Christe
Rex, mundi Creator,
Et Redemptor inclyte,
Vota plebis obsecrantis,
Tu benigne suscipe:
Supplici voce precamur,
Postulatus adveni.
Mortis olim tu
potenter
Vincens ut princeps,
Tartara s�va petisti
Dira claustra diruens,
Ferrea vincla resolvens,
Et retrusos eximens.
Hoc triumpho
confitentes,
Mente prona quæsumus;
Mortis ut tu des quietem,
Cum quiete gaudium:
Dexter� Patris trophéo
Cum beatis omnibus.
Non eos flamma
perurat:
Non catena vinciat:
Vermis illius pavendi
Nemo poenam sentiat;
Sed tuo dono beati,
Absque fine gaudeant.
Pr�stet hæc Unitas
semper,
Atque summa Trinitas;
Cujus est perenne nomen
Sempiterna claritas;
Ac Deus trinus, et unus
Regnat ante sæcula.
Amen.
|
Cristo
Rey, Autor del mundo
y Redentor admirable,
suplicamos confiados
que nos escuches benigno,
que nuestras voces te alcancen
y nos llegue tu perdón.
A la muerte en otro tiempo
venciste como un guerrero,
llegaste al profundo infierno,
destruyendo calabozos,
rompiendo yugos de hierro,
liberando a los reclusos.
Al confesar este triunfo,
con decisión te pedimos
que nos des descanso eterno
y con el descanso, gozo:
de la derecha del Padre
corona entre los dichosos.
Que no los quemen las llamas,
ni las cadenas los aten,
de aquel horrendo gusano
nadie sienta los mordiscos;
dichosos en tu regazo
lo disfruten para siempre.
Lo conceda tu Unidad,
tu Trinidad lo confirme,
pues ese nombre perenne
está envuelto en claridad
y Dios es trino y es uno
y reina en la eternidad.
Amén.
|