de
tu altar
de nuevo ritualmente restaurada,
rebose aquí tu fuerza,
resplandezca aquí tu gloria.
Que este altar del rey sumo
sea brillante por su luz,
est�
consagrado
a su gloria,
est� lleno de gozo,
sea santo, sea sereno,
sea
grato a Dios rey.
Aqu�, juez celestial,
consagra a ti los santos altares d
e
nuestros
corazones,
renovándonos por tu gracia,
concediéndonos los
dones
bajados de las moradas celestiales;
Que en todo tiempo,
Trinidad santísima,
sea el honor, la
inmensa
fuerza
y la eterna gloria a ti,
que permaneces Dios en la
Trinidad
por los siglos.
Amén. |
NOTAS
1. Textos latinos tomados del Breviarium Gothicum,
ff. CVIII-CIX (Ymni de toto
circuli anni). La doxología del himno Ecce te Christe,
indicada por las palabras iniciales Gloriam psallat, se completa
con el texto que figura en otros himnos del Breviario. Lo que va entre
corchetes [ ] son correcciones añadidas por
el propio Breviario.
Traducción: Castro Sánchez, José (introducción, traducción,
índices y notas) - García Ruiz, Emilio (col.), Corpus christianorum
in translation, 19. Himnodia Hispánica. Ed. Brepols, Turnhout 2014,
pp. 501; 503-506. Doxología himno Ecce te Christe, p. 53.
Se recuerda que
hasta la fecha no existe traducción oficial de Breviario.
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