La Ermita. Rito hispano-mozárabe

 

EL OFICIO DIVINO O LITURGIA DE LAS HORAS

Breviario

 

HYMNUS / HIMNO (1)

Pange lingua gloriosi
(Feria Sexta in Parasceve. Ad tertiam. Ad salutationem Ligni Domini / Viernes Santo. Tercia. Veneración de la Cruz)
   Pange lingua gloriosi
Praelium certaminis,
Et super Crucis trophaeum
Dic triumphum nobilem:
Qualiter Redemptor orbis
Immolatus vicerit.

   De parentis protoplasti
Fraude facta condolens,
Quando pomi noxialis
Morte morsu corruit:
Ipse lignum tunc notavit,
Damna ligni ut solveret.

   Hoc opus nostrae salutis
Ordo depoposcerat,
Multiformis proditoris
Ars ut artem falleret:
Et medelam ferret inde,
Hostis unde laeserat.

   Quando venit ergo sacri
Plenitudo temporis,
Missus est ab arce Patris
Natus, orbis conditor;
Atque ventre Virginali
Caro factus prodiit.

   Vagit infans inter arcta
Conditus praesepia:
Membra pannis involuta
Virgo Mater alligat:
Et manus, pedesque, crura
Stricta cingit fascia.

   Lustra sex qui jam peracta
Tempus implens corporis,
Se volente, natus ad hoc
Passioni deditus,
Agnus in Crucis levatur
Immolandus stipite.

   Hic acetum, fel, arundo,
Sputa, clavi, lancea:
Mite corpus perforatur:
Sanguis unda profluit:
Terra, pontus, astra, mundus
Quo lavantur flumine!

   Crux fidelis, inter omnes
Arbor una nobilis:
Nulla silva talem profert
Fronde, flore, germine:
Dulce lignum, dulces clavos,
Dulce pondus sustinet.

   Flecte ramos arbor alta,
Tensa laxa viscera;
Et rigor lentescat ille,
Quem dedit nativitas:
Ut superni membra Regis
Miti tendas stipite.

   Sola digna tu fuisti
Ferre pretium saeculi;
Atque portum praeparare
Nauta mundo naufrago,
Quam sacer cruor perunxit
Fuso Agni sanguine.

   Laus tibi per omne tempus
Trinitas indifferens:
Laus, honor, virtusque summa,
Singularis gloria;
Quae te Deum saeculorum
Personet in saecula.
   Amen.

   Cantemos la nobleza de esta guerra, el triunfo de la sangre y del madero; y un Redentor, que en trance de Cordero, sacrificado en cruz, salv� la tierra.

   Dolido mi Señor por el fracaso de Adán, que mordi� muerte en la manzana, otro árbol señal� de flor humana, que reparase el daño paso a paso.

   Y así dijo el Señor: "�Vuelva la Vida, y que el Amor redima la condena!" La gracia está en el fondo de la pena, y la salud naciendo de la herida.

   ¡Oh plenitud del tiempo consumado! Del seno de Dios Padre en que vivía, ved la Palabra entrando por María
en el misterio mismo del pecado.

   ¿Quén vió en más estrechez gloria más plena, y a Dios como el menor de los humanos? Llorando en el pesebre, pies y manos le faja una doncella nazarena.

   En plenitud de vida y de sendero, dió el paso hacia la muerte porque Él quiso.
Mirad de par en par el paraíso abierto por la fuerza de un Cordero.

   Vinagre y sed la boca, apenas gime; y, al golpe de los clavos y la lanza, un mar de sangre fluye, inunda, avanza por tierra, mar y cielo, y los redime.

  ¡Oh cruz fiel, árbol único en nobleza! Jam�s el bosque di� mejor tributo en hoja, en flor y en fruto. «Dulces clavos! «Dulce árbol donde la Vida empieza con un peso tan dulce en su corteza!

   Abl�ndate, madero, tronco abrupto de duro corazón y fibra inerte; dobl�gate a este peso y esta muerte que cuelga de tus ramas como un fruto.

   Tú, solo entre los árboles, crecido para tender a Cristo en tu regazo; tú, el arca que nos salva; tú, el abrazo de Dios con los verdugos del Ungido.

   Al Dios de los designios de la historia, que es Padre, Hijo y Espíritu, alabanza; al que en la cruz devuelve la esperanza de toda salvación, honor y gloria. Amén.

   Alabanza a ti por siempre, etc.

(1) Versión en español (excepto conclusión) de la Liturgia de las Horas del Rito Romano.

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